Epílogo.

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Miro por la ventana del pequeño establecimiento, mientras doy un sorbo a mi chocolate caliente.

El invierno ha llegado, y con él la densa y blanca nieve.

Navidad siempre fue una de mis épocas favoritas del año. Sin embargo, ahora no puedo evitar sentirla una fecha bastante nostálgica.

Mis últimas navidades no fueron para nada agradables. Y ahora, tengo esta sensación de que en cualquier momento, él aparecerá y yo volveré a tener miedo y a sentirme enjaulada.

Mi psicóloga dice que es algo normal, que he sufrido mucho abuso, y eso me ha dejado un trauma fuerte.

Mis padres querían que viajara a casa para las fechas, y pasarlo juntos. Pero yo preferí no ir. Necesito tomarme un tiempo en soledad, y recuperar mi estabilidad.

Tal vez no seré nuevamente aquella chica llena de luz que una vez fui. Pero tampoco es necesario serlo. Lo que debo hacer es recuperar mi vitalidad. Y es un proceso que quiero hacer sola, redescubrirme y reinventarme.

Sé que ahora me siento en un limbo de emociones, que en realidad, no sé exactamente qué siento. Pero también sé, que con esfuerzo, lograré dejar todo lo malo atrás.

Sé que puedo, tengo fe en mí. Y sobre todas las cosas, quiero ser feliz. Merezco ser feliz.

Doy otro sorbo a mi bebida, mientras veo una pareja caminar sonrientes tomados de la mano.

El amor es algo tan complejo, es inexplicable. No hay un término que defina o englobe todo lo que significa el amor.

Existen tantas maneras de amar, buenas y malas, sanas y enfermizas. Sinceras y forzadas.

Considero que no hay una manera predeterminada de amar, tampoco una que sea igual a otra. Cada quien ama a su manera. Pero, si creo que hay formas correctas de amar.

Cuando amas a alguien quieres que esa persona sea feliz, sin importar qué, sólo quieres verla sonreír, porque, aunque no sabes la razón, cuando esa persona sonríe, tu mundo se ilumina y sientes felicidad.

Amar es, ser feliz, si quien amas es feliz, sin importar si esa felicidad se la proporcionas tú, algo, o alguien más.

Si de verdad amas a alguien, quieres su bienestar, no quieres que nada le lastime, que nada le pase, porque, no concibes un mundo donde esa persona no exista. Así no esté a tu lado, el hecho de saber que respira y está bien, es suficiente para estar tranquilo.

Cuando tu amor es puro y sincero, eres incapaz de lastimar a esa persona, de manera intencional. Porque cuando quien amas sufre, una parte de ti, sufre también.

Considero que la manera correcta de amar es de forma pura, honesta, respetuosa. Una relación sólo puede funcionar si los integrantes de ésta se aman de manera sincera, se valoran, y son su mejor versión de si mismos con la persona que aman.

Los celos son normales. Pero cuando estos rozan lo enfermizo y son infundados, hacen daño. Lo primordial siempre será confiar en tu pareja. Y comunicarle si alguna acción de su parte te causa inseguridades.

Cuando amas, no lastimas. No hay excusa existente que sea válida para agredir psicológica, física u emocionalmente a una persona que "amas".

Tu amor no es puro, ni sano, si quieres controlar la vida de la otra persona, si haces que su mundo gire entorno a ti. Si no respetas que también es un ser individual, tiene sueños, metas, aspiraciones, deseos. Y merece crecer como persona. No la límites.

Si de verdad amas, jamás serás una jaula impidiendole alzar el vuelo. Si amas a alguien, serás su nido, su hogar. Ese al que, sin importar lo lejos que vuele, siempre volverá, porque es lugar que ama.

Siento mis ojos humedecer, y lucho contra las rebeldes lágrimas que quieren escapar.

Creí que tendría un amor así. Un amor como en los libros. Un amor cristalino, duradero.

Creí que él era el amor de mi vida.

Pero entendí. Entendí que el primer amor no es el último. Que no debemos aferrarnos a un cactus y fingir que sus espinas no nos lastiman. Que debemos amar de la manera correcta, y ser amados de la misma forma.

A veces, el amor se siente con tanta fuerza, que se es incapaz de ver defectos en el otro, o en su manera de amar.

Pero nunca es tarde para abrir los ojos, y ver la realidad.

Mi vida continúa, el mundo sigue su curso.

Debo amarme primero a mí. Es lo que más necesito.

Esta fue solo una parte de la historia.

Hay más páginas en blanco que escribir.

My First LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora