Destiny together ✔️

Capítulo 28

Era extraño levantarse y no estar con un frío tremendo. Hacía una semana que habíamos vuelto a Los Angeles, ya comencé de nuevo a trabajar en la empresa. De una forma u otra todo volvió a la normalidad excepto Connor y yo, estábamos justo como en Finlandia, amorosos, teníamos sexo todas las noches , incluso por la mañana y dormíamos juntos, todo era mágico.

-hey Cari - me senté junto a Lizzie, hoy habíamos quedado para desayunar.

-¿por que tienes cara de que tienes una resaca de cojones?- la conocía demasiado.

-no preguntes, pero si tengo una resaca de cojones- sonreí.

-¿saliste anoche?- asintió -¿con quien ?-

-sola, no necesito a nadie para salir a divertirme- A mi no me engañaba, claro que salió con alguien, solo no la quería presionar porque cuando tenía resaca se ponía de muy mala ostia.

-vale - me encogí de hombros.

-por cierto, Roland me pregunto por ti- fruncí el ceño.

-¿el cartero?- asintió -¿por que un cartero que no me conoce casi preguntaría por mí ?-

-me dijo que últimamente te habían mandado muchas cartas, todas las había dejado en el buzón de tu antigua casa y me dijo que si podías pasarás por allá, casi no cabían más - Nadie manda cartas ya, Dios mío estamos en el siglo 21.

-esta bien, luego me pasaré - me encogí de hombros.

Estaba sentada en el despacho de Connor esperándolo, había tenido que salir a una reunión pero ya estaba de vuelta.

-que ocurre ¿por que la cara ?- tenía de verdad muy mala cara.

-estaba tratando de cerrar un negocio pero no se pudo- se sentó en su silla de mal humor -por cierto ¿que vas a hacer en la tarde? -

-pensaba pasarme por mi casa a recoger unas cosas-

-bueno a donde quiera que vallas te llevas a Richard yo llegaré un poco tarde - asentí.

-creo que ya me voy - deje un pequeño beso en sus labios, cuando me separe me volvió a pegar a él.

-crees que esa es forma de despedir a tu novio- nos volvimos a besar solo que esta vez fue más largo y con más intensidad.

Richard me había traído a la casa. Abrí el buzón y muchas hojas en blanco salieron de este, vaya verdad que había muchas.

-señorita, ¿recogerá algo dentro, le hace falta mi ayuda?- negué con la cabeza.

-sólo era esto- dije guardando todo en mi bolso -llévame a la casa - sonrío y asintió.

Estaba tomando una baño relajante cuando la puerta se abre.

-Cari - limpie el cristal empañado de la puerta de vidrio que separaba la bañadera del resto del baño.

-hey - sonreí.

-ya llegue, pero tengo que salir nuevamente, nos vemos más tarde-

-vale - Antes de irse por completo se dio la vuelta, parece que olvido decirme algo.

-mañana habrá una gala - fruncí el ceño.

-¿una gala ?-

-si, se hace sobre esta fecha de todos los años para honrar el crecimiento de Genovese, te dejaré mi tarjeta de créditos sobre tu tocador, te compras el vestido y los accesorios que quieras -

-esta bien - le sonreí y salió. Estos ricos hacen un evento hasta para celebrar que tuvieron pedidas.

Me senté en la cama para tomarme un jugo que me hizo Martha y luego dormir, cuando algo me vino a la mente, las cartas, no las había leído. Cogí mi bolso y las saqué, abrí el primer sobre.