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Disclaimer: Los personajes de Boku no Hero no me pertenecen; créditos correspondientes a Kōhei Horikoshi. Posible (o mucho) OoC en los personajes. Este fic contiene escenas explícitas sexuales, lenguaje fuerte, temas adultos tratados de modo detallado y escenas fuertes; se recomienda discreción.

Pareja principal: Kacchako.

Parejas secundarias: KiriMina, MomoJirou, TokoTsuyu, OijiTorū.

Parejas secundarias: KiriMina, MomoJirou, TokoTsuyu, OijiTorū

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Sus ojos esmeralda no podían apartarse de ella. Era consciente de que estaba mal, que era prohibido mirarla con esos ojos, que era su preciada y mejor amiga; que ella le pertenecía a Bakugou Katsuki. No podía dejar de hacerlo, por más que intentara mirarla con otros ojos, que se obligara a aceptar que ella jamás lo miraría de la misma forma que lo miraba a él... sencillamente no podía dejar de desear ser el dueño de su mente y corazón.

Observo con un poco de aflicción la manera en la que sonreía ante un estante de historietas. Recordaba vagamente un momento en el que ella le dijo que jamás había leído comics o mangas shōnen, argumentando que no le llamaban mucho la atención.

¿Que qué había cambiado?

Lo que cambió todo fue Bakugou, quién la inducio a leerlos y logró que la chica se interesara compleméntamente en los cómics. Era un gusto que compartía con su ahora novio, quién le prestaba sus cómics y mangas desde que eran amigos.

—Esos son los tomos especiales del manga que le gusta a Bakugou, ¿no es así? —la voz de Mina sacó de sus cavilaciones a Ochako y a Midoriya.

Ochako comenzó a asentir, tomando los volúmenes entre sus manos para verlos con emoción.

—Bakugou-kun no deja de hablar de ellos, así que pensé en venir y comprarlos para él —dijo con una pequeña sonrisa, llamando la atención de Todoroki.

Todoroki, Mina, Midoriya y Ochako habían decidido pasear un rato en el centro comercial e ir a comer algo por ahí. Ochako había aprovechado la visita al sitio para ir a la tienda de cómics y mangas que el rubio frecuentaba para poder conseguir la edición especial de la que tanto hablaba el rubio. Había ahorrado lo suficiente por todo el mes como para comprárselos y estaba demasiado emocionada por poder ver su expresión cuando los tuviese en sus manos.

Y Deku solo pudo desviar la vista ante eso.

—¿De verdad vas a comprarlos? Son muy caros y tú eres un poco tacaña, ¿segura que Bakugou vale tanto la pena como para que gastes tu preciado dinero?

—¡Todoroki-kun! —exclamó Ochako con vergüenza —. No digas esas cosas, obviamente Bakugou-kun vale esto y más.

Todoroki ladeó la cabeza y parpadeo, confundido.

—¿Por qué? Bakugou tiene un pésimo carácter, dice muchas groserías y nos maltrata cada vez que nos ve respirar.

Ochako entrecerró los ojos y río con nerviosismo.

¡Fue culpa de Mina! | Kacchako |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora