No fue Mentira (ErenxMikasa)

Capítulo 11

Levi conducía rápido, pero era cuidadoso. Respetaba todas las señales de tránsito y su forma de conducir era perfecta, cosa que fastidiaba a Mikasa. ¿Porqué Levi siempre hacía las cosas así? Era como si fuera bueno para todo: desde los deportes hasta los estudios, desde conducir hasta caminar. ¿Por qué no hacía mal las cosas? Así se le haría a ella más fácil odiarlo... 

-Oye, mocosa, ¿sigues enojada porque reprobé a tu novio?-le dijo él para romper la tensión entre ellos. 

-No es mi novio... pero sí sigo enojada. Eren no se merecía que lo reprobaras. 

-¿Quién dice? ¿Tú? 

-Pues sí. Eren se esforzó mucho ese semestre. 

-Y dime, ¿Quién sabe más del tema? ¿Tú o yo? Porque si mal no recuerdo el que tiene un título en política internacional soy yo, así que quien decide las notas de mis clases soy yo. 

Mikasa se giro hacía la ventana. No era la primera vez que discutía con Levi, desde que eran niños, siempre estaban peleando y era porque los ackermans siempre habían sido muy competitivos. Kuchel, Kenny y el padre de Mikasa habían discutido toda su vida hasta que crecieron y se independizaron y no era porque se odiaran, simplemente les gustaba pelear.

-Hacía tiempo que no iba a tu casa-le recuerda ella mientras se detienen en un semáforo. 

-Es cierto, desde hace... ¿dos años?

-Creo que sí... ¿Cómo está la tía Kuchel? 

-Bien, supongo. A veces está muy cansada, pero la mayor parte del tiempo está bien. 

-Me alegro- y Mikasa lo decía en serio. Sin importar cuanto rencor le guardara a Levi, su madre era una buena persona a la que era imposible odiar. 

Se quedaron callados unos segundos dejándose llevar por el sonido de los autos a su alrededor. Mikasa aprovecha para avisarle a sus padres que llegará tarde  a casa porque irá a visitar a la tía Kuchel, evita mencionar todo el tema del desmayo y que Eren tuvo que dejarla en la enfermería, para que no se preocupen. Sin querer recuerda a Eren... es cierto, no le avisó que ya había salido de la enfermería, seguramente hacía horas que él ya estaba en su casa pero aun así tenía que avisarle, así que intentó llamarlo unas cuatro veces. Eren no respondió ninguna de ellas. Al final Mikasa se limitó a enviarle un mensaje agradeciéndole por haberla llevado hasta la enfermería y comentándole que estaba bien. Eren tampoco le respondió. 

-Entonces... ¿también tienes unos recuerdos que no parecen tuyos?-le pregunta Levi con cautela. Sabe que si quiere obtener información de Mikasa tendrá que preguntárselo con calma.

-No sé si son recuerdos...no sé lo que son, pero creo que sí. ¿Tienes dolores de cabeza también cuando te llegan esos recuerdos?

-¿Dolores de cabeza? No, simplemente... llegan. No sé cómo explicarlo, es como... a veces es porque conozco a una persona nueva y de repente me viene un recuerdo de esa persona aunque no la había visto nunca.

-A mí también- Mikasa estaba segura de que no era una coincidencia. Aunque Levi no sufría de los mismos dolores de cabeza que ella, sí le pasaba lo mismo con esos recuerdos. 

-¿Te pasó con Erwin?- le pregunta Levi expectante, le interesa bastante saber si ella tuvo una sensación similar al verlo. 

-No, no me pasó con el rector Erwin-ante la evidente decepción de Levi, ella decide seguir hablando-pero me pasó con la doctora Hange. La vi hablando con unas personas... todos parecían soldados, hablaban de unos "titanes" pero...

Levi detuvo el auto de repente. El freno hizo que Mikasa se golpeara la cabeza con el respaldo del sillón del auto. Por suerte, él se había detenido en un lugar solitario, de lo contrario habían sufrido un accidente.