FLOWER (Seventeen)

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- ¿Amante? - arqueó una ceja

- Sí - admitió con molestia - Por supuesto, en su momento no lo sabía. Siempre fui el segundo, y el muy imbécil fue lo suficientemente bueno para ocultarlo

- ¿Cómo te diste cuenta?

Wonwoo se puso serio de pronto. Jeonghan se encontraba realmente curioso por saber, pero tampoco quería ir más allá de lo que él castaño le permitiera. Si indagaba más, sentía que el chico rompería en llanto en cualquier momento

- Lo lamento, si no quieres-...

- Mi padre... - interrumpió de pronto - Nos descubrió teniendo sexo en la sala... - sonrió recordando el momento - Golpeó a Mingyu y lo sacó de casa. Volvió adentro sólo para decirme que si le iba a dar el culo a otro hombre, al menos buscara a alguien con suficiente dinero para mantenerme, no a un entrenador mediocre como Mingyu...

- ¿Qué hiciste?

- ¿Yo? No pude hacer nada las dos semanas que siguieron de eso. Mi padre me golpeó y envió directo al hospital - sonrió triste - Un par de costillas rotas y una contusión

- ¿Quién demonios le hace eso a su hijo? - preguntó bajo sin querer interrumpirlo - Debiste demandarlo

- No me importaban los golpes, tampoco sus reclamos... - suspiró - Amaba tanto a Mingyu que estaba dispuesto a eso y más, con tal de estar con él - miró a Jeonghan con una sonrisa - Eso no fue lo peor...

El pelirrojo tragó saliva. Su propio padre lo había casi matado a golpes, ¿Qué podría ser peor que eso?

- Mingyu no fue ni una sola vez al hospital, mis compañeros de equipo y los chicos estuvieron ahí. Incluso el profesor Lee y Kwon me visitaban, pero él jamás fue

Jeonghan podía saber lo mucho que Wonwoo reprimía sus emociones. Trataba de verse calmado y hablar del tema como cualquier otra cosa, fingiendo que ya no le afectaba y había dejado todo aquello atrás, pero sabía que no era así. El pestañeo constante era prueba de que reprimía sus lágrimas, todavía lo amaba.

- Creí que era mi padre el que lo tenía amenazado o algo como eso. Cuando fuí dado de alta en el hospital, lo primero que hice que buscarlo en su casa, él nunca me dijo dónde vivía, después entendí por qué. Cuando llegué ahí, fue su novia quien abrió la puerta...

- ¡¿Qué mierda?! - se exaltó sentándose en la cama

- Ya sé - Wonwoo imitó su acción y alzó sus hombros. Pasaron algunos instantes en el que ninguno rompió el silencio - ¿Nos besamos?

Fueron varios segundos en los que ambos se quedaron mirando con total seriedad. Luego sus sonrisas se fueron asomando hasta que ambos estallaron en carcajadas contagiosas que apagaron el silencio en la mansión Jeon

- Qué manera de acabar con la tensión - dijo el pelirrojo secando sus lágrimas - Que Mingyu se meta un balón por el culo, si puede, le das otra oportunidad

- Olvídalo - suspiró - Hay heridas que a pesar de sanar... Cuando miras la cicatriz... Vuelve a doler como si aún estuviera ahí...

- Que se joda... - Murmuró

- Tu turno - habló acomodándose de nuevo - ¿Qué mierda con Hong? Es casi un anciano para tí

- Mingyu también es viejo para tí

- Pero coje rico

Jeonghan hizo una mueca de asco - No puedo creer que me dejé coger por un pasivo

- Eras tú quien no paraba de decir "No te detengas Wonwoo" "Más fuerte Wonwoo" "Ah~" - imitó su voz aguda y sus jadeos

- ¡Cierra la boca! - lanzó a Wonwoo fuera de la cama y este casi cae al piso. Jeonghan se llenó de rubor - ¡Y-Yo no hago eso!