c҉Capítulo Diecisiete

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"Cuando te hayas consolado, te alegrarás de haberme conocido".

—El principito, de Antoine de Saint-Exupèry.

-Capítulo Diecisiete-

Estoy inconsciente.

Estoy en medio de un sueño.

Esto, no es real.

¿O sí es real?

Desearía que lo fuera.

Primera vez que deseas algo... Dylan...

Lo sé, cuando se trata de ella lo pido como deseo incluso si eso significa que sea imposible.

Tienen razón cuando dicen que lo único que no tiene solución es la muerte.
Y Dios, si que duele perder a alguien que significo el doble de lo que ilumina el sol en la tierra.

Ella mientras mira cada parte de mi rostro me sonríe ampliamente, pero yo, no puedo, ni siquiera sostener mis manos. Es como si estuviese en un coma donde lo único que puedo hacer, es observar como ella me mira, como hace sus expresiones, sus inquietas manos que siempre fueron así. No puedo sonreírle porque una vez que ella desaparezca como llego, no tendré porque sonreír.

Pero, eso es...

Debo sonreírle, de esa manera ella creerá que estoy bien y podrá descansar.

Dylan, tienes que aceptar que tu madre ya murió y esto es solo lo que tu subconsciente crea porque no puedes dejarla ir, la extrañas, pero ella ya no pertenece a este mundo, y aunque te duela, no volverá.

Quédate con los buenos recuerdos que vivieron juntos y que ella te dio.

Eso me dijo una vez Acoidan pero eso es otra historia y ahora que ya estoy más grande, recordar exactamente eso en mi cuello, me duele, no por el hecho de que algo sujetaba mi cuello, sino que, yo lo quería hacer.

Ayy Dios... soy un chico lleno de penas y dolor.

¿Quién va a querer estar con alguien como yo? , Lleno de inseguridades, miedos y demasiados... traumas.

A nadie le gustaría tener esa relación donde el sexo no tiene que ser lo fundamental, donde no solo se están fijando en lo que tengo ya sea en material... Bueno creo que mi padre ya se encargo de dejar esas enormes inseguridades en mi.

Se supone que siempre hay alguien que nos hace enamorarnos de ese sentimiento de amar a alguien y es tan hermoso cuando es esa persona que llega para quedarse, nos enseña lo que es el amor sano y puro y sobre todo donde ambos se están valorando y se están amando.

Afortunadas son aquellas personas que saben lo que se siente aquello y los que esperan por ello. Reiterando, sé que no llegaré a saber lo que se siente eso, en mi realidad eso está muy lejos para que pase.

Dylan ¿de dónde sacas tantas sabias palabras?

Una persona me enseño que pese a todo los malos momentos que puedan suceder, habrá una cura tan hermosa como el amor, el seguir adelante y disfrutar de la vida, porque fácil no es pero... la vida, no es eterna, es una.

Ella intento acercarse más a mi, pero yo me puse de pie rápidamente y retrocedí. La mire a los ojos fijamente con mis ojos cristalizados. Los ojos de mi madre están fijos en mí, como si hubiese esperado que la abrazara, que le dijera todo lo que, los días me faltaron para decirle.

—¿Sabes cuanto me duele que solo seas el producto de mi imaginación?

Ella suspiro y subió una de sus piernas a la otra y junto sus manos en medio de sus piernas.

¡Tú! Romperás mi corazón ®️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora