CAPÍTULO 7 "Día a día"

207 27 8
                                    


El plan de Lena consistía en que ella y Kara fueran al parque a pasar el rato, dar la vuelta, despejarse y tomar el aire fresco. A pesar de que Kara traía mejor expresión aún se podía ver la tristeza reflejada en esos ojos color mar, el brillo que siempre estaba ahora había desaparecido. Lena siempre notó ese brillo especial en los ojos de la rubia, era casi imposible no fijarse en esos hermosos orbes.

Siendo honestos, a Lena siempre le gustó esa chispa característica de su amiga, por lo que estaba decidida a que el brillo volviera. El plan no era nada de otro mundo, pero era lo que Lena podía ofrecerle a la rubia y también sabía que era algo que la otra chica amaría; primero comerían unos helados en el parque, después irían por unas hamburguesas y finalmente tomarían rumbo en dirección a la feria local, lugar donde consentiría mucho a Kara.

—De vainilla ¿verdad?—preguntó Lena a pesar de que conocía muy bien la respuesta.

—Si gracias—dijo Kara un poco sorprendida de que la pelinegra supiera cuál era su sabor favorito, pero al mismo tiempo, tampoco le sorprendió mucho porque bueno, sabor común, chica común, ya entienden.

—Si te estás preguntando la razón por la que se tu sabor favorito, simplemente adivine—dice Lena al ver la sorpresa en el rostro de Kara.

—Claro, digo, creo que es muy predecible y común—dijo Kara encogiéndose de hombros, tratando de restarle importancia e ignorar las voces en su cabeza que le gritaban lo tonta y poco original que era.

—No realmente, digo, el helado de fresa es muy común y no por eso es el favorito de ninguna de las dos—explica Lena con sencillez— Es solo que tu personalidad va muy acorde con la vainilla, y déjame decirte que la vainilla es casi necesaria para todos los postres ya que le agrega un sabor único e inconfundible, lo cual me recuerda que tu también eres así—dijo Lena viendo directamente a los ojos a Kara, quien, ante las palabras, solo atino a sonrojarse y fijar su vista en el suelo, por lo que Lena sonrió.

—Bueno, ¿caminamos a la feria o nos vamos en coche?—preguntó Lena chupando de su barquillo y cerrando los ojos ante el asombroso sabor, acto que no pasó desapercibido por parte de Kara.

—Creo que prefiero ir en coche... si no te molesta, realmente no tengo ánimos para caminar.

—Lo que m'lady ordene—bromeó Lena, haciendo una reverencia cual caballero del siglo pasado, a lo que ambas chicas rieron al recordar un intercambio similar en la fiesta en el gimnasio de la preparatoria.

Durante el trayecto Lena no sabía si hacer charla o no, o si preguntar que necesitaba Kara, tampoco sabía si lo que estaba haciendo le estaba agradando a Kara.

Lena nunca había sido buena al momento de tener que interactuar, he allí su falta de amigos; y a pesar de que con Kara le resultaba sencillo hablar, eso no le quitaba la ansiedad de encima de sí lo estaba haciendo o no bien.

—Ya llegamos señorita Kieran—anunció el chofer de los Luthor cuando estuvieron en frente de la
feria.—Gracias Sam—respondió Lena con una sonrisa mientras ella y Kara se bajaban del automóvil y emprendían rumbo a la Feria.

—¿Kieran?—preguntó Kara muy confundida.

—Mi segundo nombre es Kieran y solo lo ocupa Sam—explicó Lena— Desde que tengo memoria él siempre ha sido mi chofer, así que no tengo el mayor problema, de hecho él hizo que me gustara ese nombre un poco más—dijo Lena encogiéndose de hombros.

—¿No te gustaba tu segundo nombre?—preguntó Kara con intriga.

—Y sigue sin gustarme mucho...Kieran me recuerda a cuando mis papás me regañaban. Así que créeme, no me gusta que nadie más me llame de esa forma, solo Sam—dijo Lena para después girar su cabeza en dirección a la rubia— Y tú...¿tienes otro nombre?

Enamorados de los Zor-El (Supercorp, Superbat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora