.
.
.
.
.
Erase una vez ..... Naaaa, aquí no comenzamos así, porque no erase una vez, fue siempre.
Mi estilo de vida es fácil de definir, soy una persona que se la pasa haciendo algo simplemente para no desesperarme con la necesidad de una pareja, porque sí, lo deseo, anhelo un esposo, sin embargo, se me está haciendo un poco difícil la búsqueda.
Soy Rozalén, sí, un nombre español en el caribe, pero de eso pregúntenle a mis padres la razón de ponerme ese nombre, volviendo a lo importante, tengo 28 años , soy psicoterapeuta y médico, sí, dos profesiones ya he cursado, trabajo de terapeuta, de médico, Dirijo el ministerio de adoración de la iglesia, a veces hago de voluntaria en los trabajos sociales que realizamos como iglesia y así sucesivamente, es como vivo y ya estoy acostumbrada.
Me independicé a la los 25, pero de vez en cuando amanezco en casa de mis padres, ahhh, se me olvidaba, soy hija de pastores, por lo que también tengo la responsabilidad de pertenecer al ministerio pastoral, aunque no es un trabajo como tal, sin embargo hay responsabilidades que debo asumir, hermoso ¿no?.
Hoy es uno de esos días en los que me dan ganas de abandonar todo y desaparecer en una isla solitaria por al menos un mes, estoy súper agotada y cansada, vengo de una guardia nocturna y estoy que me duermo hasta de pies, los pacientes que llegaron en la hora de la noche fueron un tanto complicados y absorbieron mi energía, pero con amor lo hago, porque amo mucho ambos trabajos, sin embargo, no planeo permanecer así toda la vida, una vez que me case voy a abandonar uno de ellos y así tener más tiempo para mi esposo e hijos.
En la iglesia tenemos una actividad especial que inicia esta noche y tengo que hacer unas cuantas cosas con el ministerio antes del evento, será algo grande, con muchas personas invitadas, tanto de otras iglesias como personas que no son cristianas, nuestra congregación es una de las más grandes de la ciudad y por lo tanto siempre nos visitan predicadores y evangelistas de todo el país, de hecho la persona que va a predicar esta noche es invitado de una de las provincias de país.
Como son apenas las 8 de la mañana me da tiempo a dormir un poco antes ponerme pilas para el evento, le envío un WhatsApp al grupo que tenemos del ministerio de adoración para que estén a las 6 en punto en la iglesia. Salgo del hospital arrastrando los pies y llego a mi pequeño carro KIA, un capricho que tuve a los 26 años, y ya que no tengo muchos gastos económicos pude crear un plan de ahorro con el fin de comprar este vehículo, lo amo con mi corazón y me encanta su color, verde oliva. Salgo del parqueo para empleados y emprendo mi viaje de 15 minutos, el tráfico a estas horas es un poco perjudicial para personas con poca paciencia, detesto los semáforos y creo que ellos me odian a mi, porque siempre tengo que toparme con ellos justos cuando están en rojo, todos, y son como 7 del hospital a mi casa, pero voy bien acompañada de música de un corazón, Funky y Gilberto daza para no dormirme en el camino y que sea mas amenos el viaje.
Siento que hoy se han tomado mas tiempo del debido esos benditos semáforos, tengo sueño. tomo el celular para marcarle a mi papá ya que ayer no lo hice; pero es en vano mi intento ya que suena y suena y no lo toma, llamo a mi mamá y lo mismo, me manda al buzón; decido ir a casa a verlos, y allá me quedo el día, total, tengo la mitad de mi ropa en mi viejo closet. Tomo el desvío a su casa que gracias a Dios es por una zona donde no hay tantos semáforos por lo que llego en poco tiempo. Agarro mi cartera, el celular y salgo del coche que he parqueado en el frente de la casa. Aún conservo mis llaves, por lo que entro sin problema al interior.
Es fácil saber cuando no hay personas aquí, porque si mi mamá está en casa hay música puesta, pero hoy todo está muy silencioso por lo que asumo que no hay nadie en casa, normal, ellos salen mucho a compromisos de la iglesia, mas tarde los llamo, por lo pronto voy a dormir. Agarro un vaso de agua de la cocina y subo a lo que es mi antigua habitación. Esta casa no es muy grande ni muy pequeña, tiene tres habitaciones, tres baños y medio, una cocina, sala familiar, sala social, estudio, lavadero y un hermoso patio trasero. Mi habitación es la del fondo y da al patio trasero, la remodelé cuando obtuve mi segundo sueldo una vez que empecé a trabajar como terapeuta en el hospital, no era mucho pero me alcanzó para ampliar la ventana y hacer una pared entera de cristal, esa tiene vista al patio y está frente a mi cama, por lo que cuando me despierto en las mañanas lo primero que veo es el sol brillando en los cogollos de las palmeras que están sembradas en el fondo del patio, y cuando amanece lloviendo no me quiero salir de la cama, porque amo ver la lluvia caer y hacer su danza con las hojas de esas palmeras.
ESTÁS LEYENDO
El esposo que pedí - ROMANCE CRISTIANO
RomanceMe estaba quedando dormida cuando escuché levemente la puerta del cuarto abrirse - Bendición Má No recibo respuesta, lo cual es raro ya que mi madre siempre me devuelve con un "Dios te bendiga". abro los ojos y perezosamente me siento en la cam...