capítulo 11

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Descendencia de reyes

--Esta es la carta de notificación Nana Rous-- se la entrego dando dos pasos al frente

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--Esta es la carta de notificación Nana Rous-- se la entrego dando dos pasos al frente.

No creo que se crea el cuento, pero ella jamás se ha interpuesto en algo de la escuela.

--¿Pero como así? Mi Monse iba bien en la escuela, no puedo creer que esto esté pasando--

No tuve otra opción, no puedo abandonarlo y si tengo que mentirle a Nana Rous por mi libertad entonces lo haré.

--Sí Monse no toma clases, es mas que probable que pierda el curso-- le dice Dimitri dándole mi supuesta boleta de calificaciones.

Obviamente es falsa pero un trato es un trato.
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1 semana antes.

--Esta bien, pero con la condición de que pueda regresar a mi mundo cada fin de semana-- Suelto pensando que Nana Rous debe saber que estoy bien.

--¿Y que hay de ti?-- escucho que habla Surinam y esta vez no me está viendo a mi.

Al girarme me doy cuenta que se trata de Alonso, el ha escuchado la conversación.

--Ella es mi novia, no puedo abandonarla, princesa Surinam le ruego que me deje pelear con ustedes-- suelta Alonso haciendo una reverencia para ella.

--¡No!-- exclamo de repente teniendo la mirada de todos los presentes.

--¿No?-- pregunta Alonso no entendiendo por que acabo de negarme.

--No es tu obligación protegerme, no quiero que pelees, no te obligaría a que hicieras tal cosa por mi-- le digo mirándolo sintiendo como mis lágrimas caen por mis mejillas.

Es una pelea, en cualquiera siempre uno sale herido o muerto, el problema aquí es que Alonso es demasiado importante para mí como para perderlo.

--No es por obligación, quiero hacerlo, te prometí que te protegería y por ti quiero hacerlo, por un futuro juntos ¿recuerdas?-- me dice acercándose a mi para secar mis lágrimas.

--Esta bien, si esa es tu elección entonces de igual manera te inscribiremos a la escuela de hechicería en defensa y cursaras con ella-- suelta Surinam mirándolo.

--Gracias-- le responde Alonso agradeciéndole a la princesa.

--Entonces es un trato, Monserrat-- finaliza mirando a Agus.

--Ella no puede defenderse sólo con una espada, ellos siempre nos han superado en número y una espada no nos ayuda en mucho por mas bueno que sea el atacante-- suelta Agus mirándome llevándose las manos hacia atrás.

--¿Que sugieres Agustín?-- la princesa se da cuenta que el no me quita la mirada de encima así que al instante dejo de mirarlo. 

--Si me lo permite princesa me gustaría sugerirle prestarme el brazalete de los reyes-- suelta Agus girándose a mirarla.

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