[Cancelada] ¿Una Vida Normal?

Capítulo 10.2: Reencuentro

―...

―V-Vamos... Tomura me dijo que tenias ganas de verme... ¿No?

―Lo siento... ―Eri apretó su abrazo. No soltaría a Tenko en algo de tiempo.

Este observó a Koichi. ―¿Que es esto?

El chico sonrió. ―Vine a pagar el primer mes. El resto estará en tus manos, Tenko.

Tomura negó. ―No me refiero a eso ―corrigió mientras apuntaba levemente a Eri―. Creí que sabias bien mi postura respecto a esto. 

Koichi le restó importancia. ―Nadie sabe donde vives. Esta tan segura contigo como lo está conmigo.

Tenko oscureció su mirada. ―Si no lo recuerdas, pedazo de imbécil, tu mismo me disparaste con esa cosa. Aunque sea lo mismo que esté contigo o conmigo, tu tienes un Don, yo no. Al menos tu serias una buena distracción.

Izuku sonrió tímidamente. ―T-Tampoco hay que ponernos violentos, Tomura. Técnicamente estará mas segura ahora que estoy aquí.

―... ―Tenko suspiró con resignación―. ¿Que pasa, Eri? ―preguntó a esta mientras bajaba la mirada con una leve sonrisa en su rostro―. Hace mucho que no te veía. ¿Estas bien? ¿Evitaste los chocolates? Tu cuerno... ¿Creció?

Koichi se frotó la nuca. ―¿Tambien lo notaste? Nunca me dijiste cual era su Don. Me alarmé un poco, mas aun sabiendo que no puedo llevarla a un hospital para que le hagan algún chequeo.

―No se cual es su Don. Overhaul nunca lo dijo ―observó a Izuku―. ¿Los informes de inteligencia de Nighteye decían algo, Midoriya?

Este negó. ―Solo sabíamos los Dones de algunos de sus secuaces, pero incluso así habían algunos sin Dones registrados. Eri y su abuelo son unos de ellos.

Tenko solo asintió. «Solo espero que no sea un Don extraño. Posiblemente sea de tipo Mutante como el mío, pero no es tan violento» Pensó mientras la observaba. ―Ya puedes soltarme.

Ella negó.

Levantó una ceja. Normalmente no respondía a cosas tan mundanas. Hace dos meses hablaba solo cuando estaba realmente en confianza, y ahora incluso rechaza hacer algo que él dice.

Sonrió. Parece que se perdió de mucho mientras estaba hospitalizado. ―¿Sabes que tengo buena vista, Eri?

La niña levantó la mirada. ―¿Buena vista?

Asintió, inclinándose levemente y apoyando su mano en la cabeza de ella, moviendo un poco su cabello. ―Tu color natural esta saliendo. Además el negro esta algo diluido.

Koichi sonrió avergonzado. ―¿De verdad? Lo siento. No lo noté.

Izuku no lo comprendió. ―¿Por qué el suyo se diluyó pero el tuyo parece prácticamente natural? ¿Te teñiste en el hospital?

Tenko le restó importancia. ―Eso no importa ―observó a Koichi―. Dame dinero. Iré por un tinte para el cabello.

Resignado, este sacó su billetera como si realmente no tuviera la opción de decir «No». ―Bien...

Tras recibir el dinero en sus manos, Tenko nuevamente se colocó los lentes y se marchó sin mediar palabras. Incluso Eri estaba algo impactada ya que ni siquiera se despidió.

―... ―Izuku nuevamente sonrió―. Me alegro que realmente estés bien... Eri.

Ella no se volteo para verle. Solo bajó la mirada levemente. ―Lo siento...

―¿Eh? ¿Por que lo sientes?

―Tu y Lemillon tambien se lastimaron por mi culpa... ―murmuró ella con notable tristeza―. Y lo mismo pasó con Tenko cuando esa cosa vino por mi...