HEATHER ; louis partridge (TERMINADA)

📮ཻུ𖣴ֹֺ໋᳝·݊ TREINTA Y SIETE ━ NAVIDAD

—estas preciosa, kenzie.—la chica sonrió observando a louis.

—tu no te ves nada mal.—ambos rieron.

a pesar de que ya ambos eran novios, las cosas no habían cambiado demasiado, a ninguno le gustaban los apodos tan empalagosos que solían usar las parejas, y seguían molestandose tanto como cuando eran mejores amigos.

por su lado, kenzie estaba más que emocionada, no solo por el hecho de que sería la primera navidad que realmente disfrutaría, estaba toda su familia, y la de louis ahí, lo que le alegraba demasiado, también estaba emocionada por la sorpresa que habían estado preparando durante días.

—adoro la navidad, es mi época favorita de el año.—dijo la rubia sonriente observando la sala de su casa, todo estaba delicadamente decorado.

su madre y la de louis se habían encargado de que todo luciera perfecto, nada extravagante, de hecho delicado y elegante, como eran ambas. ya todos habían llegado, estaban hablando en la sala, la única persona que faltaba era heather, timothée reía junto a la tía mary, los mayores hablaban, ya sentados en la mesa, mientras que louis, millie, issie y kenzie estaban en la sala esperando a la hermana de la última nombrada.

—siento que tengo tanto tiempo que no veo a heather.—confesó millie sonriente, si algo era cierto, es que antes los ojos de millie heather siempre había parecido tan perfecta e irreal que se le hacía inevitable no sentirse emocionada de verla de nuevo.

habían pasado muchísimos años, la ultima vez que se vieron millie era una niña pequeña de tan solo diez años, casi once, pero ya habían pasado dos años, y  era una hermosa jovencita de trece años.

—recuerdo cuando kenzie decía que le lanzaramos piedras a su hermana.—dijo issie, todos rieron.

resulta que por su parte, la mayor de los hermanos partridge, siempre había tenido un crush oculto hacia heather, le parecía una chica hermosa y agradable, ambas tenían la misma edad, por lo que antes de que se fuera a París, ambas hablaban muchísimo, eran muy amigas, ahora, ya aquel crush había quedado en el pasado, pero si que issie la había extrañado, había sido su primer amor no correspondido.

—yo recuerdo cuando la hicimos caer a el lodo.—dijo louis.

el por su parte, pensaba que heather era preciosa, quizás jamás lo admitió para no lastimar a kenzie, pero sin duda estaba enamorado, su corazón le pertenecía a la hermana menor de la chica.

—y yo recuerdo que los odiaba.—dijo heather entrando a la sala, todos la observaron sorprendidos, ella rió.

—heather estas preciosa.—la primera en hablar fue su hermana, quien se acercó hasta ella.

la rubia llevaba un precioso vestido rojo, como kenzie, la diferencia es que el de heather era corto, hasta un poco más abajo de el muslo, por la rodilla, este era ajustado hasta la cintura y luego tenía una hermosa falda algo llamativa con pequeños detalles brillantes rojos, llevaba unos tacones del mismo color y su maquillaje estaba perfecto, sus labios rojos le daban un toque sensual, a la vez que resultaban sus ojos.

—tu luces absolutamente increíble.—dijo correspondiendo a su abrazo.

kenzie, por su parte, llevaba un vestido rojo, este era largo, hasta los pies, con detalles de encaje rojo en la parte de arriba, debajo de este, aunque no se notaba, llevaba unos converse rojos, su maquillaje era sencillo, sus labios tenían un poco de brillo y su cabello, a diferencia de el de heather, estaba ondulado en las puntas, sin duda se veía preciosa.

—¡chicos, a comer!—grito la tía mary desde el comedor.

luego de saludar a heather, todos fueron hasta el comedor, donde estuvieron recibiendo halagos por parte de todos, la rubia fue hasta la mesa y saludó a todos con cariño y emoción.

—estas tan grande, heather.—dijo la madre de louis con impresión.—pero tan preciosa como siempre.—ella sonrio.

—muchas gracias, aunque parece que no soy la única que ha crecido y sigue preciosa.—dijo observando a issie y millie, quienes le sonrieron de inmediato.

—hola, preciosa.—ambos sonrieron, timothée arrimó la silla para que heather pudiera sentarse, luego se colocó a su lado.

—hola, tonto.—beso su mejilla y luego paso su pulgar por esta quitando un poco de labial rojo.

el resto de la cena todos estuvieron hablando de diferentes cosas, pusieron al día a heather de todo lo que había pasado en su ausencia y rieron de algunos chistes de el padre de louis. nadie lo noto, pero heather sostenía la mano de timothée por debajo de la mesa, el sabia cuán nerviosa la ponían las cenas, parecia loco, pero odiaba la antencion, le causaba demasiada ansiedad, a pesar de que conocía a todos ahí, y siempre trataba de hacerla sentir mejor, le hacía saber que estaba ahí.

unas horas después, todos comían el postre en la sala, esperando a que se hicieran las doce, para poder abrir los regalos, heather estaba prácticamente durmiendose en el hombro de timothée cuando empezaron a abrir los regalos, el la abrazo, ambos aplaudían junto a los demás cada vez que alguien abría un regalo.

—bien, este es para... heather, de timothée.—dijo sonriente la tía mary dándole el regalo.

casi de inmediato heather se levantó de el hombro del chico, ambos sonrieron, ella quitó la envoltura con emoción, algo confundida tomó la pequeña caja que se encontraba adentro de la más grande, timothée la tomo entre sus manos y se levanto de él sofá para luego arrodillarse.

no no no no no.

—heather.

el ni siquiera lo había dicho y ya la rubia estaba llorando.

—¿me harias el honor de casarte conmigo?—pregunto sonriente, ella de inmediato comenzó a asentir todavía impresionada.

—¡si, por supuesto que si!—grito sonriente, el se levantó y luego de remplazar el anillo anterior, ambos se besaron con emoción, todos aplaudieron y comenzaron a felicitarlos.

esa si que fue una dulce y feliz navidad.