FLOWER (Seventeen)

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Jeonghan despertó, pero sus ojos pesaban demasiado para poder abrirlos. Se detuvo un momento a tratar de descifrar dónde se encontraba. La cama pequeña e incómoda, el pijama de tela cualquiera, el notorio olor a desinfectante que lo rodeaba... Ah. Y las manos que lo sostenían.

Se removió en la cama avisándole a su acompañante que estaba despierto

- ¿Jeonghan? - preguntó él

El pelirrojo abrió sus ojos lentamente, la imagen de la persona frente a él se hizo nítida. A decir verdad, esperaba ver a otra persona. Tal vez despertar a lado de Wonwoo en un centro de rehabilitación, pero no. Él no estaba a su lado, aún en esos momentos.

- Hola - dijo sin ganas - Sigo en este mundo, qué mala suerte

- ¡Jeonghan! - lo regañó - ¡¿Cómo puedes decir algo tan egoísta?! ¡¿No sabes lo preocupado que estaba Jae?! ¡¿Qué pasa contigo?! ¡Se supone que habías dejado esto!

- Deja de regañarme, Joshua. Es lo único que haces últimamente...

Joshua suspiró profundamente. No podía dejar de preocuparse por ese chico, siempre sería especial y odiaba verlo de ese modo. Sentía que quería cuidarlo y mimarlo como lo hacía cuando estaban juntos.

- Si dejaras de meterte en problemas no sería así - dijo acariciando su cabello - Te ves terrible

- Me siento aún peor

- ¿Te duele algo?

- No. En realidad...

Jeonghan se enderezó en un movimiento y comenzó a vomitar a un lado de la cama. Una enfermera apareció por la puerta cuando Joshua la llamó, y luego un par más

- Salga de aquí, por favor - pidió una

- ¿Qué le pasa? - se angustió

- No estamos seguros, tal vez está rechazando el tratamiento...

🌹🌹🌹

La clase de SoonYoung terminó y se sentó pesadamente sobre el sillón de la sala de práctica. Tomó una toalla para secar su sudor y bebió abundante agua. Recargó su cabeza hacia atrás y suspiró.

Jihoon no había dicho nada luego de esa vez en la cocina. Sólo había susurrado "Te apoyaré sea lo que sea que decidas" luego sólo le sonrió y lo dejó solo en la mesa. ¿Lo que sea que decida? Él ya había decidido, lo peor de todo era que ni siquiera tuvo tiempo de pensarlo, porque no había nada que quisiera pensar, la idea de dirigir su propia academia era su máximo deseo después de estar con Jihoon. ¿Tendría que sacrificar un sueño por otro? No. No tendría que ser uno u otro. Jihoon lo apoyaría, pero... Él mejor que nadie sabía que una relación a distancia entre ellos no funcionaría. Tanto para Jihoon como para él era indispensable el contacto físico, así como los cachorros necesitan el calor de su madre, así se necesitaban ellos.

Pensó en la posibilidad de llevarlo con él, pero estaba seguro de que se negaría. Jihoon tenía todo en Corea, y aunque lo amaba tanto como decía, no era suficiente como para dejarlo todo por él, y SoonYoung no quería quitarle todo eso. Sus alumnos, su familia, su adorado trabajo... Él adoraba enseñar en el colegio CARAT.

- ¿Estás bien? - preguntó abriendo la puerta

- Hola, amor - sonrió enderezándose - ¿Terminó tu clase?

- Sí - dijo cerrando la puerta - Apestas

- Lo sé - se sintió tímido y siguió secando su sudor