Gato Calicó :: HopeJin ׂׂૢ

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La mañana daba comienzo, y Seokjin no se sentía con la necesidad de despertarse temprano aquel día, se sentía tan cómodo en aquella cama envuelto en las cálidas cobijas que podía quedarse allí por una eternidad, pero para Moon eso no era posible, maulló mientras con sus garras rasgaba un poco la puerta de la habitación en donde se encontraba dormido Seokjin, pero nada, no salía.

Movió su cola en el aire, despacio, de un lado a otro, sus ojos ámbar estaban fijos en la perilla, camino un poco hacía atrás, encogiendo su cuerpo y por fin saltó, ¡éxito! Había logrado dar con la perilla y abrir la puerta, Moon maulló suavemente, sus cuatro patas dieron paso a su camino hacia la habitación, miró alrededor, sus orejas estaban alerta a cualquier sonido.

Pronto logró escuchar un suave gruñido, miró hacía la cama, allí estaba Seokjin, se había movido un poco, pero en lugar de despertar, al parecer lo único que ese humano quería era seguir durmiendo, pero no, tenía que desayunar, Hoseok también estaba dormido, pero Moon sabía que pronto la alarma del reloj de su dueño lo despertaría.

Camino otros pasos más, lo bueno de ser un gato, era que los pasos podían ser tan ligeros que ni un humano podría escucharlos, a menos de que dieran un salto y cayeran, allí era cuando a veces tenías que salir despavorido para que no te atrapen o el agua fría cayera encima, no era nada agradable.

Moon de un salto subió a la cama, el mullido colchón hacía que las patas de Moon se hundieran un poco, y eso a la pequeña gata, le gustaba, por eso casi siempre le gustaba agarrar almohadas y comenzar a colocar sus patas una y otra vez sintiendo como las almohadas regresaban a su forma original.

Maulló al sentir como Seokjin de nueva cuenta se movía, esta vez había quedado boca arriba, era la oportunidad de Moon, camino más rápido hasta que logró dar con el rostro de Seokjin, el humano se veía tan relajado que Moon se estaba comenzando a sentir culpable de querer despertarlo, pero el hambre era más.

Comenzó a lamer la mejilla del humano, a lo que Seokjin hizo unos gestos que pronto se suavizaron por completo al ya no sentir nada, sin embargo, Moon comenzó a olfatearlo un poco, le parecía muy curioso aquel humano, los bigotes de Moon habían logrado que Seokjin sintiera suaves cosquillas por sus mejillas, por su nariz, por sus labios, y por fin abrió lentamente sus ojos, y se percató del par de ojos ámbar que lo miraban muy de cerca.

— Buenos días, Moon —la gata de inmediato maulló, estaba saludándolo, Seokjin no lo sabía, pero al parecer esa gata lo hacía—. ¿Cómo entraste?

Un gato nunca revela sus secretos.

Taehyung podía odiar un poco el comportamiento de Seokjin, pero le agradaba, pero lo que en verdad le desesperaba era que no contestara sus llamadas y mensajes rápido, al menos ya había pedido algo para el desayuno, de nuevo un nuevo trozo de wafle llegó a sus labios para poder masticarlo.

Seguramente Seokjin estaría con su dichoso esposo, Taehyung no creía en esa tremenda mentira, ¿guardar los anillos? Sí, claro.

Él sabía que seguramente Seokjin solo lo decía para poder apartarse de él, además no entendía que le veía a aquel sujeto, según recuerda, Seokjin no había ni siquiera mencionado el nombre de la persona con quien estaba casado, y ahora de un de repente salía aquel chico con su gato y ¡oh vaya! Resulta que él es su esposo.

Algo estaba mal, y por supuesto que lo averiguaría, pero primero a desayunar, pronto sería el día en que las sesiones de fotos se hagan; apenas y habían encontrado pocos lugares, Seokjin estaba sugiriendo un montón de parques, pero ciertamente, Busan destacaba más por sus playas, y Taehyung quería una playa, y por supuesto posar en traje de baño, con Seokjin tomándole fotografías, no dudaría en coquetear a la cámara de inmediato.

De repente el tono de su celular lo sacó de sus pensamientos, miró la pantalla, ¡al fin! Ya era hora de que Seokjin por fin se dignara a responderle.

— ¡Buenos días, Jinnie! —respondió Taehyung utilizando un tono grave de voz.

— ¿Puedo saber por qué tengo casi treinta llamadas perdidas tuyas y un montón de mensajes también de tu parte?

No se escuchaba para nada contento, pero eso a Taehyung no le importaba, él lo único que quería era que Kim Seokjin se dignará a venir a desayunar con él, pero como veía eso no iba a ser posible, aun así existían el almuerzo y la cena, así que tenía dos pretextos más para verlo, además de que tendrían que buscar más lugares, posiblemente asistir a la playa un buen rato para pasar la tarde juntos, definitivamente una grandiosa idea, como siempre.

— Quería invitarte a desayunar, pero... como no me has respondido a la primera, tuve que desayunar solo, por cierto, tenemos que seguir con nuestra expedición de lugares, y estaba pensando que una playa estaría mejor que cientos de parques.

— Taehyung, los parques son hermosos, además podrás utilizar varias prendas de ropa para promocionarla, sabes que el jefe de la compañía quiere eso.

— ¿Y? Podemos darle la sorpresa de unas fotografías de verano, en la playa y por supuesto tú a mi lado, ¿Qué dices?

— Ni loco —Taehyung rodó los ojos al escuchar la respuesta de Seokjin— tenemos que enfocarnos en el contexto principal, además los parques que escogí no son tan malos.

En eso tenía razón, eran parques muy llamativos y por supuesto que serían una gran forma de promocionar inclusive turismo por aquella zona de Busan, pero, aun así, Taehyung quería ir a la playa, está un poco alejada de aquella zona en la que ahora se encontraban, así podía pasar algunas horas con Seokjin sin que su supuesto esposo estuviera cerca para fastidiar junto a ese gato.

— Te veré en la plaza, espero no tardes, iremos a la playa, tomaremos algunas fotografías de los paisajes allí, y si el jefe quiere que se haga una sesión allí lo haremos —mencionó Taehyung, pudo escuchar un bufido de parte de Seokjin.

— ¡Está bien! Pero créeme cuando te digo, que el jefe no aceptará que una sesión de fotografía se realice en la playa.

— Sí, sí, lo que digas, Jinnie, te veo luego.

Corto la llamada, bueno, al menos había logrado su cometido, solo esperaba que a Seokjin no se le ocurriera la grandiosa idea de llevar a ese tal Hoseok, y solo esperaba que aquel gato de ojos ámbar no fuera, porque se sentiría extraño mirando aquellos ojos, no sabía porque, pero sentía que aquel gato podía ver su alma y eso si le aterraba.