Vio morir a su novia frente a sus ojos junto antes de morir, pero el destino no dejo que se separaran y anqué su reencuentro no fue de lo más normal, eso no le molesto en lo más minino a ninguno de los 2
Un poco en pánico la joven intentó detenerme sin embargo ya era demasiado tarde y la fruta ya se encontraba en mi boca donde liberó todo su sabor, este era increíble, era dulce y su consistencia firme permitía que al masticar una gran cantidad de jugo fuera liberado
-¡Es delicioso!
-¿He?
-Lo lamento mucho, esta fruta emitía un aroma increíble y no fui capaz de detenerme, desde luego que lo pagaré...
-No hay problema pero...
-¡Podrías decirme donde la compraste, por favor!
A mitad de sus palabras la interrumpí, aunque sabía que eso fue descortés algo dentro de mí me había dominado, era la primera vez que comía algo así y no quería dejar que la oportunidad de conocer a su distribuidor se me fuera de las manos
-¿Está seguro que le gustó?, lo siento pero no me agradan mucho las bromas
-¿Gustarme?, me encantó, es lo más rico que he probado en mi vida, solo le di una mordida y siento que puede que me vuelva adicto a esto, así que por favor podrías decirme donde la compraste
¿He?, su cara lucía un poco roja como si estuviera avergonzada, momentos después extendió sus alas de mariposa que hasta hace unos momentos estaban dobladas las cuales no fui capaz de ver hasta entonces
-¡Yo soy la vendedora, por lo que podría comprar esto por favor!
Con movimientos un poco temblorosos me extendió la canasta que hasta hace unos momentos estábamos acomodando, tome una de las frutas y me di cuenta de que está también desprendía un dulce aroma, el impacto ya no era tan grande como la primera vez, aun así sin duda su fragancia era increíble
-¡Lo comprare todo!, haa, ¡lo siento!
Ante mi pequeño arrebato la joven cayó sobre sus rodillas un poco impactada, y sin un segundo que perder me puse de pie ofreciéndole mi mano, después de unos segundos reflexionando ella la tomó poniéndose de pie
¿Me pregunto si mi altura será baja en comparación del promedio de este mundo, las razas humanoides serán más altas o simplemente tenía suerte para encontrarme con jóvenes altas? con esa línea de pensamiento levanté mi mirada para ver al hada delante de mí con sus impresionantes 195 cm, sin considerar sus botas
Su cabello era corto de un color blanco con ligeros toques de rosa, su vestido era de una pieza sin hombros y su falda estaba decorada con algunos listones, tenía unos guantes largos y botas altas arriba de las rodillas que hacían juego con su vestido y no podía olvidar el elemento más importante, sus alas de mariposa
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(Referencia de la apariencia de Lorelei)
Sus alas eran traslúcidas y al pasar rayos de sol estas tomaban varios colores como un arcoíris, sin perder el tiempo estas se doblaron acomodándose en su espalda y nuevamente pasaron desapercibidas
