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Los días había ido pasando si que yo a penas me diera cuenta; de alguna u otra manera, había estado llevándome las almas de bastantes más personas de las que me esperaba, pero nunca alejándome demasiado de JeonGguk, era algo bastante extraño y, por un lado, me pregunté si alguno de los creadores me estaba ayudando en secreto.

Aunque tampoco podía ir y preguntarles pues descubrirían entonces que no sólo mantenía mis recuerdos, sino que además estaba cuidando de manera indiscriminada a aquel que fue castigado por cuidarme y protegerme.

Suspiré, las cosas eran demasiado complicadas. A lo largo de aquellos días numerosos recuerdos junto a él habían regresado, ésta vez sin ser borrosos, y a diferencia del pasado, él no podía verme.

Había descubierto que sí podía sentir mi tacto y, a veces, cuando estaba muy cerca de él, mi presencia. Comprobé también que no era capaz de escuchar mi voz, pero, siempre que estuviera junto a él, podía interactuar levemente con el ambiente. Moviendo cosas o escribiendo en sus cuadernos.

—Kook, estás muy raro últimamente.—un chico que había visto un par de veces hablando con JeonGguk se acercó a él, con el rostro inexpresivo.— Todos sabemos que Hyun murió en tus brazos, pero... pareces más paranoico que triste.— fruncí el ceño, estaba claro que ese chico no me gustaba demasiado.

—Déjame en paz, Hyol.— suspiré nuevamente. Recordaba todo lo que aquel chico de mirada penetrante había hecho por mí cuando los roles estaban invertidos y, aunque me habría encantado poder hacer lo mismo, tenía claro que, tal vez, aquella era la última oportunidad que tenía para poder ser feliz junto a él.

Era por ello que no debía cometer ciertos errores. Aunque el principal error que cometió JeonGguk, era el mismo que estaba repitiendo yo misma. Pero era necesario, necesitaba contarle, de alguna forma, todo lo que había pasado, sobre su vida anterior, sobre la anterior a esa. Necesitaba hablar con él de una u otra forma.

—Tu verás Kook, sólo intentaba ser amable.— aquel chico sonaba más jocoso que serio, seguramente estaba intentando meterse con Gguk.

—No me interesa tu amabilidad, tenemos un examen así que podrías ponerte a estudiar en vez de dar por culo.— una pequeña carcajada se me escapó, no recordaba haber escuchado a Jeon soltar una expresión como aquella nunca antes.

Aunque su seriedad no desapareció en ningún momento. Él realmente estaba intentando concentrarse en el examen que tenían.

Para se sinceros, me gustaría poder haber hecho algo para ayudarle, ay no sólo con el examen, sino con aquel chico que comenzaba a molestarle.

El regreso de la Muerte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora