CAPÍTULO 7 [PARTE 2]

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Londres

Recojo todo lo necesario para irme del estudio y volver a mi casa, dejo algunas cosas aquí como las zapatillas de ballet y los zapatos de hip hop.

Antes de salir agarro mi telefono y le envio un mensaje a Jo Kwon:

¡Tu chica irá a las nacionales bebé!

Bajo rápido las escaleras llegando a la recepción del edificio, no veo a Carlos por ningún lado para despedirme de él — imagino que ya terminó su horario —. Salgo del edificio por las puertas de cristal encontrándome con Dugga recostado en el capó de su carro con los brazos cruzados sobre su pecho.

Sus ojos me detallan de arriba a abajo juzgando con ellos mi vestimenta holgada —¿Qué puedo decir? Me gusta no llevar sostén debajo de todo esto —. Imagino que debe de estar preguntándose dónde quedó mi ropa ceñida a mi figura, porque su mirada es de una decepción plena.

Suspira derrotado y descuelga sus brazos —Era demasiado lindo para ser verdad, súbete, ya se está poniendo el sol.

No pierdo el tiempo en hacerlo. Cierro la puerta del copiloto, me abrocho el cinturón y él hace lo mismo.

—Oye creo que no soy la novia falsa perfecta que mereces —confieso —. He faltado mucho a mi contrato y te pido que digas algo con lo que me pueda quitar el cargo de conciencia.

—¿Tienes cargo de conciencia?

—Digamos que sí. Solamente salí contigo unas tres veces durante esta última semana —aclaro — y eso da mucho que sospechar, principalmente porque nadie se lo creerá ni menos Paola...

—¿Qué tiene que ver Paola en esto?

—Tiene mucho que ver Kanín, ella te atrae de una manera que...te gusta y no logro distinguir si ese gusto es sexual o romántico.

—¿Tu cómo sabes que me atrae?—pregunta—. Pareces una sombra.

—No, simplemente soy una de esas personas que observan todo, pero no dicen nada —sorio y miro por la ventana —. Te sorprendería todo lo que se escucha en la cafetería.

Un mensaje en mi teléfono llamó mi atención, inmediatamente le doy abrir y en mi buzón encuentro tres mensajes de chats diferentes.

El primero era de Jo Kwon.

¡Esa es mi chica! Te felicito.

Mañana te daré tu felicitaciones como lo merecés.

Te quiero.

El segundo era de Alexander.

Espero que hoy llegues a cenar con nosotros, no quiero tener que tomar una decisión dura contigo.

Nos vemos en casa junto a Ezequiel y su hijo.

El tercero era de Harold.

Muy buenas tardes señorita Everson. Me encuentro aquí en el callejón esperándola y llevarla a casa. Su padre me pidió que la llevara a la mansión lo antes posible.

Pd: dejando las formalidades de un lado...Dígame que logró entrar en el equipo y fue una de las mejores. Jo Kwon me contó que hoy era tú audición.

—Dentro de tres días mi madre organizará un evento de caridad, vendrán casi todos los de universidad —me dice Kanín —. Será perfecto para formalizar nuestra relación.

—¿Conoceré a mi falsa suegrita? —finjo alegría.

—No le digas así. Odiaría que una chica como tú fuera su yerna.

Si los deseos fueran estrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora