Rumor ➯「KookJin」

〔27〕

—Vamos, come algo, Jinnie... —Acarició su mejilla con cariño, sosteniendo la bebida energética contra los labios del febril omega—, solo una parte, amor. 

Seokjin le observó fijamente, con sus pupilas dilatadas y un ligero puchero en los labios. Por el brillo dorado en sus ojos sabía que su omega estaba a flor de piel, por lo que estaba siendo cuidadoso al respecto. 

El celo del mayor había comenzado en la madrugada de ese mismo viernes, tomándolo por sorpresa. 

Había logrado que le llevarán algunas bebidas energéticas y comida ligera, pero hacer que el omega comiera algo estaba siendo más complicado de lo necesario. 

El sábado apenas había tocado bocado, el domingo solo había tomado media botella de una bebida energética y ya era la madrugada del lunes, Seokjin lucía exhausto y parecía no tener apetito, incluso luego de sus varias sesiones de sexo, donde Jungkook había sido más brusco, ya que los calambres y los lloriqueos del mayor no se calmaban. 

—Alfa... 

—Alfa quiere que tomes esto, precioso. —Soltó un suspiro cuando le vio sorber lentamente, se tomó toda la bebida, ganándose una lluvia de besos en su frente. 

El omega se acurrucó contra su pecho y se quedó dormido tras unos segundos, Jungkook lo cubrió con las sábanas y aprovechó para tomar una ducha, comió algo y le envío un mensaje al padre de Seokjin, a quién le había comentado la situación. 

Preparó una pequeña bandeja con algunas barras energéticas y unos trozos de fruta, pero la dejó en la nevera al escuchar los gimoteos del omega, que se calmaron apenas lo vio y recibió un beso en su marca. 

Su preciosa marca. 

—Koo... 

—¿Qué tal un baño? —Sonrió cuando le vio asentir, repitiendo aquella sesión de la noche pasada contra los azulejos y pareció calmar al mayor lo suficiente como limpiar los restos de todos los fluidos que habían en su cuerpo—. Eso, Hyunggie. ¿Cómo te sientes? 

—... Cansado—Suspiró contra su cuello, sonando más como él mismo que como su omega—, y aún falta un día. 

—Estaremos bien, ya veras—Le secó y vistió con cuidado, acariciando las marcas que había dejado en su cuerpo, llevándolo luego hasta la cocina para que pudiese comer algo más, cosa que el mayor hizo a regañadientes.

—Es el único lugar que nos falta—Comentó con diversión, llevando un trozo de pera a la boca del omega, que mastico con los ojos cerrados—. Bueno, tampoco hemos usado mi oficina, pero esa prefiero guardarla para cuando tenga mi celo. 

—Espera que sane. —Soltó en un murmullo, luego de tragar otro trozo de pera. 

—¿Qué...? 

—La herida, se siente bien, pero la has mordido cinco veces y no tiene ni setenta y dos horas—Musitó con un puchero—, así no cicatrizara. 

—La emoción puede más que yo, lo siento—Se disculpó abrazándolo por la espalda y dejando un beso casto sobre la marca, provocando un estremecimiento en el cuerpo del mayor—. Ahora que tengo pase libre para anudarte todos los días, no puedo dejar que te sientas vacío. 

Seokjin lo pellizco con las mejillas rojas, logrando que Jungkook lo tomará de las mejillas para besar sus labios. 

—¿Te sientes un poco más tú ahora? 

—Sí,... aunque quedan unas cuantas horas. —Jungkook hundió su rostro en el cuello del otro, soltando un leve 'Hm'—, quería que cerrará para mañana.