De pie (✔)

Eric.

Los años comienzan a pasar más rápido de lo que pensé.

Me siento en la cama, observando a Melanie dormir a mi lado. Me estiro y camino hasta la ducha.

Bajo el agua pienso como todo mi pasado me formó para el ahora. Si no hubiese caído tan bajo, quizás nunca hubiese aprendido a amar el presente.

Estar con Melanie y con Susi a mi lado, aquí en Chicago es lo mejor que le ha pasado a mi vida.

Ellas hacen que mis días sean mejores.

Salgo de la ducha y camino con la toalla enrollada en mi cintura, al llegar Melanie ya ha despertado, ella se estira perezosamente en la cama

—Buenos días, amor —me inclino para darle un beso, ella se sienta y lo recibe gustosa.

—Buenos días —se vuelve a tumbar en la cama y se tapa con la sábana.

—No seas perezosa, ¿recuerdas el gran día que es hoy? —cuestiono vistiéndome.

—¡Como podría olvidarlo! Anoche casi no dormí, estoy demasiado nerviosa —se sienta de nuevo en la cama.

—Todo saldrá bien, estaremos contigo, apoyándote. Además, ya tienes muchas inscripciones para los cursos, tienes a las profesoras y profesores, nada puede salir mal ya que todo fue hecho con mucho amor —le doy apoyo, ella se pone de pie y camina peinando su cabello con ambas manos.

—Gracias por todo amor, eres el mejor de la vida —se pone en puntas y me da un beso.

—¡Es hoy! ¡Es hoy! —entra Susi gritando a la pieza— mamá, ¡Ya deberías estar vestida! —pone sus manos en la cintura algo molesta.

—Ya voy, Mariposa —Melanie pasa por su lado y deposita un beso en su frente, ella cierra los ojos recibiéndolo.

—Deberías aprenderle a Eric, él ya está listo —me apunta, yo camino y choco las palmas con ella.

—Dame las cinco —me río— vamos, dejemos que tu mamá se prepare, debemos hacer el desayuno. Aún hay tiempo —ella asiente y camina conmigo.

Han pasado dos años desde que con Melanie decidimos comenzar nuestra historia nuevamente. Actualmente Susi tiene once años, y se ha convertido en toda una bailarina como su mamá, claramente ella aprendió de la mejor.

Hoy es uno de los días que más hemos esperado con Melanie, hoy por fin ella abrirá su academia de danza. Ella cumplirá uno de sus tantos sueños.

Y esto la trajo a vivir conmigo, aquí en Chicago.

Ella decidió que debía abrir una academia, para enseñarle a más niñas a danzar. Tendrá muchas becas para residentes y extranjeros. Hemos estado trabajando en este proyecto por más de un año.

Susi claramente es una de las más entusiasmadas.

Cuando Melanie me contó de su nuevo sueño, la apoyé desde el primer momento, sin saber dónde sería esto.

Ella decidió venir a Chicago, comenzar acá y así estar juntos los tres.

Pero no sólo eso, ella trajo a Gabriela para que la ayude en todo. Es su mano derecha en este proyecto.

Mamá se quedó en Nueva York, ella dijo que se encargaría de los orfanatos, pero claramente es también por su nueva pareja, de quién no tengo quejas, si ella es feliz yo también.

Apenas supe que Melanie se vendría a vivir conmigo busqué una casa con ayuda de Susi, era una sorpresa para Mel.

Ella la amó, la decoramos juntos y estamos viviendo aquí, con Susi y Gaby.