...HECHIZO AL CORAZÓN...KOOKMIN (Pausada)

CAPITULO 07

Todos los empleados en el castillo estaban caminando por todo el lugar, terminando de preparar los últimos detalles del salón para recibir a los invitados que estaban prontos en venir, los ancianos se encargaban de que todo quedará impecable, por otro lado en la habitación de Jimin, las damas se encargaban de lavar su cuerpo en agua de azafrán, mientras Jimin con los ojos cerrados, se relajaba mientras sentía las pequeñas cosquillas que los pétalos de azafrán hacían en su suave piel.

Después de unos minutos las damas cubrieron su desnudo cuerpo con una larga bata, mientras que otras se encargaban de alistar su vestimenta y sin esperar más comenzaron a arreglarlo, de tal forme que luciera aún más hermoso de que siempre lucía, con su ropa adornando a la perfección su delicado cuerpo, mientras hacían todo esto unos golpes en la puerta rompieron la paz que había en la habitación, una de las mujer habría la puerta y por está entro uno de los ancianos el cual hizo una reverencia de inmediato.

— Joven, ya está casi todo listos en el salón– dijo el hombre sin levantar la cabeza.

— Bien– respondió el peli morado, sin importancia.

— Dentro de poco, empezarán a llegar los invitados– dijo de nuevo el anciano, pero está vez subiendo su mirada al chico con expresión seria.

— Bien....

El anciano suspiro y miro con el seño fruncido a Jimin, le hizo una seña a las mujeres para que salieran del lugar dejándolo solo con el brujo.

— Joven, ya se que no le interesa para nada está fiesta...– hablo caminando hacia Jimin quien seguía con su expresión neutra–...pero usted sabe que no es una fiesta cualquiera.

— Lo se, también se que no soy solo un simple brujo...

— Es el supremo hechicero de todo el Submundo...– dijo el hombre caminado de nuevo a la puerta–...y está noche se coronará como tal.

Sin mas que decir el anciano salió de la habitación dejando a jimin solo, sintiendo como sus ojos picaban por las lágrimas que se acumulaban en sus ojos, llevo su mano hasta su muslo, donde se encontraba el dije que le dejo su madre, tocando lo con la punta de sus dedos.

— Todo sea por ustedes– dijo para si mismo, controlando se para no dejar caer sus lágrimas y volver a poner el rostro serio que lo caracteriza.

Después de unos minutos, las damas entraron de nuevo a la habitación para terminar de arreglar al chico.

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Dos horas después.

Jungkook estaba nervioso y sus compañeros ni se diga, era una locura lo que estaban a punto de hacer, pero Jeon era su líder no podían negarse, pero igual era una locura, estaban en el bosque apunto de dirigirse hasta el castillo donde vieron a varias personas entrar, a juzgar por sus aspecto podrían decir que no eran alguien importante.

— Están listos?– pregunto Jeon, colocándose el antifaz, al igual que sus compañeros y tomando la invitación, que se le callo a Jimin, de entre su bolsillo, sus compañeros asintieron y siguieron a su líder.

Caminaron de forma tranquila por el largo puente, al llegar a la puerta los guardia los miraron y bloquearon la entrada con sus cuerpos.