El Corazón Maldito - EN PAUSA

36. Sueño II

Relean el cap anterior, please <3

***

El recuerdo cambió a lo que sucedió unos cuantos días después, cuando volvieron a casa. Si para Will era difícil recordar lo que había ocurrido cuando el había estado allí, era incluso mucho más complicado poder saber algo que no había visto con sus propios ojos. En un inicio, ambos habían entrado al palacio de la madre de Nico, como si nada, ya habiendo olvidado el altercado con la ardilla y todo lo demás.

Entonces la reina había pasado caminando, mientras su hija discutía con ella con respecto a algo que ninguno de los dos llegó a comprender. La jovencita, soberbia y altanera, hablaba con la barbilla levantada y los hombros caídos, como si no tuviera el más mínimo respeto hacia su madre, Will, por su parte, ya estaba tironeando de Nico para dejar de chismorrear cosas que no tenían nada que ver con ellos, y no enojar a ninguna de las dos.

Excepto que, en un momento, era Will quien estaba tirando de Nico, y al segundo siguiente, era Nico quien lo jalaba a él, intentando sacarlo de aquel recuerdo a cómo diera lugar. No el Nico pequeño, sino el actual. Will no podía verlo, pero sí sentirlo. Y escucharlo.

—Ven... Te mostraré otra cosa.

—No— Will de pronto se dio cuenta de que, fuera lo que fuese que estuviera a punto de pasar en ese recuerdo, él necesitaba saberlo—Espera, déjame...

Escuchó a Nico gruñir, pero no lo sintió tironear más, así que pudo concentrarse otra vez en lo que estaba ocurriendo en su vida pasada. Como fuera, seguía sintiendo a Nico adulto como una enorme sombra pegada a su lado, como si, antes se hubiera distraído y por eso Will había llegado hasta ese lugar por accidente, pero, ahora estuviese más atento que nunca.

La hermana mayor de Nico tenía la boca abierta, como si estuviese a punto de gritar algo, pero se detuvo a tiempo cuando los vislumbró allí, en medio del pasillo. Will sintió todo su cuerpo temblar, y su pecho quedarse de pronto sin aire. Se dio cuenta de que le temía muchísimo, quizá incluso más de lo que le temía a la reina.

Ella cerró la boca y formó una mueca de exasperación en dirección hacia los dos, lo cual llamó la atención de la reina y la hizo voltearse para mirarlos. Will no lo pudo soportar más y se ocultó detrás de Nico, quien, en lugar de asustarse con las dos figuras de autoridad más próximas, decidió levantar la barbilla casi con más orgullo que su hermana, como quien pregunta "¿Qué? ¿Tienes algún problema amigo?

Con el tamaño, juventud, y poder del Nico niño, aunque pusiese la cara más aterrorizante de su repertorio no conseguiría asustar a nadie. ¡Vamos, acababa de perder una batalla contra una ardilla, hacía un par de días atrás! Pero, en esa ocasión la reina estuvo a punto de caerse al suelo, a tal nivel que la hermana mayor de Nico tuvo que sostenerla del brazo para evitarlo, mientras la miraba con confusión.

—¡¿Qué demonios fue lo que hiciste?!— la reina tenía los ojos desorbitados, la boca desencajada, y su estupefacto era tal que tanto Nico como su hermana encontraron la humildad y docilidad que segundos antes les había faltado.

Ninguno de los dos parecía comprender la razón por la cual la reina bruja se mostraba tan disgustada. Mucho menos Will, que, para empezar, nunca sabía nada de lo que estaba ocurriendo cuando se trataba de hechiceros que no fueran Nico. La hermana mayor miró a su madre, luego a Nico, y finalmente a Will, haciéndolo echarse a temblar.

Pero la reina no estaba en obligación de darle explicaciones a nadie. Despachó a la hermana mayor con un movimiento de mano, luego a Will, con solo una mirada, y entonces, comenzó a gritarle a Nico como si recién hubiese matado a alguien. Durante varios minutos, Will solo escuchó como la mujer lo llamaba irresponsable, insensato, imprudente y muchas otras palabras que empezaban con "i".