Dos meses habían pasado más lento de lo que todos hubieran querido. El fin del semestre significaba sólo una cosa: el proyecto final estaba a la vuelta de la esquina y Jeonghan estaba listo para salir de ahí y hacer la mejor presentación que hubiese hecho antes. Los profesores Kwon y Lee habían hecho muchos esfuerzos por viajar hasta Corea y monitorear el avance del pelirrojo de manera personal, por supuesto, nada de eso estaba permitido en el centro, sin embargo, para Jeonghan los días de visita eran como una fiesta de cumpleaños. Jugaban, reían y hacían todo un espectáculo durante su práctica, eran tan ruidosos y divertidos que los demás pacientes se acercaban primero de forma temerosa, al final se quedaban a ver todo el número que los profesores montaban. Todos se reunían y servían la comida en el jardín para que siguieran riendo.
Wonwoo observaba desde lejos como día a día Jeonghan regresaba a ser el que era. No. Aún mejor. Sobraba decir que sus avances y voluntad se habían convertido en su mejor fortaleza, y su pasión por el arte era la mejor motivación y distracción que pudo haber encontrado para sobrevivir. Además del apoyo de sus padres, que prometieron no irse de Corea hasta que él estuviera fuera del centro, tenía a los profesores y sus amigos, era cuestión de días para que el tiempo volviese a acomodar las cosas y todo recuerdo doloroso quedara atrás
- ¿Sabes que Jeonghan quiere ir a la escuela para presentar Purple Rose? - preguntó Tzuyu
- Muy digno de él - sonrió cruzándose de brazos
- ¿Estás bien con eso? - preguntó ella
Wonwoo no tuvo que preguntar a qué se refería, porque lo sabía con exactitud. El hecho de que Jeonghan volviera al colegio significaba muchas cosas ¿Pero quién era él para molestarse o aconsejarle que no fuera? Jeonghan estaba renovado, era como un ave preciosa y exótica que sería liberada de su cautiverio ¿Por qué le cortaría las alas a un espíritu salvaje que sólo sabía volar por encima de todos y divirtiéndose siendo él mismo? No. Wonwoo no estaba ahí para tomar sus decisiones, él estaba a su lado para aconsejarlo si él lo pidiese, para tomar su mano cuando estuviese a punto de resbalar, para subir a la montaña rusa con él cada que tuviera miedo de estar solo, pero no sé entrometería en su vida, incluso si eso significaba hacerse a un lado. Por primera vez entendió lo que era amar a alguien de verdad, porque entendió que esa persona sería su primero en todo, incluso antes que él, Jeonghan era todo lo que tenía, y haría por él lo imposible... Incluso hacerse a un lado.
- ¿Qué pasará cuando se encuentre con Seungcheol? - insistió ella
- Pasará lo que tenga que pasar - admitió triste
- Suenas inseguro...
- Seungcheol... Él lo ama mucho...
- Tú también - sonrió ella
- Más que a mi vida... Pero, Jeonghan...
- Él también te ama
Wonwoo lo miró con un hilo de esperanza y brillo en los ojos
- Pero ama más a Seungcheol...
Wonwoo sólo pudo reír sintiéndose devastado. No es como que no lo supiera.
- La cuestión es que Jeonghan es más compatible contigo, y Seungcheol no ha dado la cara desde aquel día, por más que Jeonghan lo ame si no siente ese amor por parte de Seungcheol terminará por ser nada - Ella lo miró con unos ojos grandes y amorosos - En cambio tú, has estado en todo momento... Demostrar amor es aún más importante que decirlo... Y tú lo haces todos los días, estando aquí...
Tzuyu abrazó a Wonwoo como una madre abrazaría a su hijo. Él tardo en corresponder sus brazos, pero lo hizo sintiéndose aterrado por no volver a sentir ese cariño nunca más. Si Jeonghan elegía a Seungcheol, él tendría que hacerse a un lado. Estaba mal, pero estando con ellos se sentía parte de su familia, la familia que siempre le hizo falta
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FLOWER (Seventeen)
FanfictionJeonghan es el hijo perfecto. El único hijo de una modelo internacional y un cantante posicionado en la cima de la industria musical que unieron sus genes en un perfecto joven de 17 años de edad. Jeonghan no sólo heredó una voz angelical y un rostro...