Perdida en Seúl

14: Cereal

Al llegar al centro comercial...

— Nam Hyung

— ¿Si?

— Exactamente... ¿A qué vinimos?

— Tengo que hacer las compras de la semana.

— ¿Dónde está la lista? Me imagino que el hermoso Señor Seokjin le hizo una lista, ya que él es quien casi siempre se encarga de cocinar. — dijo y luego soltó una leve risa.

— Sí, aquí está. — dijo sacando un pequeño papel del bolsillo de su abrigo.

— Otra cosa, ¿Por qué está tan cubierto, con esa mascarilla, esos lentes y ese gigante abrigo? — preguntó con mucha curiosidad. — Ahora que lo pienso siempre que salgo con alguno de ustedes siempre están muy cubiertos.

— Es porque está haciendo mucho frío, y a nosotros nos da más frío de lo normal. — dijo rascando su nuca.

— Aaah, eso tiene mucho sentido. — dijo con expresión de ya entiendo.

— Vamos, por aquí.

Namjoon estaba planeando comprar materiales para dibujar para Olivia, como le había dicho Yoongi, con la excusa de un regalo de bienvenida.

Entraron al super. Olivia empujaba el carrito mientras Namjoon buscaba lo de la lista.

— Oh, no sabía que al Señor Jungkook le gustara la leche de plátano.

— Corrección, le fascina. Cuando a alguno de nosotros se nos olvida comprarla se molesta muchísimo. — Olivia asintió y los dos rieron.

— Nam Hyung

— ¿Si?

— ¿Me podría decir qué cosas le gustan a Jimin? — dijo con una gran sonrisa.

— Claro. — suspiro. — A Minnie le encantan las fresas y los kiwis, ama bailar, cantar y escuchar música. Le gustan los bocadillos nocturnos y también los abrazos. Si quieres más información deberías preguntarle a Tae, él es su mejor amigo. — finalizó con una sonrisa.

— Lo haré. — dijo devolviéndole la sonrisa.

— Al parecer te has hecho muy cercana a Jimin. — dijo serio.

— Sí, se podría decir que nos hemos hecho cercanos. Somos... amigos. — Cuando dijo la última palabra Namjoon sacó el aire, que ni siquiera sabía, estaba conteniendo.

— Oh, me alegro. — dijo con una sonrisa forzada.

— Para ser sinceros, ¿A quién en su sano juicio no le agradaría una persona tan tierna y amable como Jimin? — dijo divertida.

— Sí, tienes razón. — dijo en un susurro mientras acomodaba las cosas en el carrito.

Olivia estaba tratando de alcanzar una caja de cereal para enseñársela a Namjoon. Seguía intentándolo varias veces, pero no lo conseguía; hasta que pudo sentir una presencia bastante cercana, acompañada de una fragancia a canela, una que conocía de memoria. Vio como una mano, grande y masculina, se estiró alcanzando el objeto de su interés para luego ser depositado en sus manos con sumo cuidado. Ella se dio la vuelta, su vista se topó con un pecho grande y fornido. Levantó su rostro y ahí estaba esa sonrisa con hoyuelos; esa que tantas alegrías le había brindado. Después se detuvo a ver esos ojos tan sabios pero tiernos al mismo tiempo; esos que la hacían sentir en casa. Él se fue acercando poco a poco hasta que sus respiraciones chocaron, estaba más que decidido a besarla; sus corazones latían a mil, pero... en el último momento se acobardó y se lo dio en la mejilla. Ella sonrió.

— Este es el cereal favorito de mi mejor amiga. — dijo ella enseñándole la caja de Froot Loops.

— Ámbar. Me dijiste que era fan de BTS, ¿no?