Las pisadas eran claras bajo el suelo polveado de la aldea. 1, 2, 3... 1, 2, 3, contar las pisadas no era una forma muy normal de seguir el paso, pero era la mejor manera de distraerse y pasar por desapercibida mi cambio repentino de tema. Era inevitable no sentir curiosidad luego de haber formulado mi pregunta, lo había incomodado al meterme en su vida personal y su rostro parecía desencajado por completo. Aun así, he de decir que al darme la respuesta su rostro formo una seriedad y claridad completa, era honesto.
— Yuko, ¿Te gusta alguien?
Seguí presionando.
—No. —Mientras tanto, él seguía contestando en monosílabas. Tenía cierto parecido a alguien.
Era gracioso, el disparo de preguntas que le dirigía lo tomaba desprevenido.
Yuko, no parecía ser más grande que yo, ¿Cuántos años podía tener? Diecisiete, o tal vez, diecinueve... podría equivocarme, pero estaba segura que podíamos tener la misma edad, así que hablar de esto no era tan malo y no le faltaba al respeto, preguntarle si tenía una novia era una buena forma de comenzar algún dialogo, pero sus contestaciones tan cortas dejaban poco a la imaginación para seguir hablando, él no era muy participativo.
—No sé, ¿Te puede gustar alguien cuando ya se va a casar?
Su sorpresiva y larga pregunta hizo que me detuviera de caminar y lo observara. ¿Qué era lo que había preguntado? Yuko, al igual que yo padecía del mismo mal de amores, se había enamorado de una mujer que se casaría.
Por absurdo que se escuche, ahora esta conversación se estaba volviendo incomoda, ¿cómo carajos podía saber yo algo sobre amoríos!, si mi propia vida era ya un desorden por completo. Que lastima dábamos ambos.
—Claro.
Una respuesta afirmativa a una pregunta negativa. Aun así, ello no era mentira, heme aquí, aun enamorada de un chico que se casará.
¡Ay de mi cabeza y boca, en verdad!
A pesar de mi contestación positiva, el semblante del chico se arrugo y se ensombreció, al parecer no esperaba escuchar algo como ello, de tal modo, corregí mi respuesta.
—Pero es más doloroso que te siga gustando esa persona cuando ella ama alguien más.
Era claro que esa respuesta era más para mí que para él.
Vaya, veamos, pese que ahora sabía, gracias a Kakashi sensei, que Sasuke se casaría con la chica que trajo por simplemente ayudarla y no por amor, el dolor no dejaba de estar ahí, tal hecho no arrancaba los sentimientos que le profesaba, no, absolutamente no. ¿Qué puede sentir una persona que ama, al ver que su amor esta con otra? La respuesta es obvia, nada agradable sucedería. De tal modo, al darle una respuesta como esa, era posible que el corazón de ambos se fortaleciera y no provocara esperanzas.
Mientras estaba en mis divagaciones, lo único que apreciaba era la respiración pausada y tranquila de Yuko que al mirarlo su rostro estaba un tanto decaído, mis respuestas no le habían dado la tranquilidad que buscaba.
— ¿Y si ella no lo amará?
Su nueva pregunta volvió a abrir de nueva cuenta la brecha de incomodidad. Creo que Yuko no quería rendirse.
— ¿Entonces por qué estaría con alguien más? —le respondí con otra.
¡Carajos! Que pregunta tan más estúpida de mi parte, era claro que había una gran lista de respuesta para esa, yo tenía una como, por ejemplo; ser obligado.
—Menciono que quiere ser feliz.
Yuko no parecía querer dejar de hablar y esto no sabía si tomarlo como algo positivo, o algo totalmente malo, en realidad no sabía que contestarle.
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Destinado a Amarte
FanfictionSakura sigue perdidamente enamorada de Sasuke, sin embargo, después de tres años, esperarlo se está volviendo cansado y al mismo tiempo decepcionante. ...Es tiempo de olvidar a Sasuke?