Capítulo 9

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 ***Narra Jan***

Llegué a mi casa, saludé a mis padres y me fui directo a mi habitación, sin dar explicaciones a nadie, me encerré, me estiré en la cama, y me quede pensando en todo, en como la conocí, en como nos hicimos los mejores amigos del mundo, en como nos reíamos...son o eran tantas cosas las que hacíamos juntos. Me levanté y me agaché debajo de mi cama, ahí, había una caja, la caja de los recuerdos, de nuestros recuerdos. La saqué y la subí a mi cama, lo tiré todo, por encima, había cartas, notas, fotos, nuestro patito de peluche...

Cogí nuestra primera foto, fue cuando aun éramos solo amigos, estábamos en el instituto, en la hora del patio. Seguía mirando las fotos una tras otra y no os puedo negar que solo tenía ganas de llorar. Cuando acabé con las fotos, empecé con las cartas y las notitas que nos pasábamos en clase. Y finalmente, acabé con patito entre las manos.

Patito era nuestro peluche preferido, lo ganamos en la feria, juntos, codo con codo, entonces desde ese día patito selló nuestra  amistad. Lo guardó todo, pero esta vez lo guardaré dentro del armario en la parte superior, así de esa forma no cogerán tanto polvo. Una vez guardada, la caja, me pongo el pijama y miro la hora del móvil la una y cuarto de la mañana, me meto en la cama y me pongo a dormir. 

Voy dando vueltas en la cama intentando pillar el sueño pero no puedo no hay manera, me quedo mirando al techo, me gustaría que supiera todo lo que siento, pero no puedo soy demasiado cobarde,  vuelvo a mirar la hora las dos y media de la madrugada, abro el cajón de la mesilla y cojo los auriculares, me los pongo y empiezo a escuchar música, cierro lo ojos y me concentro en la canción. Voy a parar la música, la paro, pero después entró en whatsapp. Voy al chat de Emily, ultima vez hace cinco minutos. Vuelvo a poner la música y voy escribiendo.

“Emily solo quiero decirte, que te quiero, si te lo he dicho muchas veces pero este es diferente, no te quiero como mi mejor amiga, te quiero como algo más. Desde hace un tiempo, me empezaste a gustar, me encantas, tú te encontrabas mil y un defectos, pero yo simplemente te veía hermosa, con  tus ojos castaños, tu pelo rubio largo y liso, tus gafas de color negro, y sobretodo tu sonrisa, me encanta. Se que ahora no tengo ningún derecho a decirte esto, pero como dice el dicho uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, y yo ya te perdí. Emily solo quiero que seas feliz, con Carlos o con quien sea, pero mientras lo seas yo y patito lo seremos. Se que ahora esto te duele, el sentirte impotente, el no poder hacer nada, pero yo también me siento así, que solo tengo ganas de llorar, por haberte perdido. Gracias por todos esos momentos que hemos vivido los dos juntos, siempre los recordaré, ya sabes que me tienes aquí para lo que sea, y que la chica que me gusta eres TÚ, si tú, la que pone cara de sorprendida, bueno, yo y patito, nos vamos a dormir, espero que estés bien, con ese.

Por cierto una ultima cosa, si pasa cualquier cosa, llamame o me envías un mensaje, por favor, no quiero que te sientas sola en ningún momento, ni que te hagas daño, por favor, y recuerda que la cueva es nuestro secreto, no se lo enseñes a Carlos. Te quiero Emily.”

***Narra Emily***

 Me quedé mirando el mensaje de Jan, ¿le gustaba? No podía creer lo que Jan me acababa de escribir, volví a mirar el mensaje, una y otra vez, no sabía que responderle, yo ahora estaba con Carlos y Jan es mi mejor amigo, ¿qué se suponía que tenia que decirle? Dejé el móvil sobre la mesita de noche, y me levanté de la cama, un baño haría que me olvidara de Jan y de Carlos un rato. Voy a la ducha es lo único que me ayudara a conciliar el sueño, me denudo y me meto en la ducha, el agua caliente cae sobre mi piel. ¿Por qué Jan no me lo dijo antes? Que él me quería como mas que un amigo, ¿por qué cuando esta Carlos me siento tan bien? ¿Y ahora que pasara entre Jan y yo?.

Salí del baño ya vestida con el pijama, volví a coger el móvil, 5 mensajes de Jan, no quería contestarle, no sabía que decirle y posiblemente evitaría el tema, suspiré y me acosté en mi cama, cogí el ordenadro y abro un word nuevo para escribir, eso me ayudará a desahogarme.

" Imagina que pierdes las gafas en mitad de una multitud, que ves a todo el mundo cantar una canción que tú no conoces, que se te borran todos los mensajes poco a poco, y al azar, que te dejan en mitad de Madrid y le cambian el sentido a todas las lineas de metro, que tus canciones favoritas empiezan a sonarte desconocidas, que te leen tus poemas, y no entiendes de quién hablan, que te sueltan en mitad de otra vida con los ojos vendados y un mapa de mentiras, que tus amigos, de repente, no saben ni oírte ni entenderte, que un día despiertas, y se te han desordenado todas las fotos, que miras al espejo, y no reconoces lo que ves.  Me siento, perdía, muy perdida."


No le podía dejar así, miro los cinco mensajes que tenía:

“Se que no tengo ningún derecho a decirte esto, pero es que no me lo podía callar mas”

“No sé si estarás despierta o no, pero me gustaría, que respondieras, a algo”

“Emily, por favor, dime algo, mi en linea espera un escribiendo tuyo”

“Te preguntaras por qué no te lo dije antes, pues no te lo dije antes por tu rechazo, simplemente tenía miedo a tu respuesta”

 “Bueno no te quiero molestar mas, espero que tengas dulces sueños, buenas noches”

No le podía dejar así, en visto, hacia dos minutos que se desconecto a lo mejor lo lee antes.

“Jan, esto, todo, es muy nuevo para a mi, yo en verdad te quiero,  para a mi has servido de gran apoyo y aun lo sigues haciendo, pero todo esto me ha pillado desprevenida, de la noche a la mañana tengo novio y mi mejor amigo me dice que me quiere, a sido un shock, todo. En relación a no hacerme daño y no decirle nuestro secreto lo acepto, yo te prometo que no seguiré haciéndome daño....pero....antes de conocerte lo hacia constantemente, sé que no te lo conté nunca, miedo a tu reacción, y ahora eres el único que lo sabe.

Cuando me dijiste que te gustaba una chica sentí miedo, miedo a perderte a que no pudiéramos estar juntos, miedo a que me dejaras de lado, miedo a volver a estar sola. Gracias a ti por aguantarme tanto y cuidarme y hacerme sonreír, te quiero Jan y si te pasara algo alguna vez me volvería loca. Buenas noches Jan.”

Tras leerlo, envie el mensaje, y me fui a dormir, ¿por qué todo tiene que ser tan difícil?.

 

Una vida solitariaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora