"Rotos"

Cinco

Veronica lodge

Me encuentro corriendo por la cancha de fútbol en tacones, ¿en que estaba pensando para correr en tacones por el pasto?, estoy llegando tarde y es mas hace segundos choque con una chica que estaba hecha furia.

—¡lo siento! ¡lo siento!, se me hizo un poco tarde —todos me estaban mirando y yo sólo quiero que la tierra me tragué.

—¿usted es...? —preguntó el profesor supongo.

—Veronica Lodge —sosteni con fuerza de la tira de mi maletín como si por agarrarme de ahí no me voy a caer.

—usted falto la clase pasada —asenti tímidamente— me llega tarde y sin el uniforme —siento mis mejillas arder de la vergüenza.

—yo, lo siento—me disculpe en voz baja.

—es lo único que va decir ¿no va justificar su falta? —negué con la cabeza, no podía decirle que me la pase llorando en el baño— entendido la espero en detención despues de clases —mordi mi mejilla por dentro.

—no creé que es suficiente....ya se disculpó...no veo necesario que valla a detención —la voz de un chico me hizo levantar mi cabeza.

Mi mirada se cruzó con la suya me quedé helada, sus ojos no eran azules, ni verdes, sus ojos son marrones claros casi de un color caramelo, puede que sea el color mas común en las personas, pero yo oficialmente he quedado enamorada de su mirada.

—no esta de acuerdo principito andrews.........para hacer las cosas más parejas ha usted también lo esperó en detención despues de clases —me sentí culpable, por mi culpa lo están mandado en detención.

—pero....... —está vez hablo un pelinegro.

—¿cara bonita usted también quiere ir detención?.....tambien lo espero en detención despues de clases.......alguien mas dice una sola palabra y estara en detención con ellos —sólo quiero que la tierra me tragué, pero a la vez no para poder ver al lindo pelirrojo.

—si no tienen nada mas decir.....señorita lodge retirese ha cambiarse —mire por última vez al pelirrojo antes de girar sobre mi eje para irme.

—¡DÍEZ VUELTAS AHORA! —escuche gritar al profesor por ultima vez antes de escuchar el sonido de su silbato.

Al menos no me había ido tan mal ¿verdad?, una hora en detención no es nada, sólo falta avisarle a Alfred para que me venga a recoger después.

Cuando estaba apunto de entrar a los vestidores de las chicas escuche un sollozo ¿ahora que hago? ¿Entró? ¿Qué le digo? ¿Sólo entró y me cambió?, yo no se como actuar ante esta situación jamas había visto alguien llorar ¿por que verme llorar en el espejo no cuenta?.

Entró...mejor no....si entra...no es muy mala idea...¡basta!

Tome un poco de aire, agarre la perilla y entré encontrando a una chica rubia sentada en una banca llorando con sus manos cubriendo sus rostro, la misma chica con la que choque minutos antes

—¿estas bien? —se que es una pregunta estúpida, esta claro que no esta bien, porque está llorando, pero yo no se como reaccionar.

Seca sus lágrimas con sus manos antes de alzar la cabeza y mirarme, dios ella se ve rota, no muy convencida caminé hasta llegar ella y sentarme a su lado.