FLOWER (Seventeen)

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La espalda de Jeonghan se estrelló con fuerza contra la pared, o mejor dicho, Wonwoo lo arrinconó con tanta fuerza que uno pensaría que querría clavar el cuerpo del pelirrojo en el concreto. Sin duda dolía, pero Jeonghan estaba siendo estimulado tan correctamente que el dolor pasaba a un segundo o tercer plano de las sensaciones que su cuerpo estaba experimentando de momento. La mano derecha de Wonwoo acariciando su erección por debajo de la falda, su mano izquierda acariciando su espalda de arriba a abajo y su lengua siendo un intruso deseado en su boca

- Wonwoo - Gimió en su oído cuando el chico de voz ronca atacó su cuello con mordidas suaves - Vamos a la cama - suplicó

El menor se separó sólo un poco para mirarlo. Sus miradas perdidas se encontraron y Wonwoo casi se odió por no poder detenerse. Estaba mal, todo estaba mal. Pero aún así, caminaba con Jeonghan rumbo a la gran cama de su habitación. Él estaba drogado, y Jeonghan no parecía estar mejor que él.

Lo lanzó sobre las sábanas haciendo que rebotara y sus ropas se desacomodaran por completo. Wonwoo se posicionó sobre él y se desnudó el torso frente al pelilargo. Jeonghan tragó saliva al ver lo bien formado del cuerpo de Wonwoo. Era delgado pero podría jurar que se ejercitaba, su abdomen pálido y tonificado lo lograba poner nervioso y ansioso al mismo tiempo. Cerró sus piernas y de pronto se sintió avergonzado, desvió la mirada y trató de cubrir su dolorosa erección con la falda

- ¿Ahora tienes vergüenza? - se burló Wonwoo abriendo sus piernas y dejándose caer suavamente sobre él - Será mejor que te vayas si no estás seguro...

🌹🌹🌹

- Maldita sea, Wonwoo - suspiró el pelilnegro.

La casa Jeon parecía un laberinto en cuanto a su construcción. Había olvidado cómo llegar a la habitación de su amigo y seguía abriendo puerta tras puerta sin encontrarlo. Estaba por rendirse cuando pudo ver una línea de luz caer sobre el pasillo. Sonrió decidido a avergonzar a su amigo, caminó despacio para no ser descubierto, se acercó lo más posible hacia la puerta entreabierta y su sonrisa se borró

- Realmente lo está engañando - Murmuró para sí - A la muñequita no le va a gustar esto...

Seungcheol abrió ligeramente la puerta, apenas para que uno de sus ojos verificara lo que había dentro. Si ellos no hubieran sido tan ruidosos, se habrían percatado del ligero rechinido de la puerta. Pero no fue así.

Wonwoo tomaba la pequeña cintura de su acompañante. Hincado tras de él, restregaba su erección entre sus glúteos, divirtiéndose y jugando con la persona postrada frente a él

- Wo- Wonwoo... Ya basta... Hazlo

Un lindo pelirrojo se giró sólo un poco para poder hablarle a la persona que lo provocaba. Sus mejillas ardían y su frente sudaba

¿Jeonghan? - pensó Seungcheol. De inmediato se giró y recargó sobre la pared, incapaz de seguir observando. Luego su vista viajó hasta el suelo. La ropa de mujer estaba regada por toda la habitación ¿Qué demonios estaba pasando? ¿En qué momento Jeonghan se había aparecido en la fiesta?

Wonwoo tomó el cuello del pelilargo y lo levantó hasta que su pecho tocó su espalda

- Abre bien las piernas, lindo - Susurró en su oído. Tomó el brazo derecho de Jeonghan y lo colocó tras su espalda - Y sujétate bien

Wonwoo no le dió tiempo de prepararse adecuadamente porque en realidad no lo necesitaba. Jeonghan estaba tan jodidamente necesitado como él, los efectos de la droga no habían pasado ni un poco, y teniendo a Jeonghan frente a él, Wonwoo estaba seguro de que no necesitaba de unos estimulantes para querer cogerlo. Las primeras estocadas lanzaron el cuerpo de Jeonghan hacia adelante, Wonwoo lo mantuvo cerca pero las fuerzas del pelirrojo apenas le permitían mantenerse hincado sobre la cama. Su cabello bailaba en el aire, siguiendo el ritmo de las embestidas profundas. El choque de sus pieles no lograba opacar los gemidos ahogados que Jeonghan no dejaba de soltar