Gato Calicó :: HopeJin ׂׂૢ

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Moon podía notar algo distinto, lo podía hacer de inmediato, y presentía que algo no estaba tan bien como hubiera querido que estuviera, maulló al ver a Hoseok, su dueño se veía feliz, pero bajo esa felicidad había tristeza de por medio, y lo mismo era con el otro humano, ¿acaso algo había pasado para que estuvieran de aquella forma? Moon no lo comprendía del todo, los humanos son demasiado complicados definitivamente.

— Pequeña, ¿Qué has hecho mientras nos fuimos? —Seokjin se había colocado de cuclillas para verla y acariciar esas puntiagudas orejas, Moon cerró los ojos gustosa por el tacto, le encantaban las caricias en aquella zona.

— Le agradas demasiado —mencionó Hoseok al ver a Seokjin tan concentrado en ponerle atención a su mascota.

— Los gatos casi nunca han sido de mi agrado —mencionó Seokjin—, mi abuela tenía uno, le daba tanto de comer que estaba prácticamente con sobrepeso, pero no faltaba día en que no estuviera a mi lado ronroneando para que lo consintiera —Hoseok soltó una pequeña risa al escuchar eso—, nunca le di de comer, y aun así seguía con lo mismo, nunca pude comprender a ese minino.

— Moon nunca me pide comida —dijo Hoseok acercándose y colocándose de cuclillas para estar al lado de Seokjin, de inmediato llevó su mano hacía el pelaje tricolor de Moon y comenzó a acariciar el lomo de la gata— usualmente se concentra mucho en otras cosas, ni siquiera le presta atención a su comida cuando se la sirvo, he pensado que tal vez sea un defeco, y me encanta ese defecto.

— No hay gatos defectuosos, tal vez solo es distraída.

Moon no se consideraba un gato distraído, simplemente no le gustaba prestarle tanta atención a los alimentos, para ella había otras cosas más importantes en las que podía prestar atención, como en las manecillas de un reloj o en los cables de la computadora de Hoseok, pues allí sentía que había algo, después de todo parecían estar en diferente posición cada que los miraba.

— Seokjin —el mencionado miró hacía su dirección, y en cuanto lo hizo, Hoseok le plantó un pequeño beso en los labios, al separarse le dedicó una sonrisa, Seokjin se había quedado sorprendido por aquel acto, no esperaba recibir un beso, pensaba que seguramente solo le iba a comentar algo y quería que lo viera a los ojos, no esperaba aquello.

Moon movió sus orejas al ver aquello, sus ojos ámbar seguían puestos en ambos humanos, ¿acaso no había sido una ilusión? ¡No, no lo era! Y eso a Moon le encantaba, jamás creyó que lograría presenciar un beso entre ellos, había sido pequeño, debía de admitirlo, y no entendía cómo podían mostrar su amor en pequeños actos, pues Seokjin se veía muy sorprendido, inclusive había dejado de darle caricias, mientras que Hoseok mantenía esa sonrisa alegre auténtica que apenas y lograba ver en pocas ocasiones, pero había una gran diferencia ahora, sus ojos brillaban como si hubiera recibido el mejor regalo de cumpleaños del mundo.

—¿P-por qué fue eso? —pregunto Seokjin.

— ¿Por qué no hacerlo? Solo un beso, me quede con ganas de volver a besarte —las mejillas de Seokjin cambiaron a un color rosa de inmediato y Hoseok no pudo evitar sonreír al ver aquello, le encanta ser el causante de encender el rostro de Kim Seokjin.

Moon no quería que parasen aquellos actos, movía su cola de un lado a otro delicadamente, haciendo movimientos similares a los de una serpiente que se arrastra por el suelo, en zigzag, sus ojos ámbar se mantenían concentrados en ambos, quería que se dieran otro beso, le había gustado presenciarlo, y quería otro, estaba emocionada porque hubiera otro beso, quería ver de nuevo como su dueño se atrevía a robarle otro beso a Seokjin, eso era lo que más quería, y se estaba desesperando al no ver que de nueva cuenta su dueño hacia las mismas acciones.

Maulló haciendo que ambos la vieran, pero no quería que la vieran, Moon quería ver otro beso, no que ambos la mirasen, ¿por qué no se besaban de nuevo? ¿Por qué los humanos se consideran seres inteligentes cuando ni siquiera pueden hacer algo que ellos mismos quieren realizar? En ese caso los gatos serían los seres inteligentes aquí, pues ellos si quieren comida la piden, si quieren que seas su esclavo personal de por vida lo piden con la mirada, si te quieren y adoran te lo demuestran, ¡los humanos definitivamente deberían de ser considerados inteligentes!

— ¿Qué pasa, Moon, quieres algo de comer?

Sí, su dueño no es nada inteligente, camino hacía Hoseok y restregó su cabecita sobre la rodilla derecha de su dueño, por más que quería empujarlo no podía hacerlo, Moon deseaba ser un gato montés o un tigre para poder rugirle a su dueño y obligarlo a que se acercase de nueva cuenta a Seokjin para que lo besará, ¿por qué la vida no lo había hecho llegar como un feroz tigre o un gato montés? El destino es cruel y despiadado algunas veces.

— Creo que quiere que hagas algo.

¡Seokjin si es inteligente!

— ¿Eso crees? —Seokjin asintió de inmediato— ¿Qué se supone que quieres que haga, Moon?

Moon maulló mostrando sus pequeños colmillos y después miró a Seokjin, Hoseok frunció el ceño levemente, ¿acaso Moon quería que besará a Seokjin? No, imposible, aunque, prácticamente había sido ella quien lo había guiado hasta Seokjin, ¿será que Moon quiere que se quedé con Seokjin? Puede que sea de esa forma, y apenas esté captando ese mensaje que le ha estado dando todo este tiempo.

— Parece que alguien quiere que se repita el beso —mencionó Hoseok en tono juguetón, Seokjin de inmediato rodó los ojos pero sonrió al escuchar el tono que había hecho Hoseok, sabía que lo hacía para alegrarlo.

— Ni creas que dejaré que me beses de nuevo.

— Nunca digas eso, puede que vuelva a ocurrir y ni siquiera sepas cuándo sucedió, como ahora.

— Hace un mom...

Seokjin dejó de hablar al ser callado por los labios de Hoseok sobre los suyos de nuevo, Moon quería poder sonreír al igual que los humanos, le había gustado ver aquello, le gustaba ver a esos dos así de juntos, era simplemente perfecto.