Los personajes de Naruto, no me pertenecen, yo solo los uso para escribir esta historia sin fines de lucro.
—Esté lugar es muy agradable—afirmó Hanabi, cuando miraban las diferentes viviendas, que el Hokage construyó para que pudieran vivir.
—Será un buen sitio para comenzar—añadió Hiashi, observando todo con nostalgia, dado que muchas de las viviendas, continuarían vacías hasta que lograran encontrar a los Hyuga errantes.
Pasaron el día acomodándose dentro de las viviendas que ocuparían. Hinata también se unió a ellos, luego que Izuna, la dejó en la entrada de los terrenos.
Hiashi, no podía más que sentirse satisfecho, al ver como sus hijas reían juntas, tal y como lo hacían en el pasado.
La llegada de los miembros Hyuga, pronto se hizo noticia para todos los residentes de Konoha y los más allegados a los primos, quisieron ir a ofrecer su ayuda, para lo que pudieran necesitar.
—HINATA-CHAN—los seis miembros del clan voltearon al escuchar voces provenientes de la entrada, llamando a Hinata.
La ojiperla sonrió al ver a sus amigos mirando todo con curiosidad. Neji por su parte puso los ojos en blanco, pero en su interior también le dio gusto ver que todos se hicieron presentes para ayudarlos.
—Supusimos que no tienen preparada la comida, así que trajimos ramen para todos—habló Naruto sin reservas.
—Pasen, les presentaremos a nuestra familia—la morena camino hacia donde estaban Naruto, Tenten, Ino, Sakura, Rock Lee, Kiba, Shino y Sai.
Choji no pudo ir, porque salió de misión con Tobirama y con Asuma... Shikamaru por su parte, tenía asuntos pendientes y no los pudo acompañar.
Uno a uno, los primos con orgullo presentaron a los cuatro miembros recién llegados.
Hinata no había podido despedirse se Ino, dado que no la encontró, porque ella salió con Sai, luego de terminar su turno en el hospital. Lo único que pudo hacer, fue dejarle una nota donde le explicaba y le decía que mas tarde regresaría a buscarla.
—Es un verdadero honor, para nosotros, conocer a las personas que ayudaron tanto a mi hija y a mi sobrino—les aseguro Hiashi, haciéndoles una reverencia, siendo imitado por Hanabi y los otros dos jóvenes—Supongo que usted debe ser Sai ¿verdad?—Hinata se tensó, pensando en que le diría su padre al joven.
—A sus órdenes Hyuga-sama—respondió el chico, con el tono calmado.
—Se lo que hizo por los miembros de la rama secundaria...y no sabe cuanto se lo agradezco—la ojiperla soltó el aire que había mantenido dentro de sus pulmones, al escuchar, lo que dijo su padre.
—¿Y que acaso nadie tiene hambre?—cuestionó Naruto, impaciente por no poder comer todo lo que compraron. De pronto todos reían, incluyendo al líder Hyuga, aunque trató de ocultarlo, cuando Sakura le soltó un golpe al rubio por ser tan impaciente y poco educado.
Luego de la comida, Hiashi agradeció a Ino, por recibir a su hija dentro de su casa y le aseguró que estaban en deuda con ella. La rubia y todos los chicos, se sentían felices por los primos y al igual que Hashirama, también se ofrecieron a buscar a los otros Hyugas.
...
Todos se marcharon y Hanabi, pidió permiso para ir en busca de artículos que necesitaba para la ducha. Hiashi le pidió a Ko, que la acompañara, pero la chica declinó la idea, argumentando que no tardaba.
—¿Donde está Hanabi?—cuestiono Hinata, cuando terminó de acomodar toda su ropa en su nueva habitación.
—Salió a comprar algunas cosas—respondió el patriarca, mientras acomodaba, los pergaminos referentes al clan, dentro de los cajones del escritorio.
ESTÁS LEYENDO
Sentimientos ajenos
Fiksi PenggemarEn una tierra, donde las alianzas y el nombre, determinan, quienes sobreviven. Se vive la traicion y la envidia, por confiar en las personas equivocadas. En medio de todo el odio y la traicion, dos almas totalmente opuestas, quedarán enfrentadas si...