Rumor ➯「KookJin」

〔11〕

Jungkook despertó en algún momento de la mañana, se sentó en su lugar y se restregó el rostro algo confundido. Se giró y tomó una de sus almohadas para abrazarlas, sintiendo una esencia dulce a lavanda y rosas hacerle cosquillas en la nariz.

Soltó una risita y restregó el rostro contra la estela a Seokjin que había quedado en la tela, recordando lo ocurrido la noche anterior.

Se sentó bruscamente en su lugar, confundido.

¿Dónde estaba Seokjin?

Además, ¿Qué hacía en su cama?

¿Había dormido con él?

Bueno, no de esa forma, pero en la misma cama. Frunció el ceño, recordando que se había quedado conversando con el omega con la intención de que este se relajara, pero de alguna forma terminó relajándose él también, a tal punto que se quedó dormido a su lado, tomando su mano. Salió de su habitación y encontró los pantalones de pijama que el omega había estado usando doblados a un lado de un plato tapado, además de una nota:

'Gracias por todo, Kookie.

Me levanté temprano, pensé en despertarte, pero como te vi durmiendo tan cómodamente decidí no molestarte y te preparé el desayuno.

Dejé un ibuprofeno al lado, pero quien creo que más los necesitaba era yo, tienes razón, los cócteles son lo peor...

Me llevo tu camisa, pero prometo que te la regresaré lavada más tarde. Aun tenemos esa salida, ¿Recuerdas? Nos vemos en el centro comercial luego de que salgas de la oficina, te invitaré a cenar.

-Seokjin'

Sonrió para sí mismo, antes de caer en cuenta en un detalle muy importante.

El papel.

¡Era el mismo de su agenda!

Palideció y la buscó, notando los nuevos escritos en sus notas. La libreta se deslizó de sus dedos, mientras sentía su cuerpo temblar, se llevó las manos al rostro y soltó una carcajada entre lágrimas. Se sentó en la silla y se pasó una mano por el cabello, soltando un suspiro quebrado.

"...Tu también me gustas, pero ahora no estoy preparado para una relación"

Seokjin sabía que le gustaba, sabía que estaba enamorado de él.

Levantó la libreta y acarició las otras notas, viendo los comentarios y hasta dibujitos que el omega había hecho sobre su investigación, al llegar a la página final y no ver algún otro mensaje más que esa corta oración, se sintió contrariado.

¿Le estaba dando alas o se las estaba cortando? 

Su corazón latió con fuerza y se sintió inquieto, ¿Qué se supone que debía hacer ahora?

¿Esperar?

¿Aceptar que lo suyo no tenía un futuro?

No, si no estaba preparado en ese momento, no significaba que en algún otro momento no lo estaría. Él no era su ex esposo, mucho menos su alfa destinado, era un hombre totalmente distinto y haría lo que fuese para probárselo. Además, lo había invitado a salir, de sentirse incómodo no habría mencionado su salida.