CAPITULO 15

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Strasbourgs
14/02/1855
Castillo de Jimin
6:00am

Jimin se encontraba arreglando sé después de haber tomado una ducha, las criadas se encargaban de ponerle cada prenda de manera que se vieran impecables, y la vestimenta que escogieron ese día hacía ver a Jimin hermosamente perfecto, un largo vestido negro con una capa de Tul, un hermoso brazalete en espiral, una pulsera unida a un anillo, pusieron su runa en uno de sus muslos y por último su corona, la cual el mismo modifico.

Todo en Jimin quedaba hermoso gracias a su menudo cuerpo, al terminar de arreglarlo, las mujeres salieron de la habitación del hechicero, el cual se quedó mirando por el balcón el hermoso amanecer, su tierra era hermosa, de repente una idea llegó a su cabeza.

Mirando hacia la puerta suspiro, para después caminar hasta el balcón, recibiendo el aire fresco de la mañana, miro al alrededor del castillo notando algunos guardias vigilando el lugar, Jimin volvió adentro para tomar una larga pero delgada túnica negra.

- Solo quiero ver a mi gente- se dijo poniéndose la capucha, antes de crear un portal con sus dedos visualizando el lugar donde que ir.

Solo fueron segundos los que pasaron, antes de aparecer en el bosque muy cerca del límite con strasbourgs, camino un poco más hasta que pudo ver el pueblo por fin de cerca, ante sus ojos era hermoso, se encontraba transitado por varias personas, comerciantes, algunos habitantes y algunos niños corriendo para ir a la escuela, tomando valor, decidió entrar en el pueblo, camino pasando el pequeño puente que dividía a strasbourgs con el bosque, se inclino en uno de los lados viendo el agua cristalina correr por el puente y algunos peses que se sonaban en la superficie, sonrió para volver a camina hasta el centro del pueblo.

Al llegar bajo un poco la cabeza para que las personas no vieran por completo su rostro, paso por el mercado escuchando como los comerciantes le ofrecían sus productos, su sonrisa se volvió más grande al ver lo amables que eran los pueblerinos.

- ¡Gali rápido, llegaremos tarde!- Jimin escucho un grito y posterior alguien chocar contra él, se giro para ver de quién se trataba, encontrándose con una pequeña encantadora, quien al verlo se sonrojo- disculpe usted joven, no fue mi intención.

Se disculpo la pequeña bajando su mirada, Jimin sonrió y se agachó a la altura de la pequeña.

- No te preocupes, no pasa nada pequeña- dijo, acariciando su cabeza- ¿Cómo es tu nombre?

- Sam- contestó la niña, con una radiante sonrisa.

- Sam, hermoso nombre- Jimin le sonrió, antes de escucha otro grito.

- ¡Sam, espérame!- Gali llegó a ellos con el ceño fruncido, pero al ver a Jimin suavizó su mirada.

- Este pequeño es tu hermano?- pregunto el mayor, incorporándose en su lugar, Sam asintió, Jimin miro un puesto de frutas detrás de él, le pidió dos naranjas al vendedor para volver a miras a los niños y entregárselas, los niños lo recibieron con alegría.

- Esto es para que lo coman de camino a la escuela...- dijo poniendo sus dos manos en la cabeza de cada niño, de repente una visión llegó a el mostrándole dos bebés, fuego, gritos y personas corriendo por el centro del pueblo, rápidamente volvió en si apretando sus ojos, noto como los pequeños frente a el lo miraban extrañados, Jimin formo una sonrisa forzada antes de hablar-...es mejor que se den prisa si no quieren llegar tarde a la escuela.

Los pequeños sonrieron y salieron corriendo directo a la escuela, Jimin los vio alejarse poniendo una expresión de preocupación, no entendía el por qué de esa visión, pero de algo si estaba seguro, sus visiones siempre eran ciertas, miro a su alrededor notando como los pueblerinos reían y hablaban entre ellos, eran su gente, apesar de ser tan diferentes lo eran.

- Nunca les haría daño, a pesar de todo- se dijo para si mismo, volviendo a retomar su camino.

De a poco se fue alegando del centro de strasbourgs, viendo como retomaba de nuevo la naturaleza, subió un camino empinado y cuando estuvo en la punta de este pudo ver lo más hermoso que nunca antes había visto, el hermoso campo de strasbourgs, habitado por sus granjas, quiso bajar y caminar por el sendero, pero de nuevo una visión invadió su cabeza, viendo como todas las cabañas estaban en llamas al igual que todo a su alrededor, Jimin pestañeo varias veces respirando entrecortado, mirando de nuevo el campo hermoso y verde.

Rápidamente se dio la vuelta y camino rápidamente de regreso al centro de strasbourgs, paro en un árbol sosteniéndose con una mano mientras que la otra la llevaba a su pecho, había sido una mala idea visitar el pueblo, todas esas visiones lo estaban poniendo mal, pero en realidad no eran visiones.

- Son predicciones- completo sus pensamientos.

Suspirando temeroso se reincorporo, para retomar su camino, iba tan concentrado que no se dio de cuenta cuando, caundo llegó a la iglesia de Strasbourg, se paró frente al lugar para después subir con lentitud los escalones, al estar frente al enorme portón de esta, suspiro.

- Ustedes son los únicos culpables, no ellos- dijo Jimin en un susurro, para después darle la espalda al lugar.

El centro del pueblo se encontraba más habitado que minutos atrás, los pueblerinos hacían sus compras mientras hablaban, los que pasaban por su lado lo saludaban alegremente y el por supuesto les devolvía el saludo de forma amable, de repente su corazón empezó a latir rápidamente, minutos antes lo había sentido acelerar se pero no le prestó mucha atención, pero ahora era más fuerte, tanto que lo hizo soltar un jadeo bajo, seguido de sus ojos tornándose de morado, pasaron unos segundo así pero agradeció que todo volviera a la normalidad.

- Disculpe joven...- escucho la voz de una anciana frente a el-...se encuentra bien?

Jimin sonrió y asintió levantando la cabeza para mirar a la mayor.

- Si, estoy bien- la anciana sonrió, pero su rostro pronto fue uno de confusión.

- Esos ojos, te conozco?...- pregunto la anciana, de repente sus ojos se abrieron en par, cambiando su mirada a una de horror-...¡no, eres tú, eres tan joven, estás vivo, no es posible...!- Jimin la miro confundido, miro a su alrededor notando como todas las miradas de los presentes estaban sobre ellos.

- Disculpe señora, creo que me confunde- dijo Jimin, intentando tranquilizarla, la anciana negó con la cabeza.

- ¡Eres tu, lo siento ellos nos obligaron, yo no quería, perdón, tu esposa tu hijo, lo siento, no quería, fueron ellos, fueron ellos, nos obligaron!!.

- Abuela...- de repente una joven se acercó a ellos corriendo, miro a Jimin preocupada-...que pasó que le hizo a mi abuela?

- Nada, ella solo...- Jimin intento hablar, pero los murmullos de la gente lo estaban volviendo loco, se sentía asfixiado de repente, todos lo miraban, su gente lo miraban con temor, no quería eso de ellos, los gritos de la señora se escuchaban más altos, sentía ganas de gritar también cuando una mano lo tomo de la muñeca sacándolo del lugar y de nuevo su corazón se empezó a acelerar.

Mi pueblo me teme.

Pensó Jimin mientras se alejaba del lugar.












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No olviden que las fotos están en el libro your visión.📷📷📸

Perdón por la demora mis personas, es que e estado muy ocupada, espero entiendan, espero les haya gustado el cap, si es así no olviden dejarlo en los comentarios y regalarme una estrellita, sin más nos leemos en el próximo, Bay Bay Bay

...HECHIZO AL CORAZÓN...KOOKMIN (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora