64 [C.R]

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Aunque no espere que Samuel pasara por mi casa antes de irnos a la fiesta de Yeray, llevo deseándolo secretamente. No me atreví llamarlo o seguir mandándole mensajes para no parecer demasiado desesperada.

La mayor razón por la que quería irme a la fiesta de Yeray es para encontrarme con Valerio, necesitaba algo... algo más.

Necesito parar pero no puedo, me duele que Samuel pudiera enterarse de todo y mirarme con otros ojos.

Yo nunca estaba interesada en andar emborrachándome o drogándome, no sé cómo me pudo haber pasado algo así.

De nuevo deje toda la habitación en desastre, desesperadamente busque la última pastilla que me quedaba de lo que compre, no atrevía ni mirarme al espejo sabiendo que estaba haciendo esas cosas.

-¿Carla?

Mi mama toca las puertas, de inmediato escondí lo que con mucho esfuerzo encontré.

-Pasa – dije

Mi mama entro y de nuevo se sorprendió al ver la habitación, pero no vino por eso.

-Alguien te está buscando.

-¿Quién?

-Ven.

Se estaba comportando extrañamente, debe ser Lu o quizás papa quería hablarme sobre algún asunto más, pero él está trabajando.

Me vestí en lo primero que encontré, una sudadera y baje por escaleras.

Cuando entre en el salón me encontré con Samuel quien sonreirá al verme, también parecía preocupado.

-¿Samuel?

-Hola.

Me extraña que mi mama lo dejo pasar, pero creo que últimamente se está poniendo de nuestro lado y eso me gusta.

-Les dejare solos – dijo mi mama

-¿Mama?

Ella me mira con cara de complicidad, justamente cuando todo está  bien, cuando por fin al menos ella cree en el futuro de mi relación con Samuel, yo tengo que hacer estupideces y ser adicta a drogas.

-¿Estas durmiendo? – cuestiona raramente

-Un poco...

Le mentí, por supuesto que no dormí, estaba tratando terminar mi puta adicción pero no encontré salida.

-Al fin vine a pasar toda la tarde contigo antes de que nos vayamos a la fiesta.

-Que suerte...

No dije con mucho entusiasmo porque estaba pensando en todos los escenarios posibles donde Samuel descubre lo que anda pasándome últimamente. Y si descubre entonces se decepcionara rápidamente, no creo que podre soportar una decepción de parte de Samuel.

-¿No estás feliz?

-Claro que estoy feliz, pero un poco cansada.

-Pero, acabas de decirme que no has dormido, ¿Qué estabas haciendo?

Tengo sensación de que ya esta sospechando de mi y no me gusta para nada.

-Vamos a mi habitación, por fa.

-Si eso es lo que quieres...

Le tomo por la mano y ambos subimos a mi habitación.

Cuando entramos a la habitación quite una parte de mi sudadera y empezó besarle con mucha locura, le extrañe tanto y no poder probar droga significa que tengo que correr hacia mi otra adicción – Samuel.

-Espera...

Sin embargo sigo besándolo, en un momento de mucha pasión él ni se da cuenta pero le quito la camisa, de tanta prisa ni puede negarse.

-Shh – le suspiro

-Carla, de verdad...

-¿Enserio quieres parar?

-Ya que me habías besado de esa manera prefiero seguir – dijo pícaramente

Caemos sobre la cama, Samuel toca mi cuerpo, me acaricia pero aun así me siento como si voy a empezar a gemir fuertemente, cuando el empieza besarlo aprieto las sabanas.

-Ah, Samuel...

Parece que los dos vamos a tener una gran fiesta antes de irnos a verdadera fiesta, pero así son las cosas casi siempre.

No encuentro la mejor manera para pasar una tarde que con él, que me quiere y cuida más que nadie.

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Esta historia pronto terminará, luego actualizaré con otro capítulo 😘😘❤️

Colgando en tus manos |CARMUEL|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora