Yeosang gimió cuando el pelirrosa le ayudo a sentarse, todavía sobre el charco de agua que ya dejó empapados sus pantalones, su cabeza aún dando por el golpe en la parte trasera de su cabeza debido a la caída. Apenas estaba logrando estabilizarse, cuando alguien más apareció a su lado, halando de su manga y el exceso de perfume lo hizo marearse. Rápidamente, reconoció que se trataba de Wooyoung, sólo él usaría un perfume tan desagradable que probablemente use su abuelo. Está seguro de que es la misma marca que su abuelo usa.
-Dios, Yeosang, ¿estás bien? ¿Cómo te sientes?.-Wooyoung lo atacó con un montón de preguntas, haciendo que Yeosang comenzará a marearse. Acaba de recibir un golpe en la cabeza, no iba a estar preparado para ser atacado con mil preguntas que apenas puede procesar por la neblina de vergüenza que aún lo acompaña.-¿Necesitas ir a la enfermería?.-Pregunta el pelinegro, tomando la mano de Yeosang e inclinándose hacía él para mirarlo a la cara. Esa pregunta llama su atención.
-Es lo mejor.-Habla San, después de haber estado un rato solo mirando a ambos y la escena del amigo preocupado y del otro que apenas puede comprender dónde se encuentra.-Fue una fuerte caída. Su cuerpo debió haber recibido la mayor parte del impacto.-Yeosang parpadeo, oyendo lo que el nadador decía y tenía razón, le dolía el trasero más que cualquier otra parte. Su cabeza estaba bien, había logrado evitar que se golpeara tan fuerte porque había alcanzado a reaccionar antes de caer. Solo fue un pequeño golpe, pero todavía era doloroso. San lo miró fijamente por un segundo y Yeosang no se atrevió a levantar la mirada, agradecido de que su flequillo fuera lo suficientemente largo y que estuviera llevando cuello alto.-Mh, bien ¿Yunho, puedes traer mi bata? La dejé en mi casillero.-El hombre alto y rubio detrás de San, a quien Yeosang apenas había notado, asintió medio frunciendo sus cejas decidido y apretando la bolsa de lona que abrazaba antes de darse vuelta e irse a quién sabe dónde.
Wooyoung jadeo, mirando a San ponerse de pie y al mismo tiempo, ayudando a Yeosang a hacerlo.-No es necesario que lo lleves, puedo hacerlo yo.-Dice, observando como el nadador hace que Yeosang coloque un brazo en su cuello pecoso y mojado para ayudarlo a apoyarse. La espalda de Yeosang se arquea, sintiendo la mano de San en su cintura, obligándolo a presionar su cuerpo contra el de él.-Ya es suficiente con que ayudarás. De verdad.-Insiste, pero San sigue con lo suyo.
-Está bien. De todas maneras, iba hacia allá, mi brazo se siente un poco adolorido, debí lastimarme mientras nadaba.-Explica, sonriendo hacía Yeosang y el menor se ruboriza, solo pensando en que los ojos de San se vuelven dos lunas crecientes cuando sonríe. Ugh. Él se queja y eso hace que San se disculpe, creyendo que ha lastimado a Yeosang, y eso hace que el pelinegro jadee, porque su preocupación es malditamente linda. No puede entender lo que le invade el cuerpo cuando San lo mira con ojos grandes y llenos de preocupación, con un puchero en su boca y diciendo que lo lamenta con los ojos.
Él sigue disculpándose en todo el camino a la enfermería, su voz haciendo eco en el pasillo solitario, solo acompañados con el sonido de sus pasos y las sandalias mojadas de San haciendo un sonido burbujeante cuando camina, después de que se han quedado en silencio.
-No era necesario que me trajeras aquí.-Dice Yeosang, una vez que ha sido revisado y solo le han dado algo para el dolor y unas curitas porque en realidad no fue la gran cosa. Él estaba bien e intento decirle a todos que solo quería irse a casa y acostarse en la cama hasta volverse uno con ella y dejar que la vergüenza lo consumiera.-Umh, pero gracias.-Evita la mirada de San, su mano apretando la sábana blanca de la cama donde se encuentra sentado, agradecido de que sea cómoda porque el trasero todavía le duele y sería un poco vergonzoso estarse quejando de que no puede sentarse frente a el nadador.
ESTÁS LEYENDO
Time Of Love; sansang
FanfictionDespués de tropezar y hacer el ridículo durante la competencia de natación, Yeosang comprende porqué Choi San es tan popular. Es atractivo, desde su cabello rosado hasta la forma elegante de sus pies. Cautivando a todos con la manera tan elegante qu...