1-Astoreth: El Imperio de los Mestizos®

Epílogo

Epílogo.

Sala del trono, palacio de Rhyllith.

-Esa chica es astuta, ¿No lo crees? –preguntó el rey Esténelo, mirando por las ventanas de su sala del trono, el reino a sus pies es un paraíso en la tierra, el hogar de los ángeles. Toda la extensión del reino es una gran ciudad construida en ladrillos de piedra blanca, con hermosas tejas de un tono verde esmeralda, que brillan a la luz del sol. El césped y las plantas crecen en abundancia, y los habitantes tienen vidas prosperas y seguras.

 -Más de lo que desearía. –contestó la jovencita a su lado, una chica de catorce años con el pelo dorado y los ojos  azules e inquietos como el mar tormentoso, cualquiera podría atreverse a decir que su piel emite destellos dorados bajo la luz, y todos los que la ven pueden asegurar que están alucinando, ya que creen ver un Ángel.

-Usarás tu poder, te infiltrarás entre ellos, harás que Layna crea que la buscas, que me traicionaste para estar junto a ella, porque para ti siempre ha sido tu hermana mayor. –sentenció Esténelo. –Júrame que no me traicionarás como Layna, y que usarás tu don en su totalidad para mi causa.

-Yo, princesa de Rhyllith y de todas las tierras de los hijos de Azaziel, prometo usar mi don para la causa de mi reino y mi rey. Todo lo que haga será total y indudablemente por el bien de los Hijos de Azaziel. Que en su gloria veneren mi promesa. –dijo ella, ocultando tras ella sus dedos entrelazados. –Mi poder de cambiar está totalmente a su disposición, mi rey.

Claro, el cambio. Pero la mentira también es casi un don, y lo sé usar para mi beneficio.

-¿Sabes a qué te enfrentas? –preguntó el rey, aunque su hija fuera totalmente fuerte y fiel, también era una niña.

-Twilia Scott, telepatía, única en su tipo. Suzan Lockhart, mediumnidad, viroquinesis, también puede leer campos mentales. Layna Hutton, persuasión y visión remota. Wilhem Lockhart, increíble don de la fuerza y rapidez en grandes magnitudes, también tiene el don del control absoluto de la materia, y según fuentes varias, también supongo que tiene el don de escudo, el de evadir los ataques mentales. –dijo como si fuera un robot. –Elliot Stecker, bilocación, y también tiene el don de abandonar su cuerpo por cortos lapsos de tiempo, en esos segundos lo habita un alma que puede proyectar imágenes futuras o pasadas, psicografía. Allegra Cold, ergoquinesis, manejo de la energía en todas sus formas.

-También es muy probable que Electrión mande a su hijo.

.-Frederick, príncipe de los hijos de Axariel. Puede manejar el agua y todos los líquidos, la tierra y todos los minerales, el fuego y los rayos, y también el aire. Sus dones tienen tantas probabilidades de uso como los míos. Irá en busca de ellos, lo sé. Porque ahí se encuentra su amada Nébula, o mejor llamada Suzan. No se me acerca, ninguno de ellos podrá conmigo, puedo absorber sus dones y usarlos en contra de ellos.

-No seas arrogante, no puedes dominar el don de Layna, probablemente tampoco el de su hermana. No sabemos aún de los otros dos.

-No puedo aún, pero lo lograré. Solo necesito cierta ayudita. –contestó la chica. Luego se acercó al ventanal de la sala y simplemente saltó los tres pisos que la separaban del suelo, no es que tuviera alas de Ángel, pero es ciertamente indestructible, su segundo don, un peligro para quien la amenace: Cambiar partes de su cuerpo a beneficio, piel blindada, huesos de acero, branquias.

Al mismo tiempo, en Yggdrail.

-¿Entiendes el plan? –preguntó un hombre, sentado en el trono del palacio de Yggdrail, por los enormes ventanales se veía todo el reino, Yggdrail, Rhyllith y Owryslia tenían el mismo sistema de construcción concéntrica, con los palacios rodeados por sus reinos, pero a diferencia de los otros dos, el palacio de Yggdrail de alza a pies de un enorme precipicio, y la ciudad está hecha para rodear toda la parte del palacio que no da a la pared de piedra.