CAPÍTULO 23

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Londres.

¡Por fin ha llegado el día!

Era el primer día de los internacionales... ¡Es una locura!

Nos encontrábamos en una especie de ceremonia de inauguración para así poder ver a nuestro rivales, eran más de cien academias compitiendo, más de quinientas personas de todo el mundo, más de tres idiomas que no entendía; todos esos equipos eran muy buenos por eso han llegado hasta aquí. No cualquiera llega a las internacionales.

Estoy nerviosa porque tengo que competir por el título de miss solista internacional, eso significaba que tenía que enfrentarme a las mejores.

Después de la ceremonia de presentación llamaron a cada solista de cada equipo para que se reunieran. Hablaron sobre cómo sería el proceso de selección, no iba a ver orden de presentación, sino que es aleatorio así que debíamos estar preparados; en esa ronda no habría eliminados, eso es alentador. Al momento de elegir quién sería el solista internacional, este ganaba un bonus de 5 puntos para su equipo en el momento de las rondas de eliminación. Ahora tengo más presión que nunca.

Ese día tenía que competir, así que decidí ensayar mi solo en el vestíbulo. Mis manos sudaban, mi cuerpo temblaba por el frío que hacía en todo el edificio, mi medicación ya esta fallando así que cuando vuelva le pediré al Doctor Paul, que me recete otra con mejor dosis. Mi garganta se encontraba seca, me sentía ansiosa y muy nerviosa; al parecer Kanin lo notó porque me agarro la mano y me susurro un fuerte y claro:

—Sé que te pongo nerviosa, pero bajale un poco a tu ansiedad —susurra y sonríe —. Ya después te beso para saciar tus ganas.

—No seas ridículo —le golpeó de broma en hombro— ¿No ves que todos aquí son buenos?

Expongo, porque es cierto. Todos estos bailarines han estado practicando con profesionales de las altas ligas y yo...

—¿Londres? —ríe socarronamente — ¿La que dice ser la mejor cuando baila, tiene miedo?

—No seas ridículo, claro que no —miento — Es que ellos son más profesionales que yo... Cualquier error que yo haga es una debilidad. Si fallas serás una cucaracha aplastadas por todos aquí.

—Ya deja de hablar y ponte a practicar.

Error.

Creo que mi cerebro entendió "ponte a practicar como una estúpida y caete hasta cuando caminas". Todo iba de mal en peor, no se que me pasaba. Cada caída, cada burla, gracias que no está mi equipo viéndome —pero te están viendo los demás —. Mire a Dugga y tenía cara de haber visto a su madre borracha en un bar bailando en una mesa... de verdad que estaba haciendo el ridículo.

Kanin se levanta de su asiento y camina hacia mí tomándome por el antebrazo, me lleva a la esquina del vestíbulo y habla:

—¿Por qué estás haciendo el ridículo?

Bufé —Psst ¿qué te pasa? sabes que no lo hago.

—No, es por eso, nunca lo haces ¿Por qué demonios ahora si?

—Aaahmm... yo... estaba calentando.

—Calentando...o bailando como si fueras mi madre borracha en una mesa

—¡Oye eso mismo pensé yo! —contesto y me mira con desaprobación — Lo siento estoy nerviosa ¿okay? Tengo miedo a fallar, tengo miedo que seamos los primeros en irnos... tengo miedo a decepcionarte, tu nos ayudaste a llegar hasta aquí, tu...

—Oye , no estés nerviosa, no tengas miedo a fallar, se que eso es normal, pero al menos si fallas fue porque lo intentaste y no porque te rendiste — me toma por los hombros— ¡ Por Dios! ¿No le tienes miedo a la muerte y le vas a tener miedo a eso? —suelta un suspiro — escucha. Eres la mejor en el baile, eres la mejor en todo y serás la mejor cuando le ganes a esta cuerda de imbéciles que no paran de reírse de ti —gritó para que todos lo oyeran apartando un poco su cabeza.

Si los deseos fueran estrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora