𝗘𝗹 𝗾𝘂𝗲 𝘀𝗲 𝗲𝗻𝗮𝗺𝗼𝗿𝗲, 𝗽𝗶𝗲𝗿𝗱𝗲 - 𝖪𝗇𝗈𝗐𝗆𝗂𝗇. [EN EDICIÓN]

Capítulo nueve : Primer beso.

Ambos chicos se separaron rápidamente al escuchar esa voz, pues estaban en completo silencio y no habían visto a nadie que estuviera en la cocina más que ellos dos.

Salieron de la cocina para ver quién había interrumpido su precioso momento, pero se arrepintieron al ver a Hyunjin y Jisung prácticamente devorandose en el sofá.

--¿Deberíamos salir y llevarnos a JeongIn?

--Por el bien de su poca inocencia, sí.

Los dos rieron y salieron de la casa con cuidado de no ser vistos, pues ellos no eran iguales a las dos bestias que tenían como amigos, no querían interrumpir un momento así.

Al salir se arrepintieron una vez más, se encontraron a JeongIn y Chris hablando, o mejor dicho coqueteando, probablemente acabarían como Jisung y Hyunjin en unos minutos, no vieron por ningún lado a Felix y Changbin pero sinceramente ya no tenían intenciones de saber donde estaban.

Ninguno de los dos eran capaces de mirarse a los ojos, era verdad que ambos querían que sucediera, pero aún así, no sabían que hacer en esas situaciones.

Seungmin jamás se imaginó que estaría a punto de besar a Minho, el chico del que juró jamás enamorarse, el chico con quien siempre competía para demostrar que podía ser mejor que él, ahora es el mismo que lo está haciendo caer a sus pies.

El pelirrojo pegó un brinco al sentir de nuevo el tacto de Minho, esta vez era para poner su chaqueta sobre el, tal como en las películas.

Aunque dudaba mucho que en las películas los besos fueran interrumpidos de esa forma.

--¿Que haces? Debes tener frío, yo-..

--Sé que tienes frío, Minnie, estás temblando-- Dijo riendo.

--Pero puedes enfermarte, tu ropa no es muy abrigada que se diga-- Dijo bajito intentando no mirarlo.

--Prometo abrigarme mejor la próxima vez.

--Aunque te ves bien así-- Murmuró, siendo escuchado por Minho de todas formas.

Ambos chicos siguieron caminando, Minho estaba feliz aunque las cosas no hubieran terminado de la mejor forma, aún así, el hecho de que Seungmin le haya seguido el juego y estuviera a punto de besarlo era demasiado avance para él.

Por otro lado, Seungmin se sentía bien, no se arrepentía de haberlo hecho aunque no estaba del todo completado, pero lo estaría.

Se sentaron en un parque que estaba cerca, al parecer para ellos era normal sentarse en parques a altas horas de la noche mientras hablaban, como si fueran inmortales.

Aunque, a decir verdad, a ninguno le importaba su alrededor, siempre y cuando estuvieran juntos lo demás pasaba a segundo plano, aunque no lo dijeran en voz alta, ambos sabían que era así.

--Minho-- Llamó Seungmin una vez estuvieron sentados en el banco.

--¿Sí?

Seungmin desvió la mirada mientras jugaba con sus manos, jamás le había preguntado a Minho acerca de su vida amorosa, sentía curiosidad por saber si le gustaba alguien.

Por alguna razón, la idea de que Minho estuviera enamorado de alguien más no le gustaba, sentía que su corazón dolía y simplemente no quería que eso sucediera.

Aún no quería aceptarlo, pero en el fondo sabía que se estaba enamorando de Minho.

--A ti... ¿Te gusta alguien?

Minho lo miró un momento pensando que podía responderle, no iba a decirle que él era quien le gustaba si hasta hace solo unas horas estaba llorando por el hermano de Hyunjin.

Deseaba con todas sus fuerzas gritarle al mundo que le gustaba Seungmin, que era el chico con quien quería compartir su vida y por supuesto que seguiría luchando por cumplirlo, pero ese no era el momento, quería asegurarse de que Seungmin sintiera lo mismo.

Fue ahí donde una idea vino a su mente, no quería hacer enojar a Seungmin pero solo un poco de diversión no haría daño, además de que eso le serviría para comprobar sus sospechas.

--En realidad sí, no muchas personas saben que me gusta a pesar de que soy demasiado obvio, sigo sin saber como él aún no lo sabe.

Bingo.

Seungmin apartó la mirada, pero en lugar de ésta expresar tristeza o algo parecido expresaba molestia, tenía de nuevo la vena marcada en su frente y su ceja levemente arqueada, ahí Minho supo que había dado en la llaga.

--¿Por qué lo preguntas, Minnie?-- Preguntó acercándose un poco a él con una sonrisa divertida.

--Solo sentía curiosidad, es todo-- Respondió serio y se apartó, Minho estaba muriendo de risa por dentro.

--Ahora que lo pienso, es demasiado ingenuo como para darse cuenta.

--Deberías decirle que te gusta, ¿no crees? No es adivino-- Seungmin ya estaba que explotaba de los celos, sus orejas comenzaban a ponerse rojas.

--Tal vez, pero prefiero que se dé cuenta sólo, es más divertido, ¿no crees?

--No lo sé, Minho-- Se levantó de su lugar, siendo seguido por el castaño, quien al parecer se estaba divirtiendo con la situación.

--¿Estás bien? Tu cara está roja.

--Sí, estoy bien, ¿podrías dejar de molestar?

--¿Por qué estás molesto? ¿Dije algo malo?-- Preguntó Minho con un puchero, aunque moría por reírse y llenar de besos a Seungmin, se veía tan tierno de ese forma.

--No, ya te dije que me dejes tranquilo.

--Bien, lo haré, pero hay algo que debo completar primero.

Antes de que Seungmin pudiera siquiera moverse, Minho ya lo había atraído hacia él, acercando sus rostros hasta sentir sus respiraciones mezcladas, ambos respirando el aroma del otro.

La molestia abandonó el rostro de Seungmin, ahora solo observaba a Minho, curioso por lo que haría.

Sin mucho tiempo que perder, el castaño acortó la distancia que había entre ambos y tomó a Seungmin por la cintura, acercando más su cuerpo si es que eso era posible, el más bajo pasó sus brazos alrededor de su cuello y se dedicó a disfrutar el momento.
Tal como se lo había imaginado, los labios de Minho eran suaves y delicados, tenían un ligero sabor a cereza, probablemente causado por el bálsamo que utilizaba para hidratarlos, sus movimientos estaban lleno de delicadeza y amor, sin duda alguna esa era una sensación que quería sentir toda su vida.

Por el lado de Minho las cosas no eran muy diferentes, siempre imaginó como seria besar a Seungmin, pero sin duda alguna se había quedado corto todas esas veces, se sentía como si estuviera en el mismísimo cielo, sus labios eran esponjosos, tal como una nube, deseaba poder besarlos por toda su vida.

Ahora lo sabían, ambos se necesitaban más de lo que llegaron a imaginar, y ahora que se tenían, no iban a separarse jamás.

♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡

Actualicé dos veces en un día, milagro, I know. Lo hice porque no tendré tiempo a partir de mañana y no quería dejarles la intriga así que bueno, ahí tienen.

No sé si esté del todo bien, siento que pude haber hecho algo mejor, igualmente espero que les guste :(

Para lxs que desconfiaron de Seungmin, sorpresa, fue Jisung.