FAKER | Yeonbin

S E V E N

Yeonjun lo miro esperando algo, se había quedado mirándolo fijamente a mitad del camino.

ㅡ¿Te pasa algo? -él no contestaba.ㅡ Soobin, Soobin, amor, ¿estás bien?, ¿qué pasa?

Él recordaba ese día demasiado bien; aún podía percibir el temor en su vientre mientras estaban en el juego mecánico, Daniel tomando su mano y su perfil derecho... lleno de lunares junto a su oreja.

No era posible que se lo hubiera imaginado.

ㅡEse día... ¿recuerdas? -Yeonjun lo miro confundido, ¿de qué rayos hablaba?ㅡ Nuestra primera cita, en la feria... yo tenía terror de subirme a la montaña rusa y... y tú tenías muchos lunares aquí -tocó su mejilla mientras Yeonjun se apartaba rápidamente, provocando un gesto de parte de él pero no le importó, no le gustaba que lo tocaran.ㅡ Ya no los tienes.

ㅡDijiste que no querías subirte al juego, ¿por qué?

ㅡNo te hagas el desentendido ahora, Daniel. Sabes que odio las alturas, les tengo pánico. -pronunció mientras volvían a caminar.

ㅡ¡Eso es! -gritó mientras la solución tomaba su mente.

Su madre había pensado que Kim sería un niñito tonto y distraído, pero tenía la memoria más asombrosa que había conocido jamás, acordarse de unos lunares era algo impresionante... pero también aterrador.ㅡ

ㅡ¿Qué es qué? -preguntó.

ㅡEstabas tan asustado que de seguro no recuerdas bien, yo no eh tenido lunares nunca en esa parte de mi cara.

ㅡPero...

ㅡSoobin, ¿Qué te está pasando? -lo interrumpió, tratando de usar psicología inversa, haciéndolo sentir culpable.ㅡ Bebé, desde que llegué no has hecho más que cuestionarme. Si te molesta mi peinado, me lo cambiaré, si te incomoda mi altura, caminare de rodillas, ㅡSoobin sonrióㅡ y si quieres que tenga lunares me los pintare, pero me estás haciendo sentir incómodo y culpable.

ㅡPerdóname, es cierto. Tal vez esté un poco loco con todo esto, estuve muy estresado estos meses y lo siento, no quise hacerte sentir mal. Cambiar es algo natural y no te sienta nada mal, cariño.

ㅡGraciasㅡ Yeonjun también sonrió de lado. Por dentro solo pensaba en que tenía muchos motivos por los cuales sentir culpabilidad. Estaba engañando a un chico que no se merecía ser engañado. Estaba actuando como alguien que no era y presentía que no iba a salir bien.

ㅡ¡Quiero hacer un brindis! -gritó Bon Ha mientras los invitados a la fiesta le prestaban atención. ㅡSoobin, Daniel; ustedes se conocieron hace muy poco, ㅡSoobin suspiró, esperando que su mejor amiga no dijera alguna tonteríaㅡ pero cualquier persona que se acerque a ustedes puede percibir su amor en el aire, me alegro mucho que alguien como tú pueda hacer a mi amigo, más bien, a mi hermano, tan feliz. Soobin, eres el hermano que jamás tuve. Daniel, tú ahora te conviertes en mi hermano también, brindo por su felicidad, y por su amor eterno.

ㅡ¡Salud! -gritando todos al unísono.

Yeonjun bebía cada trago tranquilamente, con las palabras de Bon Ha atrancadas en la cabeza: "amor eterno", "se conocieron hace poco". ¿Cómo esas dos frases podían encajar en una misma oración? ¿Qué acaso ahí todos era unos completos ingenuos inútiles? Era obvio que Daniel no amaba a Soobin, era aún más evidente que Yeonjun no lo hacía, ni siquiera lo había mirado durante la fiesta, en cambio, había estado siguiendo con la mirada a una delgada rubia de ojo azul que estaba a unas cuantas mesas portando un ardiente vestido rojo; Soobin era muy hermoso, era verdad que tenía una carita encantadora, pero era muy simple... las pocas palabras que habían cruzado lo habían aburrido hasta la muerte, era un niño bueno y a él no le gustaban los niños buenos.