Capítulo 5

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El gran día había llegado, Inyeop recibiría su título finalmente. Todos estaban en sus habitaciones arreglándose Inyeop ya estaba por terminar de arreglarse, debía lucir esplendido hoy.

La tía esperaba a ambos jóvenes en la sala; primero salió Mac vistiendo un lindo vestido de tela a cuadros, llevaba sus ojos maquillados y su boca con un hermoso brillo-color. Su larga cabellera la tenía suelta con un pequeño recogido, incluso sus mechones rosados habían sido retocados. Inyeop salió de su habitación tratando de hacerle un nudo a su corbata. Mackenzie se sorprendió al ver que bien le quedaba el uniforme, miraba para otros lados tratando de quitar la concentración sobre Inyeop.

— ¡Ay luces tan guapo! –soltó su tía orgullosa.

Inyeop sonrió ante el comentario de su tía y se acercó para que ella le atara la corbata. Ella la tomó para hacerle el nudo, pero el teléfono de la casa comenzó a sonar.

—Por favor, hazlo tú mientras atiendo.

Le cedió la tarea a Mac quien se encontraba admirada por la belleza de Inyeop en este momento, su rasgos tan marcados y le encantaba la terminación alargada de su mirada.

—Deja de mirarme, me vas a desgastar. –comentó Inyeop.

Mac le dio un pellizco y éste chilló. Ella rió con el grito aniñado de Inyeop.

—Te queda bien ese vestido. –soltó de repente Inyeop.

Mackenzie se quedó a mitad del nudo al escucharle, sus palabras la desconcentraron. Sacudió la cabeza levemente y continuó, él sonrió tímidamente al notar los efectos en la chica.

...

Al llegar al instituto, las miradas se fijaban en la llegada de Inyeop. Algunas chicas se acercaban para entregarle algunos presentes, conjunto a su declaración de amor dentro de algunas cartas.

Su tía se sorprendió al ver lo popular que era, todos lo buscaban. En eso se acercó Soojin.

— ¡Oppa! Que guapo estás hoy.

—Gracias... ¿Los chicos llegaron?

—Sí, están por venir.

Soojin se acercó a Inyeop y tomó su mano, todos pensaban que ellos estaban juntos pero no era así, Inyeop no sentía nada por ella, pero no se podía decir lo mismo de Soojin. La tía al ver la escena se molestó, entonces aventó a Mackenzie sobre Inyeop. Este soltó el agarré de la chica para atajarla.

Mackenzie se sorprendió de la actitud de la tía. Pero seguía aferrada a los brazos de Inyeop como pesuña de gato a la tela.

— ¿Estás bien? –preguntó viéndola con preocupación.

Ella asintió y se separó de él lentamente.

La mirada despectiva de Soojin de inmediato cayó sobre Mackenzie. Volvió a tomar a Inyeop de la mano y lo llevó adentro.

Mackenzie miró a la tía y ella entendió su mirada y contestó su duda:

—No soporto a esa chica. Ojalá Inyeop tuviera mejores gustos.

—Ciertamente ella es muy extrovertida y le gusta demostrar lo que siente. Pero no se ve mala persona.

—Ay, mi querida Minso, eres tan inocente. Ojalá consigas a un buen chico que te valore. Pero, esa chica que ves con buenos ojos, no destila nada de pureza.

Ella sonrió ante los buenos deseos de la tía Hwang. Y tomó en cuenta su comentario acerca de Soojin.

Entraron al auditorio, pero la tía se quedó en la entrada esperando a Injeon que venía en camino. Mackenzie se sentó en los puestos designados para la familia Hwang y observó a Inyeop sentarse más adelante con su grupo de amigos. Se le veía muy emocionado y feliz. Ella sonrió al ver al odioso ese culminar una etapa en su vida.

Desvió su mirada y vio su bolso, le había escrito una carta a Inyeop pero dudaba en dársela. Ya estaba por comenzar la entrega de los diplomas, la tía Hwang se sentó al lado de Mackenzie y junto a ella otra figura que Mac no pudo detallar, ya que habían cerrado las luces del auditorio.

Todos los espectadores se concentraron en los jóvenes que egresaban de la institución y aplaudían eufóricos cuando su representado era el que recibía el título. La ceremonia se concretó al cabo de dos horas.

Mackenzie salió un poco antes de finalizar, porque debía ir al baño. Al salir del baño, chocó con Inyeop en el pasillo. Ambos rieron y se alejaron con un leve rubor. Inyeop rascó su nuca para evitar pensar en su cercanía.

—Venía a buscarte. Estamos listos para irnos.

Ella asintió y ambos caminaron juntos hasta la entrada, conversaron un poco en el trayecto y ella presionaba su bolso deseando tener el valor para entregar la carta. No decía nada comprometedor, pero ya le había visto guardar varias cartas sin mostrarles el mínimo interés.

Ambos rieron por algo entretenido que estaba contando Inyeop, una anécdota que ocurrió en el baño de chicos con su mejor amigo Jihoo. En ese momento los amigos de Inyeop llegaron junto a él, rodeándolos.

Mackenzie los vio con ojos alegres a todos y brindando una linda sonrisa.

—Oye Inyeop, no es justo que siempre te quedes con las más hermosas. ¿Qué hay de nosotros? –comentó Minho.

— ¡Dejen de samurear!

Mackenzie rió.

— ¿Al menos puedes decirnos el nombre de tu acompañante?

— ¿Quién más va a ser si no soy yo, Jihoo? –cuestionó Soojin.

—Estoy cansado de verte la cara Soojin, esfúmate. –dijo Jihoo. –Además no todo se trata de ti, nos interesa la amiga de Inyeop.

— ¡Ya! Dejen de babearse. –reprendió Inyeop habían aparecido los celos.

— ¿Acaso es tu novia y no nos habías dicho nada? –dijo Somin

Mac soltó una risilla nerviosa algo estruendosa. Todos la miraron.

— ¿Dije algo gracioso?... Ah ya veo, Inyeop se ríe de la estúpida idea que sería ser tu novia.

Dedujo rápidamente el chico. Inyeop le golpeó y todos seguían riendo porque Inyeop había sido rechazado.

Siguieron caminando, esta vez Soojin y Mac iban detrás del grupo de chicos.

—Entonces, ¿eres amiga de Inyeop?...

La pelinegra aprovechaba el momento alejado del grupo.

—Algo así... Vivimos en la misma casa.

La pelinegra apretó sus puños al saber las razones de su cercanía con el chico que amaba. Pero respiró hondo antes de depositar su veneno.

—Seguro no debes de significar nada para él, porque seguramente te hubiera mencionado con nosotros. Y nadie sabe quién eres. –comentó serenamente inyectando su envidia.

—Creo que puedo decir lo mismo... Pero tu caso debe ser peor, digo, que tu novio no te mencione con su familia significa que lo suyo no tiene principio ni fin. –contestó inmediatamente. –Me debo ir con Inyeop, pero que bien que me dices que eres su novia porque si es por él, nunca me hubiera enterado. ¡Nos vemos luego! –finalizó de manera empática.

Se alejó de Soojin y dio razón a las palabras que la tía compartió por la mañana.

Inyeop estaba junto a su familia y su grupo de amigos. Ella se acercó ignorando una figura, el hermano mayor de Inyeop, Injeon. Entonces la tía llamó la atención de Mac para presentarlos. Ella volteó y al verlo no podía creerlo.

— Vaya, veo que los deseos se cumplen. Nos volvemos a ver. –dijo sonriente el chico.








Hasta aquí vengo a complacerlos y espero estén ansiosos hasta la próxima entrega.  

Cuídense mucho!

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The Picture (Hwang In-Yeop)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora