𝐕𝐚𝐦𝐩𝐢𝐫𝐞 /𝐄𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚𝐜𝐨

21

—Así que nuestro querido Joaquín si murió, y a reencarnado. —murmuro Damon mirando el coche que estaba llegando—

—Parece ser que si, se ve exactamente igual que la última vez —murmuro Stefan mirando maravillado a Joaquín—

—¿De que estarán hablando, por qué se acercan tanto? —pregunto Damon mirando algo molesto la escena—

Stefan volteo a ver dónde su hermano observaba, llevándose la sorpresa de que Emilio y Joaquín se estaban besando. Damon miraba molesto la escena, quería acercarse, tirar la puerta del auto, sacar a Joaquín y llevárselo lejos. Stefan quería hacer lo mismo, incluso golpear a Emilio, sin embargo sabía que eso no estaba correcto, así que tomo el brazo de su hermano negando.

—Lo está besando Stefan, no podemos permitir que está vez también no los quite —dijo Damon—

—Y si no nos lo quita, nosotros dos vamos a pelear por el, solo uno de los tres podrá estar con él, y hasta en este momento Emilio va sumando puntos —dijo Stefan mirando a su hermano—

—Prefiero que este contigo que con él, obviamente el estará conmigo, pero si no. Te prefiero a ti, Emilio tuvo su oportunidad ya. —Damon miraba aún la escena de Emilio y Joaquín con enojo—

—Emilio...—murmuro Joaquín al separar del primer mencionado—

—Por favor no me digas que es un error...—suplico el rizado—

—Claro que no lo es, solo que... ¿Que pasa con tu compañero? —pregunto al recordar que Emilio no sabía que el tenía conocimiento de su anterior vida—

—Joaco, t...—fue interrumpido por unos toques en la ventana—

Emilio miro la ventana con molestia, pero la expresión de su cara cambio por completo cuando vio a los dos Salvatore.

—Hey, ellos son tus primos, ¿No? —pregunto Joaco mirandolos—

—Primos lejanos...—murmuro molesto—

—Pero son tus primos, vamos a saludarlos. —Joaquin abrió la puerta del coche—

Emilio intento detener a Joaquín, pero fue demasiado tarde, ya que el castaño ya estaba afuera mirando a los hermanos con curiosidad. Así que con rapidez salió del coche y se colocó a su lado.

—Un gusto conocerlos, soy Joaquín, Joaquín Bondoni. —se presento el chico con una sonrisa—

—Damon y Stefan Salvatore, ya nos habíamos presentado —dijo el rubio mirando al chico con una sonrisa—

—Oh es verdad. ¿A qué debemos su visita? —pregunto el castaño—

—Solo veníamos a visitar a nuestro querido primo. Y al verlos aquí estacionados aprovechamos para saludar. —contesto Damon—

—Oh ya veo, en fin, me alegra verlos de nuevo, aquella vez no pude quedarme más tiempo con ustedes. —se disculpo el chico—

—No te preocupes por aquello, entendemos las circunstancias —dijo el rubio—

—¿No gustan un café o algo que tomar? —pregunto el castaño después de un pequeño silencio—

—Nos encantaria, sin embargo no tenemos acceso a la mansión de nuestro primo. —dijo Damon mirando de manera divertida a Emilio—

—Tendremos razones para no darles acceso. Joaco, es mejor que entremos a la mansión, Stefan y Damon tienen demasiadas cosas que hacer. —dijo ahora Emilio—