Perfecto desastre

No te atreviste...

Había pasado una semana desde que literalmente eché a Romeo de mi casa. Ha sido un infierno para ambos: Caleb y yo. No podía estar deprimida frente a Caleb ya que el estaba igual o peor que yo. Extrañábamos a Romeo como nunca antes.

Hoy, antes de salir de casa me llegó la invitación a la boda de Paula en un mes y medio. No sabía si ir ya que Romeo y yo no somos absolutamente nada pero un mensaje de Paula vino acompañado en la invitación: "Ya se lo qué pasó pero ven igual por favor. Es importante para mi"

Así que supongo que iría.

Hace un mes había comprado una balanza por impulso y ahora me subía a ella cada noche. Note que como últimamente no tenía apetito y menos desde que corte con Romeo, he bajado 6 kilos en un mes. No se si eso está bien o mal pero sigo sin sentirme bien conmigo misma así que debo seguir bajando hasta llegar a mi cuerpo ideal.

Ahora me encontraba yendo al estudio después de haber dejado a Caleb en el colegio. Alex me había escrito que me dirija a la sala de reuniones y me había hecho escribir partes de una canción. Supongo que venía una nueva y mi primera colaboración así que eso me emocionaba más que a nada.

Llegue al estudio y me dirigí a la sala de reuniones. Toca la puerta dos veces y abrí:

Allí estaba Malarkey con su manager y Alex. Todos charlando en la mesa. Cuando abrí, todos me miraron pero lo único que yo observaba eran los ojos grises clavados en mis ojos azules. No identificaba ninguna emoción en sus ojos. Solo me miró de arriba a abajo y frunció el ceño.

- Hola, buenos días.- salude a todos.

- Cada vez más sexy Saruchis - bromeó Austin y Sam le pegó un codazo poco disimulado.

Sonreí y me senté en la silla vacía; al lado de Alex y frente a Romeo, quien no dejaba de mirarme.

Jeff, el manager de Malarkey y Alex, el mío, comenzaron a hablar pero siendo sincera no escuché nada. Solamente volvía tierra cuando dijeron:

- Harán una colaboración y la canción deberá salir en dos semanas. Empezamos a grabar hoy.

- ¿disculpa? - exclame y todos me miraron sorprendidos. -  con todo respeto, deberías haberme consultado - le digo a Alex. El pone los ojos en blanco u sonríe nervioso.

- Es la oportunidad de tu carrera, no la desperdicies.

- Deja de darme malditas órdenes. - las palabras salieron de mi cuerpo con odio.

- Cálmate. - sentencio Romeo. Lo mire incrédula. Ahora veía enojo en su mirada- No metas nuestros malditos problemas en esto.

Reí con sarcasmo.

- No me digas que tengo que hacer. No tu. ¿Sabes que? - le dije a mi manager - si haré esta canción pero solamente para no tener a todos ustedes reprochándome. Ya hiciste bastante decidiendo sin mi sobre MI carrera. Ah, y por cierto, - dije volteando hacia Alex nuevamente quien me miraba como si fuera una histérica - No baje los 5 kilos que me pidieron, sino 6. Avísale a SYCO. ¿Donde firmó asi me voy a grabar? - pregunte furiosa.

Romeo se paró de golpe.

- ¿qué le pidieron que? - le grito a Alex.

Oh, no. Muy mala idea Sarah.

- Romeo no te metas.- aviso Jeff.

- una mierda. ¡La están destruyendo! ¡Mírale el maldito cuerpo! Puedo ver cada hueso en detalle.

Abrí los piso sorprendida.