No me dejes

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Punto de vista de Diane

Sentía que el tiempo había pasado en un abrir y cerrar de ojos, ya Harlequin y yo teníamos un año de relación, no se cómo era posible que día con día me enamorará más.
El bar en este tiempo se había hecho más y más conocido hasta el punto que siempre había gente durante toda la noche, pero sobre todo era muy conocidos los "Lady's night", malditos días como los odiaba y amaba a la vez, amaba ver con ese uniforme a Harlequin pero odiaba que otras lo mirarán e intentar sobrepasarse con él.

Actualmente nos encontrábamos en su casa, mirábamos una película simplemente, yo estaba sentada en el sofá, mientras que él estaba recostado en mi regazo mientras yo acariciaba su cabello delicadamente, estábamos en un momento completo de paz, no había trabajo, no había ningún plan, o mejor dicho solo había un plan, él y yo toda la tarde a solas.
La paz reinaba entre nosotros cuando de pronto Harlequin me miró a los ojos, pero estos se notaban fríos hacia mi, se sentó en el sofá para luego mirarme.

-Diane, tenemos que terminar- dijo esas palabras sin vacilar, sentí mi corazón comprimirse.

-¿De qué hablas Harlequin?- tenía un nudo en la garganta, ¿Porqué había dicho esto cuando todo parecía ir bien?.

-No te hagas la idiota, sabes de qué hablo...- claramente yo sabía de qué hablaba pero no quería aceptarlo.

-¿Estás bromeando cierto? ¿Es día de los inocentes verdad? Claro, debe ser eso, o no se porque dices eso Harlequin- intentaba reír pero no podía, me estaba siento mal por esto que pasaba.

-¿Piensas que esto es una broma Diane?- me miró de una manera tan molesta que hasta sentí un escalofrío en el cuerpo -Terminemos de una vez Diane, estoy cansado de tu actitud tan celosa y posesiva, no me dejas hacer varias cosas que me gustan, a veces también necesito un poco de espacio ¿Sabes? Por esto y más quiero terminar contigo...-.

-Pe... Pero... Harlequin...- no podía más y rompí en llanto.

Sentía mi corazón hacerse pedazos con sus palabras que salian como cuchillos que apuñalan mi corazón.

-Además, estoy viendo a alguien más, la conocí en un "Lady's night" hace 3 meses...- esto último ya no fue un cuchillo, fue directamente un disparo de alto calibre.




























-¡DESPIERTA DIANE!- en un abrir y cerrar de ojos ahora volvía a tener a Harlequin a un lado mío pero con una mirada preocupada y con pequeñas lágrimas en los ojos -Gracias a Dios que despertaste Diane- y como si nada hubiera pasado me abrazó fuertemente mientras escondía su rostro en mi hombro.

Correspondí a su abrazo aunque con dudas dentro de mi, ¿Porqué de acaba de terminar conmigo ahora hace esto? Estaba tan confundida.

-¿Qué sucedió Harlequin?- pregunté mientras se formaba un pequeño nudo en la garganta.

-Eso quiero preguntar yo, ¿Dormiste mal? ¿Te duele algo? ¿Te sientes bien? ¿Porqué estabas tan mal mientras dormías?- ahora no había duda, este es el Harlequin de siempre.

Aún en el abrazo ahora fui yo quién apretó este más mientras comenzaba a sollozar en su hombro sin parar, aún no podía dejar de lado lo que había visto. Era obvio lo que me pasó, estaba soñando horriblemente para mí, ya había sucedido esto en bastantes ocasiones y en todas terminaba enojada con Harlequin, el claramente no sabía porque pero aún así me contentaba... Odiaba eso de mi, hacia que el se sintiera mal de algo producto de mi imaginación y el tenía que pedir disculpas por algo que no hizo. Por ello prometí no ser tan celosa, o al menos no demostrárselo, y evitar enojarme con el por culpa de mi mente.

Pero en esta ocasión era distinta, no era enojo lo que sentía, si no una tristeza tan inmensa que me impedía dejar de soltar lágrimas, los sentimientos que me invadieron en ese sueño fueron tan fuertes que me afectaron en la realidad, no quería soltar a Harlequin, al contrario, aunque suene bastante mal de mi parte quería estar con el de ser posible siempre y sin despegarme, pero era imposible y sumamente molesto seguramente para él.

-No es nada... Solo abrázame y... Prométeme que nunca me dejaras- no podía despegarme ni un centímetro de la posición en la que me encontraba.

-Nunca me alejaré de ti princesa, que no se te olvide ¿Si?- yo asentí aún con mi rostro en su hombro -¿Necesitas algo? ¿Un poco de agua para calmarte?-.

-No, quiero estar así solo un poco más-.

-Quédate así todo el tiempo que quieras, solo quiero que estés mejor y feliz- mientras el correspondía a mi abrazo sentí como acariciaba mi cabeza.

A veces siento que estos sueños son tan reales que duelen y también siento que... Podrían hacerse realidad, aunque no quiero eso. Supongo que nadie querría eso.

Ahora solo quiero estar con él, y de ser posible estarlo por toda mi vida.

-te amo...- me susurró por último mientras me seguía acariciando la cabeza.

Continuará...













Buen día, tarde o noche según sea su respectivo horario, se que me van a decir "¿Porqué un capítulo tan corto y sin sentido?" Bueno, tengo que aclarar que si tiene un sentido del porque y eso se descubrira más adelante con forme avance lo poco que queda de está historia.


Con esto dicho espero que hayan disfrutado este corto capítulo pero que dará un inicio a algo más adelante.

Me despido no sin antes recordándoles que:

Si se llegan a sentir bajos de ánimo recuerden esto, son muy especiales, no hay nadie igual a ustedes y eso los hace únicos, algunas personas los querrán ver de bajo ánimo, pero no les den nunca ese gusto, pero NUNCA, mientras que también hay personas que los quieren ver bien, por ello deben estar bien psicológica y físicamente, y cuando sientas que no puedes más siempre tendrás a alguien que te escuchará aunque no lo notes, solo busca a esa persona.



Con esto me despido.

¿Realmente solo somos amigos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora