Gato Calicó :: HopeJin ׂׂૢ

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De un lado a otro, así era como se movía la cola de Moon enroscándose levemente de un lado a otro, como si de un ritmo acompasado se tratase, sus preciosos ojos ámbar seguían las manecillas del reloj que se encontraba en la mesita de noche de la habitación del hotel, sabía que su dueño se encontraba bien, lo podía presentir, y le encantaba que lo estuviera.

Algunos podrán decir que los gatos no tienen preocupación alguna, pero Moon vivía en preocupación por su dueño, sabe que Hoseok siempre se preocupa por ella, y que quiere mantenerla sana y salva en todo momento, lugar y hora, no quiere que algo malo le suceda, ni que le falte alimento y cuidado alguno, aunque claro, Moon siempre ha detestado las vacunas, en esos momentos es cuando más odia a Jung Hoseok, aunque por supuesto sabe que es por su salud y bienestar.

Moon había salido de una camada de cuatro gatitos, su madre los había tenido cerca de un callejón pequeño en el centro de Busan, lamentablemente Moon no había tenido tanta suerte de ser tan querida como el resto de sus hermanos, los cuales seguían a su madre gata por todos lados, mientras que ella lo único que prefería era dormir, en un descuido había quedado sola, con demasiada hambre y frío.

Allí fue cuando un chico de cabellos algo despeinados la miro, ¿quién diría que aquel chico se convertiría en la persona más querida por Moon? Él le dio un hogar cálido, una buena alimentación, y lo más importante le dio todo su amor, por supuesto, Moon quería devolverle tal favor.

Encontrar alguien para su dueño no es una tarea tan fácil de cumplir, y Moon había descubierto eso muchas veces, al principio había pensado que aquella vecina que tanto hablaba con Hoseok iba a ser una opción acertada, pero al mirar los ojos de su dueño, se percataba que no tenían aquel brillo tan especial que había observado en las personas que se enamoran, así que había terminado descartando a aquella chica.

Moon iba y venía con Hoseok, y por más personas que su dueño conociera, sabía que ninguna podía causar tal brillo que tanto buscaba ella ver en Hoseok, una noche se había percatado de que su dueño suspiraba mientras miraba una fotografía en un marco pequeño, y pudo notar aquel brillo y esa tímida sonrisa de alegría formarse en sus labios, Moon sabía que podía haber algo en aquella imagen que tanto hacia a su dueño sentirse feliz, pero al verla, solo pudo ver a Hoseok sosteniendo un libro, simplemente Moon sentía que buscar a alguien es demasiado complicado.

Pero, ahora todo era muy distinto, Moon había encontrado a una persona indicada para Hoseok, y sentía que podía ser feliz, ella es muy lista para buscar.

Estiró sus patas blancas delanteras hacia el frente, abriendo un poco sus pequeños dedos y extendiendo ligeramente sacando sus garras, relamió su hocico y dejó de mirar aquel reloj, nunca entendería cuál era el propósito de esas cosas, pero le gustaba el sonido del segundero caminando.

Dio unos pasos hacia la cama, quedándose lo más cerca posible del tapete que estaba debajo de la cama y acomodándose totalmente recostada, soltó un bostezo, arrugando por completo sus ojos y abriendo su hocico mostrando sus afilados y pequeños colmillos y sacando su lengua, y por fin colocando su cabeza en sus patas delanteras, cerró sus ojos para dormir.