Capítulo 7: El Festival de Otoño (parte 2)

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―Prepárate. Podría tener un mecanismo explosivo dentro.

Spinner asintió. ―Cuando quieras.

Ya una vez protegidos y lejos de los héroes o la policía, ambos villanos se disponían a abrir esta caja fuerte que habían robado.

Compress había caído en cuenta que forzarla era totalmente innecesario. Podría comprimir la cerradura individualmente, abriéndola para él.

Sin embargo, algo le daba un mal presentimiento. Escuchaba un leve ruido en el interior de la caja, por lo que estaba preparado para cualquier cosa. Ambos sabían que era mejor arriesgarse a irse sin nada después de tanto trabajo.

Con un poco de suerte incluso encontrarían como financiar el robo a Shigaraki. Probablemente continúe en esa ciudad de mala muerte donde lo abandonaron, y llegar allá no les saldrá barato, mas aun si quieren salir desapercibidos.

Basta de rodeos. Compress apoyó su mano en la caja. ―¡Vamos!

Tras comprimir la cerradura, dio un gran salto hacia atrás junto a Spinner y ambos se quedaron observando la caja, en silencio, esperando una alarma o un explosivo...

Sin embargo... ―¿Regresan?

―Una... ¿Voz?

―Una radio ―aclaró Compress―. Debe de ser una grabación...

Veo que su posición cambió drásticamente... ¿Son ustedes, amigos de Shigaraki Tomura?

―¡¿Ah?! ―Spinner observó a su compañero―. ¡Esa cosa no es una grabación para nada!

Hicieron mucho ruido en su ataque a esa organización. Los medios no paran de hablar de ello. Aunque era esperable. Después de todo eran los mejores en cuanto a ejecutar encargos en el bajo mundo. No podrían atacarles y derrotarles tan fácilmente  ―del otro lado, cierto Doctor sonrió. Las vueltas que daba el destino algunas veces eran completamente imprevistas―. Escúchenme. Se muy bien que se separaron de Shigaraki. Él se infiltró entre los Yakuza y robó a la niña que se sospecha que era la materia primera de las balas borradores de Dones, además de un estuche aun desconocido. Creo que es mas que obvio que quiero que vallan por él.

―¿Cuanta información posee este tipo? Debe de ser un alto mando de alguna cosa... ―susurró Compress.

Spinner chasqueo la lengua. Sabia que Shigaraki lo había logrado. Esto los ponía en una peor situación que antes. Ese tipo del otro lado no sabia que los había traicionado.

Se sospecha que él los envió a una misión o que la Liga de disolvió... ¿Es la segunda, no es así? ―se escuchó al doctor reír levemente―. No importa. Algo esta marchando mal con Tomura. A este paso ya debería de haberme contactado... pero nada. Parece que perdió el camino, y necesito que ustedes vuelvan a mostrárselo.

―No sabe que nos matará si eso sucede ―Compress se acercó a la caja para ver si llevaba algo de dinero―. Tomemos esto y desaparezcamos de aquí.

Al abrir la puerta de la caja fuerte quedó hecho piedra.

―¿Ah? ―Spinner se acercó―. ¿Que pa...? ¡¿Ah?!

Yenes. Muchos, muchos yenes.

Comprendo la dificultad de esa labor, por lo que pueden quedarse con el dinero que utilicé para contratar a esa panda de incompetentes. A cambio, vallan a la dirección que les detallaré a continuación y encuentren cierto regalo. Usen estos recursos como les parezca, pero el Nomu debe de regresar aunque este muerto.

―¡¿Un Nomu?! ―ambos se observaron. ¡Encontraron una mina de oro! ¡Este tipo no solo tenia información, si no que tenia recursos! ¡¿Era uno de los cabecillas de la Liga y no lo sabían?!

[Cancelada] ¿Una Vida Normal?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora