- 02

4.3K 333 241
                                    

Disclaimer: Los personajes de Boku no Hero no me pertenecen; créditos correspondientes a Kōhei Horikoshi. Posible (o mucho) OoC en los personajes. Este fic contiene escenas explícitas sexuales, lenguaje fuerte, temas adultos tratados de modo detallado y escenas fuertes; se recomienda discreción.

Pareja principal: Kacchako.

Parejas secundarias: KiriMina, MomoJirou, TokoTsuyu, OijiTorū.

El atardecer había teñido el cielo más rápido de lo que a Uraraka le hubiese gustado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El atardecer había teñido el cielo más rápido de lo que a Uraraka le hubiese gustado. Aún no sabía nada sobre Bakugou y todos estaban actuando muy sospechosos. Al final decidió darse un baño y después tumbarse en su cama para dormir y no tener que pensar en lo triste que estaba por no haber podido pasar su cumpleaños junto a su novio.

Mientras se colocaba su pijama de gatitos y pensaba una y otra vez sobre varias posibilidades que pudiesen haber llevado a Bakugou a desaparecer en medio de su cumpleaños, pudo escuchar que alguien llamaba a su puerta.

Rápidamente terminó de ponerse la parte superior de su pijama y camino hasta su puerta para atender al llamado.

—YaoMomo... —pronunció al ver a su amiga parada frente a ella con una dulce sonrisa en su rostro.

—¿Interrumpo algo?

Uraraka negó rápidamente.

—No, solo estaba poniéndome la pijama —contesto, dibujando una sonrisa en su terso rostro.

La peli negra sonrió y alargó su brazo para tomar la mano de su amiga.

—Vamos a la sala común, necesito mostraré algo.

Uraraka pestañeó confundida. ¿Qué era lo que tenía que mostrarle?

Igualmente ella asintió y salió de su habitación para seguir los pasos de la sonriente chica. Estaba comenzando a sentir curiosidad, YaoMomo se veía bastante —dentro de sus estándares— emocionada.

Bajaron por el ascensor y antes de salir, Momo tiro de su mano para que no avanzara más.

—¿Momo? —sus palabras se frenaron al sentir que Momo de ponía tras de ella y colocaba a rededor de sus ojos una venda, privándola de su visión —. ¿Q-que haces? —preguntó confundida.

—Por favor, Uraraka-san, toma mi mano y no te quites la venda hasta que te lo indique —dijo con voz suave, entrelazando su mano con la de la castaña.

Uraraka asintió vagamente y se dejó guiar mientras extendía su otro brazo para guiarse con el tacto.

Dio pasos a ciegas por varios segundos en los que Momo la estuvo guiando. A la vez que caminaba por el pasillo, Ochako trató de escuchar algo que le diera una pista de lo que Momo quería mostrarle y era tan impresionante como para vendarle los ojos.

¡Fue culpa de Mina! | Kacchako |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora