Destiny together ✔️

Capítulo 4

Viajar con Connor era bastante aburrido, solo se quedaba ahí revisando papeles de trabajo sin decir ni una palabra. Ya estábamos en el hotel, todo estaba hermoso tal y como lo recordaba. Me sentía un poco sola aquí, no tenía con quien hablar ni nada, se que hemos venido por motivos de trabajo pero igual creo que esta noche voy a divertirme, eso no es nada ilegal y espero que a Connor no le moleste.

Salí de mi habitación para dirigirme al restaurante cuando escucho pasos detrás de mi.

-¿a donde vas?- pregunta esa voz que me pone tan nerviosa.

-a cenar- se pone a mi lado.

-pensé que me esperarías- ¿en serio creyó que yo cenaría con el?, para estar nerviosa todo el rato por su mirada y capaz que la comida me caiga hasta mal, no gracias.

Al final si terminamos cenando juntos, como supuse, ni una palabra en todo ese tiempo salió de sus labios, este hombre es un aburrido.

-¿a donde vas ahora ?- me preguntó cuando vio que me dirigía a otra dirección.

-a la discoteca del hotel- frunció el ceño -¿quieres venir?- no se lo pregunte por ganas sino por educación.

-no, yo tengo mucho trabajo- se giró de espaldas y se fue.

La música estaba muy alta, había gente bailando y divirtiéndose por todos lados, me dirigí a la barra, un chico bronceado, con el cabello negro una perfecta sonrisa y muy guapo estaba del otro lado.

-¿en que puedo servirle? - me sonrío mostrando sus blancos dientes.

1,2,3,4 shot me hicieron entrar en ambiente, me sentía alegre y tenía ganas de bailar.

Me dirigí a la pista de baile y comencé a mover mis caderas, no era una experta bailando pero si me movía bien. Un hombre se me pegó y como estaba ya a principio de embriaguez no me importó, seguí moviendo mis caderas ahora sujetadas por sus grandes manos. Algo creciendo detrás de mi me hizo separarme y voltearme, Dios mío a ese hombre se le había parado su miembro, sin que él se lo esperara le solté una cachetada que dejó mis dedos marcados en su cara.

-¿¡PERO QUE COÑO TE PASA!?- me gritó para que le oyera por encima de la música.

-véte a restregarle tu pene a otra persona- me fui hacia la barra, ese capullo había logrado que me enfadara y eso era lo que menos quería, necesitaba alegría y diversión.

El chico guapo en seguida que me vio sonrío y saco el pequeño vaso echando el líquido transparente en el, me lo bebí rápido.

-chica con calma o terminarás más borracha que una cuba- sonreí

-eso es lo que quiero - volvió a rellenarme el vaso

-pues en ese caso - dejó la botella a mi lado -la casa invita - me guiñó un ojo y se fue a atender a otros clientes, que amable.

Me sentía muy activada, al final me había acabado aquella botella de tequila yo sola, estaba muy ebria pero me agradaba sentirme así, esa sensación de no tener problemas, de olvidarse del mundo, la amaba.

CONNOR

Empezaba a preocuparme por Carinna solamente porque si se perdía seguramente se acabas mi negocio. Ya eran las 2 de la mañana y aún no había regresado. Esa chica con su torpeza podía hasta perderse en una habitación. Después que terminé el trabajo me quede despierto para escuchar si llegaba pero nada.

Luego de un rato sentí unos pasos torpes por el pasillo que se detuvieron al lado de mi habitación.

-mierda- la voz de Carinna sonaba extraña así que abrí la puerta para ver si todo estaba bien. Sus ojos se encontraron con los míos y una sonrisa traviesa adornó sus labios -Connor menosss mal - arrastraba sus palabras.

-¿Carinna has estado bebiendo?- no se para que pregunté si la respuesta era evidente.

-solo un poquito - se acercó a mi y me dio un fuerte abrazo -sabes que pareces un gran oso de peluche- la aparté cuidadosamente.

-apestas a alcohol- sonrío -Mira creo que deberías ir a la cama, estás fatal. Mañana tenemos una reunión y si vas con resaca no sería nada profesional-

-es que no puedo- hizo un puchero -creo que perdí mi tarjeta- se tambaleó y tuve que agarrarla para que no callera -¿cres que me puedo quedar a dormir en tu habitación?- suspire pesadamente, no la iba a dejar durmiendo en el pasillo, aunque ganas no me faltaban porque tratar con un borracho es como tratar con un bebé.

-si - ella dormirá en la cama y yo en el pequeño sofá.

-waow que habitación tan ordenada - comenzó a dar vueltas como una niña pequeña -la mia esta echa un caos- comencé a llevar una almohada al sofá y me miro con mala cara -¿que haces ?-

-¿eres tonta o no ves bien? preparando el sofá para dormir - comenzó a reír.

-esta cama es suficientemente grande para los dos-

-de ninguna manera voy a dormir contigo-

-venga Connor no va a pasar nada, tampoco tengo alguna enfermedad contagiosa y yo estoy taaan borracha que no recuerdo ni mi propio nombre y tú eres tan aburrido y pesado que nunca se te ocurriría aprovecharte de nadie - así que eso era lo que ella pensaba de mi, que equivocada estaba.

Volví a llevar las cosas a la cama y me acosté, ella comenzó a quitarse los zapatos.

-¿oye cres que me puedas prestar alguna camiseta tuya?- busqué en la maleta y se la di para que acabara de dormirse y no me jodiera más, comenzó a quitarse el vestido hasta quedar solo en bragas frente a mi.

-¡¿PERO QUE HACES?! - dije girándome y rió.

-¿que, nunca has visto unos pechos ? - Dios mío de verdad que el alcohol hace maravillas.

-claro que si solo que...-

-ya puedes voltear- cuando lo hice aún no se había cubierto Y comenzó a reír de nuevo-no tiene nada malo que veas- había que aceptar una cosa, tenía unas tetas muy bonitas, que por su culpa ahora tendré fantasías con ellas -a demás - se acercó lentamente con la mirada de depredadora -algún día - pasó sus manos por mi pecho -tu serás el otro dueño de este cuerpo- me quede sin saber qué hacer o qué decir, tenerla tan cerca prácticamente desnuda, me estaba matando y había despertado a mi amigo el de abajo.

-Carinna creo que es mejor que te vallas a la cama, mañana te arrepentirás de todo lo que has hecho y dicho - sonrío y se volvió a acercar a mí para dejar un pequeño beso en mi mejilla.

-buenas noches - dijo y se dirigió a la cama, sin ponerse nada de ropa.