Capitulo 23

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Los personajes de Naruto, no me pertenecen, yo solo los uso para escribir esta historia sin fines de lucro.

Sasuke regresó al hospital por pedido de Tsunade, para que lo revisaran. Estaba por entrar a dónde se hallaba la Yamanaka, cuando la divisó junto a Hinata. Ellas se dirigieron afuera, seguramente por la hora de comer. No quería que nadie mas lo revisara, así que opto por seguirlas, para ir con ellas.

Apenas salió, alcanzó a ver, que una joven se presentó frente a ellas. La chica se veía golpeada y con algo de sangre sobre la ropa.

—¡Sasuke!—escuchó que lo llamaban—espérame—Sakura le dio alcance, logrando que por un momento mirara hacia atrás, perdiendo de vista a las dos chicas, con la joven herida—Te toca revisión ¿a donde vas?—cuestiono la pelirosa.

—¿A donde se fueron?—corrió hacia el lugar dónde estaban las dos kunoichis, pero ya no había rastro de ellas.

—¿Quienes? ¿De quien hablas?—Sakura, veía en todas las direcciones, imitando al Uchiha.

—Ino y Hinata, las dos estaban aquí, cuando me llamaste—algo no estaba bien y podía sentirlo—Una niña herida estaba con ellas, pero nunca antes, la miré por aquí—Danzo atestaba al acecho y no podían bajar la guardia—Ayúdame a buscarlas—ambos buscaron por los alrededores y no obtuvieron resultados.

—Será mejor avisar a todos—sugirió la fémina y el azabache estuvo de acuerdo.

—Ve con el Hokage, yo continuaré por aire—antes que la chica pudiera decir algo, el Uchiha invocó un halcón y subió en él, para revisar desde arriba.

Salió de la aldea arriba del ave, cuando miro un grupo de Anbus con otras personas, entre ellas, la joven que apareció frente a sus amigas. En medio de todos estaban ellas y en cuestión de segundos ya eran sostenidas por un sujeto. Debía darse prisa antes que se las llevarán. Lanzó varios kunais desde lo alto, llamando la atención del grupo.

—Deténganse—les ordenó.

—Sigan... yo me haré cargo—les indicó Haku, al grupo de delincuentes.

—Ten cuidado Haku, solo entretenlo, no tienes que enfrentarlo—le sugirió Zabuza, antes de salir corriendo junto a los otros Anbus. No era buena idea enfrentar a un Uchiha, porque los podían poner, en horribles Genjutsus, logrando inclusive, hasta enloquecer a cualquiera que los mirara directamente a los ojos.

Sasuke se percató de lo que pensaban hacer y se apresuró a seguirlos, pero Haku lanzó unas agujas senbon en dirección al halcón, logrando golpear el ave. El azabache salió disparado sobre los árboles, dándoles el tiempo suficiente a los hombres de Danzo, para escapar de él. Aún mostraba algunos hematomas, producto de la batalla con Deidara y ya se tenía que enfrentar a otra batalla, con un sujeto de aspecto afeminado. El problema era, que si perdía el tiempo con él, perdería el rastro de sus compañeras, dejándolas en garras de ese mal nacido.

Se sacudió dispuesto a seguir a los captores, no tenía tiempo que perder.

—¿Me crees un contrincante inferior y por eso no quieres una batalla conmigo?—le pregunto Haku, colocándose frente a él.

—En cuanto rescate a mis amigas, con gusto te daré muerte, pero ahora no tengo tiempo para perderlo contigo—respondió con arrogancia.

—Lamentó decirte que debo truncar tus planes—Haku se dispuso a no dejarlo continuar y lo rodeó con su jutsu secreto, espejos demoniacos, hecho con cristal de hielo. No le iba fallar a Zabuza, por lo tanto, su pensamiento era uno solo... darle muerte al Uchiha, sin importarle morir en el intento.

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