Pergamino 14

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— ¡Más rápido!

Itachi no me ha dejado descansar desde que peleamos en Kirigakure, su urgencia por llegar a Konoha es alarmante pero no suelta prenda de nada.

— No puedo, estoy demasiado cansada.

— La Aldea está en peligro, él la atacará.

— ¿Y quién demonios es "él"?

El dolor que refleja el rostro de Itachi hace que cierre la boca y siga sus órdenes a pesar de sentir los músculos tensos. Debe de tratarse de alguien muy fuerte.

Una parvada se aleja en dirección contraria, otro indicio de que algo muy malo está sucediendo. Ahora soy yo la que quiero llegar cuánto antes, mi hija podría estar en peligro.

Las grandes puertas de la Aldea están destruidas y el paisaje más allá de ellas no resulta muy esperanzador. Vemos a varios seres blancos luchar contra ninjas de Konoha, son demasiados.

— Tenemos que ir con el Hokage.

Sigo a Itachi hasta la torre principal, esquivamos los ataques tanto del enemigo como de nuestros aliados, estamos en pleno campo de batalla y el fuego cruzado no nos ayuda a llegar a nuestro objetivo.

El techo de la torre explota dejando ver un dragón de fuego por las orillas, Dios mío que Ursa esté bien. Itachi y yo acelermos el ritmo hasta llegar a lo que de verdad nos interesa.

En la oficina del Hokage encontramos a Sasuke y a Naruto ambos combatiendo mano a mano con los intrusos. En medio de ambos observo un porta bebé y sin pensarlo dos veces me adentro a ayudarlos.

— Hermano...

— ¡Sakura!

Itachi recibe los saludos mientras yo los paso de largo al escuchar el llanto de mi hija, un alivio recorre mi cuerpo cuando compruebo que no tiene nada más allá de lo irritada por tanto ruido.

— ¿En dónde está el Hokage?

— En la terraza, un tipo enmascarado se lo llevó.

Itachi corre como alma que lleva el diablo dejándonos a nosotros solos.

— No tengo palabras para agradecerles el haber cuidado de Ursa.

— N-No no es nada-ttebayo.

— Ursa es parte de la Aldea, moririamos por ella.

Con lágrimas en los ojos realizo una reverencia en forma de agradecimiento a Sasuke y a Naruto.

— Sakura enserio no es tanto, no tienes por qué hacer esto-ttebayo.

Sasuke que es el más serio sólo se limita a palmear mi espalda para calmarme. Aquí juntos es que de verdad entiendo la voluntad de fuego que tiene nuestra gente.

                                 🍥

— ¿Hay más?

— Eran todos Sasuke-niisan.

Hanabi desactiva su byakugan y espera órdenes de Sasuke, por alguna razón los invasores emprendieron la retirada después de bombardear varios edificios de la aldea. Algunos shinobi quedaron atrapados entre los escombros y nosotros hemos ayudado a sacarlos.

Itachi logró llegar con el Hokage pero nos sacaron de inmediato del lugar, no han dicho nada y Hiruzen no se ha mostrado desde entonces, sigue encerrado con Itachi, Obito y Kakashi.

— ¿Cuál habrá sido el objetivo de éste ataque? Sé que me quieren a mí pero hasta yo creo que fue estúpido teniendo en cuenta que en la aldea se  encontraban grandes shinobi.

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