Shigatsu wa Kimi no Uso Nyuansu [Final Alternativo]

Capítulo 6: ¡Susume!

*Al día siguiente, 8 de la mañana, Casa de Seto-san*

—¡¡Esto es genial Kousei!! —exclamó Seto-san dándome una fuerte palmada por la espalda donde estaba sentado en la banqueta.

—¡¡Bien!! ¡¡bien!! —se decía.

Había reaccionado un poco extrañado al observar el motivo de la carta cuando la encontré en la puerta de la casa. No entendía porque el comité se estaría comunicando conmigo si ya había pasado tiempo de que no tenía ninguna participación en concursos. Incluso, ni siquiera terminé de tocar la pieza el día de la operación de Kaori. Pensé que ahí había terminado todo para mí, pero parecía que el comité tenía otra forma de pensar.

—¡Podrás volver a tocar Kousei! —exclamó Seto-san sonriendo— El comité ha decidido convocarte para una eliminatoria a nivel nacional en piano.

La eliminatoria consistiría en la participación de los tres mejores pianistas de cada sector de Japón. Competirían los pianistas del Norte, el Sur, el Este y el Oeste del país. En el grupo del Este nos encontrábamos Aiza, Igawa-san y yo.

—Es un evento muy importante —dijo Seto-san mientras se sentaba en el sillón— Si logras ganar hay altas probabilidades de que consigas una beca para estudiar piano en el extranjero. La competencia es organizada por una de las más renombradas universidades de música de Inglaterra que también tiene sedes aquí en Japón. Sería un éxito si las obtuvieras. 

—Pero Seto-san, estudiar en el extranjero…

La mano de Seto-san me calló de filo en la cabeza…

—¡Deja de renegar! Ir a otro lugar como pianista sería lo mejor que te podría pasar. Aparte, son oportunidades que no se ven todos los días.

—Aun así, es bastante difícil. La presión por la beca será bastante alta. Hasta el momento he estado en competencias de bajo nivel con pianistas de mi zona.  Nunca he competido contra personas de otros lugares de Japón.

Seto-san se volvió a sentar en el sillón…

—¡Ahh! —suspiró— ¡No tienes remedio! Tranquilo, sabes que eres de los mejores y no tienes que preocuparte. Tu nada más sal y has lo que tengas que hacer Kousei.

«¡Seto-san!», exclamé impresionado…

—¡Ahora sí! —volví a sentir la mano de filo contra mi cabeza— ¿Por qué no has estado practicando piano? ¡¡Fui a tu casa y no me abriste!! ¡¡Quiero verte aflojar esos dedos!! ¡¡¡Kouseeeeei!!! 

. . .

En la tarde mientras regresaba a casa…

—¡¡Ah casi muero!! 

«Seto-san me exigió al máximo. Pareció olvidar que llevaba mucho tiempo sin tocar. Aun así, volví a sentir esa cosa extraña en el estómago de siempre tener que tocar a la perfección. Llevaba bastante sin sentir eso»

La noche ya estaba encima y las lámparas se empezaban a prender mientras caminaba. Llegué a un cruce de la carretera y esperé frente al semáforo que estaba en verde. Volví a mirar hacia el cielo…

Kaori: “No sabía que el camino a casa después de ir de compras y explorar la escuela con un chico, brillaría tanto las estrellas”

«Tienes razón, hay muchas allá arriba», pensé mientras sonreía…

—… ¿Cuál de todas ellas serás tú?

El sonido de los carros cruzando al frente mío, la luz verde del semáforo encandilándome los lentes, el ruido de las personas al caminar, mi aire condensado al respirar. Todo se me hacía nostálgico.