𝕲𝖗𝖆𝖓𝖎𝖟𝖔 𝖉𝖊 𝖑𝖚𝖓𝖆 • [𝙷𝚒𝚜𝚘𝚔𝚊 𝙼𝚘𝚛𝚘𝚠]

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟗.𝟏

Al retirar el papel de la tarjeta no pude evitar soltar una pequeña risa irónica, de los veinticuatro números que pudieron haber aparecido en esa tarjeta tenía que ser justo el numero de identificación de Iyana.

—La tarjeta les indica su objetivo —Explicó el administrador. Lo cual aumenta reconfortantemente mi preocupación, Sería una mentira muy descarada si dijera que lo hago por cariño a Iyana, pero para bien o para mal es lo único que queda de mi hogar, por lo cual me reconforta ser yo quien vaya contra ella antes que vaya alguien que esté dispuesto incluso a matarle para arrebatarle su placa— Esta caja grabó el número de tarjeta que sacaron cada uno de ustedes. Lo cual quiere decir que pueden deshacerse de ellas si así lo desean. El objetivo es robar la placa de identificación de su objetivo. Y por supuesto, son libres de usar cualquier método que deseen para recuperar las placas. Pueden matarlo para luego quitarle la placa con tranquilidad. ¡Escuchenme bien! —Exclama alzando su brazo— La placa de su objetivo vale tres puntos. Su propia placa también vale tres puntos. Todas las demás valen un punto. Necesitan seis puntos para pasar a la fase final. Así que en isla Zevil, tendrán que conseguir placas suficientes como para sumar esos seis puntos. Esa es la condición para superar la cuarta fase el examen de Cazador.

—¡Me gustaría felicitar a todo el mundo por su excelente trabajo durante la tercera fase del examen de Cazador! —Exclama con entusiasmo una chicha de cabellos naranjas. Ahora mismo nos encontrábamos en un pequeño borco a vapor que iba en dirección a la isla Zevil— Yo seré su guía. ¡Me llamo Khara! Este barco tardará dos horas en llegar a la isla Zevil. ¡Los veinticinco aspirantes que aquí quedan están automáticamente cualificados para el examen del año que viene! —Termina la oración guiñandonos un ojo, por alguna razón la chica parecía estar muy feliz— Así que si este año no logran aprobarlo, no tienen porqué deprimirse. Por favor inténtenlo de nuevo el año que viene... Bueno, pueden hacer lo que deseen durante las dos horas de viaje. Disfruten le viaje, ¿Si? —Dice sin apagar el ánimo en su voz mientras procede a retirarse.

Naturalmente me encontraba sentada junto a Gon y Killua sobre la cubierta de madera del pequeño barco. Leorio y Kurapika se encontraban juntos sentados a unos metros de nosotros, Haru como de costumbre estaba sentado en silencio en un rincón mirando a la nada. No lo había notado antes pero parece que sus heridas ya no le representan obstáculo alguno lo cual me extraña. Takeo y Saki se encontraban juntos en el lado contrario al nuestro sosteniendo la baranda y mirando el mar como si fuese la mejor cosa que hubiesen visto en toda su vida, me uniría a ellos de no ser de que viví toda mi vida cerca del mar, ya he tenido suficiente de él.

—¿Que número sacaron? —Killua rompió el silencio con un tono de voz tímido a simple vista.

—¿Y tu? —Gon se adelanta a responder.

—Es un secreto.

—Babosito, ¿Para que preguntas entonces? —Me apresuro a contestar a Killua con burla.