Extravagante y hermoso.

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Seis años antes.

Mel.

El día que murió el padre de Eric fue uno de los peores que he pasado en Estados Unidos. Fue tanto el dolor que sentí, que tuve que viajar a casa, necesitaba sentir a mi padre conmigo.

Cuando Demian llamó a Roxane, yo no sabía qué hacer, una lucha interna se instaló en mí.

No quería molestarlo, eso era difícil para él. Pero quería verlo, necesitaba abrazarlo y decirle que sea fuerte. Sé que Eric es muy fuerte, él ha pasado por muchas cosas.

Por eso nadie comprendía que le había pasado. En los últimos años era una persona irreconocible, no había semana en la que no estuviera involucrado en algo o con alguien. Eric estaba siendo consumido por la fama y el dinero. Y nunca peleó porque no fuera así, él solo se dejó llevar, hasta parecía disfrutarlo cuando lo mostraban en televisión.

Muchas veces quise decirle que él era más que eso, sobre todo cuando veía a Gaby fallar en clases por su culpa. Sus padres no estaban bien. Gabriela confiaba en mí y es por eso que me contó.

Los padres de Eric estaban a punto de separase cuando fue el accidente, ellos estaban mal y parte de eso era culpa de Eric, él sin querer los hacía pelear constantemente. Gabriela los veía discutir, todo había cambiado en los Irving, todos y cada uno de ellos habían cambiado. Incluso Gaby demostró ser más resiliente de lo que ella misma creía ser.

Pero no puedes ser tan resiliente como quieres cuando tu hermano aparecía en televisión por puras cosas malas, escándalos y chicas.

Ella me pedía que hablara con él y muchas veces estuve a punto de hacerlo, pero ¿no fui yo quién le pidió que se fuera? No podía sólo volver y decirle que se calme, que vuelva a ser él. Simplemente porque yo ya no sabía quién era él realmente, Eric cambió mucho con el paso de los años. Solo espero que la muerte de su padre lo haga volver a poner los pies en la tierra.

Tiro mi bolso al auto de Rosi. Ella me observa y se sube a su lado para conducir.

—¿Estas lista para esto? —cuestiona dando marcha al auto.

—Creo que sí —respondo abrochando el cinturón. Hoy iremos a Coney Island, los chicos nos llamaron diciendo que iba haber una de los carnavales más grandes que se realizan allá, por lo que nos invitaron a pasar el fin de semana con ellos. Me da algo de nervio, con Evan llevamos conociéndonos más un par de semanas y me gusta bastante, me hace sentir cosas que en años no sentía. Pero no me siento preparada para una relación, mucho menos después de volver a ver a Eric y darme cuenta que aún siento cosas por él. Fue algo que me dejó sin palabras, cuando lo vi en el cementerio sentí muchas cosas, Eric por más cambiado que estuviera seguía siendo el mismo que yo conocí, y ese día lo vi tan indefenso e inestable. Yo solo quería abrazarlo, solo quería quedarme con él en ese momento para siempre.

—Yo digo que sólo nos dejemos llevar, ¡que el destino nos sorprenda! —Rosi acelera más el auto mientras yo busco alguna canción buena.

Una hora más tarde estamos entrando en Coney Island, es un lugar grande y bonito a orillas del mar.

No sabía que tan feliz me hacía esto hasta que comencé a disfrutar sin cuestionarme nada, no sabía que tan feliz podía volver a ser con un chico hasta que conocí a Evan.

Llegamos a la dirección que envió Félix, bajamos del auto para sacar nuestras cosas cuando lo veo. Evan está conversando con Félix, ellos notan enseguida nuestra presencia.

Yo intento relajarme, Evan me pone muy nerviosa. Hemos pasado unas cuantas noches juntos, en fiestas y en la cabaña. Y él es una mezcla entre encantador y sexy. Puede cambiar rápidamente de pensamientos y palabras. Y eso me gusta mucho de él.

De pie (✔)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora