𝕲𝖗𝖆𝖓𝖎𝖟𝖔 𝖉𝖊 𝖑𝖚𝖓𝖆 • [𝙷𝚒𝚜𝚘𝚔𝚊 𝙼𝚘𝚛𝚘𝚠]

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟓.𝟏

—Una ultima advertencia —Hablaba aquel peli morado haciendo que la atención de todos los demás se mantuviese fija en el por completo. Mientras prestaba toda atención auditiva a sus palabras, dirigía de manera disimulada mi vista a todos y cada uno de aquellos participantes que se encontraban en la sala, en búsqueda de Gon—Si no tienen suficiente suerte o habilidad, podrían acabar gravemente heridos e incluso muertos —Dice aquel hombre peli morado continuando con su charla/advertencia— Aquellos que acepten el riesgo, por favor, que me sigan. Los demás pueden salir con el ascensor que tienen detrás.

Estoy segura de que todos los participantes presentes no vinieron y aprobaron todas esas tediosas pruebas de selección para llegar hasta aquí para luego irse de esa manera tan absurda y ridícula como si nada fuera, todos, o almenos la mayoría supondría yo, sabemos a la perfección la cantidad de inmensurables riesgos que este examen trae siempre consigo, y no suponemos negarlos e irse para luego pretender gozar de una seguridad relativamente estable, cosa que la verdad en este punto dudo rotundamente de su existencia.

—Ya ha empezado el examen, lárgate como dijiste que lo harías —Dice Iyana en un pequeño susurro que demuestra estar lleno de ira, cosa que a este punto no me extraña en lo más mínimo, si bien prometí irme, cosa que claramente haré, almenos intentaré no mantenerle fuera de vista por el momento.

—Se prudente Iyana, almenos por favor, solo por ahora, de aquí en adelante no podre estar vigilandote y solucionando cada tontería que se te ocurra hacer para joderme la vida —Hablo en un tono de voz bajo con la intención de que solo Iyana pueda escuchar mis advertencias, cosa que como si fuera ya extraño, parece enojarle demasiado, inclusive dirige de una vez por todas su irascible mirada hacia mi con la clara intención de hacer un reclamo, a lo que decido interrumpirla en el instante para evitar montar una ridícula escena de la cual sería protagonista— No es momento de hacer escandalos Iyana, calmate, iré con los demás como te lo prometí, haz lo que quieras hacer ¿si?, pero cuídate por favor.

No aspiro a que me conceda una respuesta ni nada por el estilo, más bien diría que todo lo contrario a aquello, puesto que antes de que diga una sola palabra le doy la espalda dirigiéndome hasta la ubicación de Gon, cuando me dispuse a seguir mi camino puedo ver ahora que el hombre con pinta de arlequín no se ha molestado ni un poco en disimular su perversa mirada que mantenía fija en mi desde hace unos minutos. Le miro fijamente transmitiéndole un mensaje claro de advertencia respecto a Iyana, lo que creo que tuvo un inproductivo efecto contrario, puesto que me pareció verle sonreír aún más, podría jurar que si se lo proponía, podría alargar su sonrisa hasta llegar sin problemas a sus orejas. No debería haberme metido con él, pero ya no puedo hacer nada al respecto. Decido simplemente dejarlo pasar y de una vez por todas ir junto a Gon y los demás, por más atrayente que ese extraño tipo fuera, no quería estar cerca de él ni un solo segundo más, el olor a peligro que desprende infinitamente de el como si fuese una caldera de sopa que inunda una casa con un profundo y sensible olor a tomate.

Ya me puse lo suficiente en peligro por hoy.

—¡Oh!, Mika-chan —Debo admitir de manera honesta que me agrada que Gon me llame de esa manera.

—Muy bien —Habló ahora aquel hombre que me daba la impresión de tratarse de un examinador—Los 407 aspirantes participaran en la primera fase.

Dicho esto giró sobre sí mismo de manera exagerada dándonos la espalda a todos los aspirantes , para posteriormente alzar su pie derecho y mano izquierda de una manera realmente dramática y teatral, y luego caminar hacia adelante como si de una comedia sobre actuada de pasarela de modas se tratase, una manera singular de caminar que logró hacerme bastante gracia siendo sincera.